Cap. 5 Vamos al club.

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Nicolás seguía estornudando.

Nicolás: es lo que me faltaba.

Isabella: ¿es que quien te manda a meterte en la piscina? si sabias que te ibas a resfriar - él me ve sin expresión como si tuviera la culpa - oye, yo no tuve la culpa, tú solo te lanzaste.

Nicolás: intentaba de que no te resfriaras y quien terminó enfermo fui yo.

Isabella es que eres demasiado ñoño.

Nicolás: no soy ñoño - dijo antes de estornudar una vez más.

Isabella: ¿ves? Claro que eres ñoño, espera aquí - dije para salir al balcón y trepar la barandilla y cruzar al otro lado, entre a mi habitación, luego baje a la cocina para prepararle un té caliente, espere hasta que estuvo listo, fui a mi habitación para salir al balcón he ir hasta la habitación de Nicolás lo cual fue algo difícil con él té - tomate esto, necesitas tomarlo.

Nicolás: ¿me pretendes envenenar con eso? - preguntó con el ceño fruncido.

Isabella: Ay por favor, ¿crees que perdería mi tiempo envenenándote? - le pregunté fingiendo indignación - ya bébete él té antes de que se enfríe - el me miro y luego empezó a tomar el té.

Nicolás: no está mal - dijo, yo le di una media sonrisa. Él estaba sentado en la orilla de la cama y yo husmeaba con la mirada, él cuarto está bien arreglado, se ve que es ordenado hay una foto en una mesa de noche de él y una chica, no logro ver bien la chica por la distancia, y tampoco me acerco a verla bien, no quiero que diga que soy entrometida - ¿por qué te comportas así de repente conmigo? - me pregunto sacándome de mis pensamientos.

Isabella: porque de alguna manera es mi culpa y no quiero sentirme culpable si empeoras - le respondí mirándolo, sus ojos son tan penetrantes, que nadie se cansaría de verlos.

Nicolás: entiendo tu punto, y gracias por el té.

Al otro día...

Gabriela: ¿cómo has seguido Nicolás?

Nicolás: ya mucho mejor, gracias por preocuparse - le respondió mientras me dio una mirada.

(....)

Estaba en un banco revisando unos documentos en mi laptop.

- ¿entonces me dices que estuviste con él?

- así es, estuve con nada más ni nada menos que Nicolás Williams - escuche a dos chichas que pasaban, yo negué con la cabeza levemente y sonreí sarcástica. Que tontas son.

Después de un rato había terminado, cerré mi laptop y vi a Nicolás frente a mi.

Isabella: valla veo que va enserio su acoso señor Williams - él me miro serio y luego sonrió.

Nicolás: ya tomarías tú qué te acose.

Isabella: no soy igual a las chicas que está acostumbrado a tratar - dije entre los dientes.

Nicolás: ¿qué dijiste? - yo lo miré mientras recogía mis cosas.

Isabella: ¿yo? Nada - dije con una sonrisa falsa.

Nicolás: ¿ya te vas? - yo le asentí - te llevo - me dijo.

Isabella: me voy con Ignacio, debe de estar esperando.

Nicolás: él ya se marchó, me pidió que te llevara. Pero si no quieres está bien, ya me voy - dijo con intención de empezar a caminar.

Isabella: no, esta bien - le dije, no podría negarme cuando maneja tal preciosidad - ¿pero puedo pedirte algo? - él me miro con una ceja levantada - que me permitas manejar - él me miro serio y a la vez sorprendido.

Amor y Sufrimiento #2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora