"𝐓𝐇𝐄 𝐁𝐋𝐀𝐂𝐊 𝐕𝐀𝐍" || 𝑹𝒐𝒃𝒊𝒏 𝑨𝒓𝒆𝒍𝒍𝒂𝒏𝒐

She left 16#

Robin Arellano:

Después de la muerte de los niños perdidos y el arresto del responsable, Denver esta en silencio, todo está apagado, no se siente la alegría y luz que tanto caracteriza a sus calles, ese idiota hizo que vivir aquí fuera una tortura total, la tranquilidad de los padres desapareció, al igual que las sonrisas.

Los respectivos funerales de los chicos se hicieron, los padres de cada uno de ellos estaban destrozados, al igual que el de Miranda...hoy es su funeral, nunca pensé que estaría arreglandome para el funeral de ella, mi mundo, mi vida entera, quien me motivaba a levantarme todos los días, ella se fué.

Me puse el traje color negro que nunca use, una corbata que mi tío me ayudó a arreglar y la bandana que ella amaba que me pusiera, la de color negro.

-Ella esta cuidándote desde donde esté, Robin- Mi tío se esforzó por hacerme sentir mejor, pero para mí, era imposible, hice una mueca.

Llegué al lugar, Gwen estaba rota, lágrimas caían de sus ojos... Y ni hablar de Finn, su padre estaba sentado, con las manos sobre el rostro, fui a darle mis condolencias.

-Hola señor Blake...siento mucho lo de su hija, yo la quise tanto como usted, si necesita algo, aquí estoy.

-Sí, Robin, gra-gracias por tus palabras - se veía tan mal, tenía ojeras y lágrimas, me sentí tan mal por él.

Me senté al lado de los hermanos, al igual que Donna, quien estaba al lado de Finn, dándole ánimos.

La ceremonia comenzó, estaba hundido en mis culpas cuando oí mi nombre, tenía que ir al frente a decir una palabras, en honor a ella.

-Bueno...ella, ella fué, es y será la niña más linda y genial que llegue a conocer, yo la ame, la adore, ella le puso color a mi vida blanco y negro, era mi motivo para seguir adelante un día más, quien curaba mis nudillos cuando tenía peleas y quien me ayudó a no ser expulsado por reprobar matemáticas, ella es mi vida, mi única razón de existir y...-Traté de contener las lágrimas, pero no logré- lo siento - dejé el micrófono y fui a mi asiento, a seguir lamentandome, al igual que todos allí.

Después Finn y Gwen, sus hermanos, que adoraba y cuidaba tanto, fueron a decir sus respectivas palabras.

-Yo hablaré primero - Dijo Gwen tomando el micrófono- mi hermana...era mi heroína, yo-yo la ame tanto - Sollozaba mientras hablaba, no podía contener las lágrimas- quería ser tan genial como ella, aunque siempre me recalcó que yo ya era genial, ya no tendré con quien ver nuestro programa de televisión favorito, ella no merecía lo que le sucedió- Soltó el micrófono y se lo dio a Finney, ya que no aguanto más y comenzó a llorar.

-Miranda, ella siempre fue como, como si ella fuera nuestra hermana mayor, siempre nos cuidaba y protegía de todo desde que tenemos memoria, era la mejor, desde niños siempre me acompañó en todas las tonterías que hacíamos, sé que ella esta en un buen lugar y que sigue siendo tan genial como lo era aquí, gracias por escuchar nuestras palabras, gracias a todos por estar aquí.

El funeral terminó, yo me quedé un rato más a acompañar a mis amigos.

-Perdónenme-Dije.

-¿Por qué? - Gwen paró sus llantos para preguntar.

-Por hacerles esto, por quitarles a su hermana, lo lamento demasiado, enserio.

-Tu no nos la arrebataste, fue ese idiota, no es tu culpa, ¿cuántas veces tengo que decírtelo?- Respondió Finn- Robin, no tenemos nada que perdonarte, ella se fué y no podemos hacer más que aceptarlo, sé que es difícil, solo miranos, pero sé que podremos superarlo.

-Tienes razón, ella está bien donde quiera que esté.

Dirigí mi mirada al frente, su ataut aún seguía ahí, con su foto, aún no lo creó, cómo es posible que ella ya no esté aquí?, aún siento que esta en su habitación tratando de explicarme matemáticas, sus ojos miel y el olor de su cabello, lo recuerdo como si fuera ayer, cuando iba a la tienda solo para verla y comprar sus gomitas favoritas, enserio, no puedo creer que no la volveré a mirar, que no volveré a mirar sus profundos ojos color miel que me llevaban a otro mundo.