Narra Ignacio
Había cometido un grave error y eso lo sabía. Me estaba lamentando una y otra vez por la estupidez que había comentado. Amaba con el alma a Meloddy, pero fui un completo idiota, ni siquiera yo mismo me reconocí por haberla tratado así, pero me atemorice y no supe cómo actuar y cuando quise remediar mi error ya ella se había ido lejos.
Algunas veces actuamos impulsivamente sin darnos cuenta de que más adelante nos arrepentiremos y nos lamentaremos rotundamente, deseando dar marcha atrás para ir justo al momento en el que tomamos una decisión la cual en su momento pensábamos que no nos importaría, pero que luego nos dará a demostrar todo lo contrario, destrizándonos el alma según pase el tiempo.
Justo en este momento estoy tocando el timbre de la casa que Bella me dijo con la esperanza de poder conocer a mi hija. Lo sé es algo cínico de mi parte llamarla así cuando al darme cuenta de su existencia dije todo lo contrario. La puerta fue abierta dejándome ver a Meloddy del otro lado, no sé qué sentí exactamente al verla. Nuestras miradas se conectaron y es evidente su asombro.
Las palabras no lograban salir de mi boca y al parecer de la boca de ella tampoco podía salir nada.
Ignacio: puedo pasar? – pregunté sin saber exactamente de donde salieron esas palabras de mi boca, Meloddy no hace más que verme.
Mia: mamá – se hace presente una niña risueña que evidentemente es mi hija, mi vista no se quita de ella.
Meloddy: Mia ve a dentro por favor – la niña levanta su mirada y me ve, su mirada de conecto con la mía.
Mia: ¿papá llegará tarde hoy? – preguntó viendo a Meloddy y justo en ese momento fue en el cual el corazón se me partió en mil pedazos al escuchar a mi hija llamar papá a otro hombre el cual no soy yo, y sí, todo esto es fruto de mis estupideces.
Los días pasaban y se hacía cada vez peor, mamá, papá incluso Ian ya han conocido a mía y en cierta forma Mia no los rechaza, pero conmigo es de una manera distinta, pues no permite que siquiera me acerque a ella. Si se lo preguntan, si Mia sabe acerque de mi existencia y de que soy su padre y creo que quizás eso sea peor, pues me repite una y otra vez que yo no soy su padre y que no me quiere como tal.
Han pasado algunas semanas luego de que fui por primera vez a verla, desde entonces he venido constantemente, intentando remediar si quiera una pizca de todo el error que cometí.
Ignacio: quiero que me veas como tu padre, sé que he estado ausente, pero me arrepiento de eso.
Mia: ¡No! Tú no eres, mi papá es Mateo y es a él a quien quiero – me grito grito haciendo puchero de enojo y cruzada de brazos, me sentía frustrado sin saber que hacer, pase mi mano derecha por mi cabello por la frustración – ¡Papá! – grito emocionada, mi corazón se aceleró al escucharla y la miré con los ojos llenos de ilusión, pero mi frustración volvió y con mayor intensidad al ver que Mia no se refería a mi, sino que se estaba refiriendo a Mateo, vi cómo ella corrió a él para abrazarlo. De mi boca se escapo una irónica sonrisa, ver esa escena me llenaba de frustración.
Mateo: Vete de mi casa – me pidió enojado.
Ignacio: yo soy su padre – dije casi en silencio.
Mateo: un padre no le hace esto a sus hijos – dijo dándole una mirada a Mia y luego una a mi llena de rabia, vi cómo tomó a la niña en brazos para llevársela de la sala, y sí él tenía toda la razón, dentro de mi todo estaba destrozado.
Ignacio: Meloddy yo.... – ella no permitió que siguiera.
Meloddy: Ignacio no digas nada y ya vete – en su expresión puedo notar decepción y enojo – ya vete – repitió, y yo no pude hacer más que suspirar y salir de allí.
Narra Gabriela
Me duele ver a Nacho de ese modo, no soporto verlo de esa manera. Hoy aparentemente explotó con la situación y es muy posible que por eso no le permitan ver a Mia, al parecer la aterrorizó. Él se ve desecho, no sale si quiera de su habitación, sé que se arrepiente de principio a fin y que daría todo para retroceder.
La vida está compuesta de momentos, momentos que te llevarán a otros momentos y es por eso de que debemos ser cuidadosos con las decisiones que tomamos, tengamos precaución en las acciones que hacemos porque eso denominará nuestro futuro, de lo que decimos en especial de lo que les decimos a los demás, porque puede de que más adelante nos arrepintamos completamente. Existen palabras que hieren y que aunque nosotros quienes la decimos no lo veamos así esas palabras se quedan grabadas en la memoria de esa persona, repitiéndose una y otra vez lastimándolos cada vez que se repite en su mente, seamos cuidadosos para que nuestra vida esté llena de momentos hermosos y esos momentos lleven a otros momentos igual de hermosos y que no hayan remordimientos ni tengamos arrepentimientos.
En estos momentos me encuentro en casa de Meloddy justamente en su sala, junto a mamá y a Mia. Mamá le muestra nuestro álbum familiar y le esta mostrando fotos de mis hermanos y mías de cuando éramos pequeños.
Gabriela: en esta foto que ves aquí Nacho se ensucio todo de lodo, era como si se diera un baño de lodo – Mia sonrió y por más insignificante que sea ya es un avance.
Mia: así como los cerdos – dijo sonriendo, me fue inevitable no sonreír, vi a mamá y ella también estaba sonriendo.
Gabriela: exacto, así como los cerdos. Eres una niña muy inteligente – le sonrió mientras la veía sonriendo con devoción y pasando una de sus manos con cariño por la cabeza y cabello de Mia, Mia cambio de página el álbum que mamá tenía en sus piernas.
Mia: ¿y está? – preguntó, era una foto donde estábamos los tres, Ian sonreía, Nacho lo veía mientras que yo lloraba.
Isabella: pues resulta que Ian me había quitado mi juguete favorito, mientras que Nacho se enojó y luego rescato mi juguete como todo un superhéroe, porque yo lloraba y a él no le gusta verme llorar o ver llorar a las personas que ama – Mia observo la foto y luego a mi.
Mia: pero él me hizo llorar a mí y dijo que me amaba ¿entonces no me ama? – yo la vi y le sonreí.
Isabella: te ama con toda sus fuerzas.
Gabriela: y lo ultimo que quiso hacer fue hacerte llorar, se arrepiente. ¿Sabes? Algunas veces nosotros los grandes cometemos errores o decimos cosas que no queremos y nos arrepentimos porque hacemos llorar a las personas que realmente amamos – dijo dulcemente, para luego pasar a casi la última página, donde estaba un dibujo que había hecho Nacho con sus propias manos.
Mia: ¿esa soy yo? – le preguntó con curiosidad, mamá asintió sonriendo y con los ojos llorosos.
Gabriela: así es, esa eres tú Nacho te dibujo con su propio puño y manos. Lo hizo pensando en ti ¿está bonito? – Mia sonrió con cierto brillo en los ojos, mientras asentía constantemente.
Mia: estoy bonita – dijo con entusiasmo, mamá saco el dibujo y se lo ofreció a Mia, Mia miro a mamá confusa.
Gabriela: estoy segura que ha Nacho le encantará saber que tú lo tienes. Es tuyo – le dijo, y Mía acepto el dibujo. Estoy completamente segura de que pronto Mia querrá a Nacho, a pesar de que sé que se ha equivocado, sé que está muy arrepentido y que haría lo que fuera para cambiar su error.
Mamá hablaba con Meloddy, Mia ya no estaba presente.
Meloddy: él mismo fue quien provocó todo esto, jure que a mi hija nunca le haría falta su padre y que yo le daría todo el amor de este mundo, que solo seríamos ella y yo. Y no me arrepiento en lo más mínimo Nacho no tenía siquiera el derecho de saber de su existencia después de todo lo que hizo – me duele escuchar eso, por las mejillas de mamá resbalaban dos lagrimas, las cuales limpio rápido – lamento ser tan dura, pero es la verdad.
Gabriela: es mi hijo y me duele escuchar esas palabras, ya eres madre y sé que sabes de ese sentimiento, pero a pesar de que sea mi hijo no voy a justificar lo que él hizo y quiero que sepas que te entiendo, porque justo cómo actuaste es como yo hubiese actuado, más bien cómo iba actuar cuando me di cuenta que estaba esperando a los gemelos y por ende te entiendo perfectamente. Pero solo te pido un favor, dale la oportunidad de pasar tiempo con Mia, te lo pido con el alma.
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Amor y Sufrimiento #2
RomanceSegunda parte/temporada de: Odio, Amor y Venganza. Soy Isabella, mejor conocida como la niña mimada y caprichosa de los Anderson. Pero nadie de ellos me conoce, todos simplemente hablan. Yo no era así, a mi me convirtieron en alguien fría y sin sen...