"𝐓𝐇𝐄 𝐁𝐋𝐀𝐂𝐊 𝐕𝐀𝐍" || 𝑹𝒐𝒃𝒊𝒏 𝑨𝒓𝒆𝒍𝒍𝒂𝒏𝒐

The Search 9#

Narrador:

Dieron las 10 y ella no regresó a casa, su padre estaba preocupado pero a la vez enfadado, sus hermanos estaban preocupados por ella, las esperanzas de que su hermana cruzará la puerta principal de su casa aún estaban en pie, su padre los envió a dormir, les dijo que seguramente ella llegaría por la mañana, ellos obedecieron, esperando aún la llegada de su querida hermana.

Llegó la mañana, desafortunadamente ella no llegó a casa, está vez, se preocuparon enserio, por lo que su padre llamó a la policía para comenzar una búsqueda.

La policía interrogó a los vecinos y a personas cercanas, como amigos y familia, entre ellos, las personas con las que había estado esa noche.

-¿Dónde estuvo ayer por la noche su hija? - Preguntó uno de los detectives

-Mis hijos me informaron que ella salió con uno sus amigos, es un niño, se llama Robin are-a - Tartamudeó el señor Blake.

-Arellano papá - Completo Finn, al ver el tartamudeo de su padre.

-Eso, Arellano, salieron a ver una película a eso de las 5 o 6 de la tarde y les dijo a sus hermanos que volvería a las 8, pero por desgracia, no fue así.

-Sabe dónde vive ese chico? - Preguntaron.

-Yo lo sé, el es mi mejor amigo - Habló Finney indicándoles dónde estaba la casa de Robin- pero créanme, es un buen chico, sería incapaz de hacerle algo a mi hermana, el le tiene mucho aprecio.

-Tendremos que interrogarlo mañana por la tarde, por mientras, algunos de nuestros compañeros estarán buscando por la zona, haremos todo lo posible por encontrar a su hija, se lo aseguramos.

Finney llamó de inmediato a Robin.

-Miranda? - Contestó el

-No Robin, soy yo, Finney.

-Ah Finn, ¿qué ocurre?

-Mira es...complicado.

-Le pasó algo a Miranda? - Pregunto angustiado

-Robin, ella...no volvió a casa ayer por la noche.

-Finney, no es gracioso.

- Esto no es una broma Robin, no sabemos nada de ella desde anoche.

La culpa que sintió Robin en ese momento era inexplicable, un nudo se le hizo en la garganta, Finney seguía explicandole lo que pasó y por qué iban a ir a interrogarlo.

-¡Fue mi culpa Finn, yo deje que ella se fuera sola y mira lo que pasó! - Exclamó

-Robin, tienes que calmarte, no fué tu culpa, Gwen y yo lo sabemos perfectamente, es necesario que te interrogen por que eres la ultima persona que la vio, no por que sea tu culpa, así que no te culpes por esto, es algo que nos duele a todos, pero tenemos que tener esperanza de que la encuentren, es lo único que nos queda por hacer.

Robin colgó el teléfono, puso las manos sobre su rostro e intentó conter las lágrimas de culpa que ahora invadían sus ojos, el nunca había experimentado ese dolor de pecho tan horrible, seguía culpandose y lamentándose por dejarla ir sola, era realmente su culpa?

Mientras tanto, los detectives encontraron en una banqueta a sólo dos calles de la casa de los Blake, un ramo de flores junto a un globo negro. Lo tomaron y lo llevaron a la oficina de policía, era un elemento importante para dar con el paradero de ella.

Miranda despertó en un sótano espeluznante, estaba acostada sobre un colchón viejo, las paredes estaban sucias y raras, sus ojos estaban hinchados y dolían, tomó conciencia de que le había pasado y se levantó rápidamente a examinar el lugar, prendió una vieja lampara que colgaba del techo, había un retrete, algo sucio, volvió a donde estaba el colchón y dirigió su mirada hacia el costado, había un teléfono negro, rápidamente descolgó el teléfono e intentó llamar a su casa, pero era obvio que ese teléfono era viejo, y no servía. Comenzó a idear planes para escapar, no se iba a quedar de brazos cruzados, ella tenía que salir de ahí como fuera.

Estaba tan ocupada pensando en su plan, que no se percatado de que el raptor había entrado.

-¿Que quieres?

-Cómo están tus ojos?-Preguntó con un tono... Extraño

-Qué te interesa - Respondió ella algo enojada.

El hombre se quedó callado, suspiro y cerró la puerta.

-Qué le pasa a ese idiota-Pensaba ella, volviendo a sumergirse en sus propios pensamientos, pero la interrumpió el sonido de él teléfono detrás de ella, descolgó el teléfono sin pensar.

-¿Hola? Por favor ayúdeme - Dijo en un tono desesperado.

Era de esperarse, nadie contestó, pero se escuchaba una extraña interferencia al otro lado de la línea, volvió a dirigir el teléfono a su oído, pero nuevamente nadie dijo ni una sola palabra, por lo que tuvo que colgar el teléfono nuevamente.

Llegó la noche, Miranda estaba recostada en el viejo colchón que estaba en ese horrible sótano, mientras su hermana Gwen estaba en su habitación, rezandole desesperadamente a Jesús, le pedía un sueño sobre su hermana, para encontrarla antes de qué algo malo le sucediera.Cuando se fué a dormir, sus rezos fueron escuchados.

"Mi hermana iba mirando un ramo de flores, hasta que se topó con la camioneta que siempre aparece en mis sueños, el mismo hombre bajó de ella, solamente miré como el ramo que ella traía entre sus manos caía al suelo y la camioneta avanzaba"

Fué como Gwen le relató su sueño a los detectives, antes de que fueran a interrogar a Robin, ellos se miraron un segundo y le mostraron a Gwen el ramo de flores que habían encontrado.

-¿Cómo este ramo? - Dijieron mientras le enseñaban el ramo de flores, que todavía conservaba su fresco aroma.

-Sí... - Respondió la pequeña Gwen asintiendo con la cabeza.

Después de eso los detectives fueron a la casa de Robin, tocaron la puerta y les abrio un niño con una banda en la cabeza, era tal y como Finney lo había descrito.

-Buenas tardes... Es usted el joven Arellano? - Preguntó uno de ellos.

-Sí...sí, pasen - Respondió el, abriendo completamente la puerta de su hogar.

Ellos comenzaron con la interrogación, le preguntaron de dónde conocía a Miranda, hace cuánto y cómo.

- Y...díganos, ¿Cómo conoció a la joven Miranda Blake?

-Bueno, ella me llamaba la atención desde hace tiempo, siempre la veía en clase de matemáticas, un día me enteré de que ella era hermana de mi mejor amigo, el nos presentó y ahí comenzamos a tener más comunicación.

-Usted le dio este ramo? - Dijo uno de ellos poniendo el ramo sobre la mesa.

-Sí, se lo dí ayer, antes de que se fuera camino a casa.

Las investigaciones continuaron, Robin siempre estaba atento de las noticias de la chica que tanto quería, iba a visitar a los hermanos Blake para darles ánimos, aunque el tampoco tenía muchos, junto con Finney, pegaban los carteles de desaparición, con el tiempo, las noticias de la búsqueda fueron disminuyendo con el tiempo, cada día había menos esperanzas de que la encontrarán.