Porque si me encontré con un Frank sin camisa.
Rápido baje mi cabeza y cerre la puerta.
Debo de admitir ¡Wow, Frank Foxter si se ve bien! Sus pectorales marcados denotan que va al gimnasio, tiene unos cuadros que ¡O por Dios! quisiera pasar mis dedos por ellos y comprobar que son verdaderos.
Recuperó la compostura y recuerdo que vine a dar una tutoría no a ver gente sin camisa.
Esta vez tocó la puerta antes de entrar, paso y en esta ocasión Frank si tiene camisa.
—¿Te gustó la vista?
—No vine a ver gente sin camisa, llegue a dar una tutoría.
—¡Okey! Señora tutora.
— ¿Cómo que señora? Para usted señorita Monro.
Me siento en el escrito y saco los libros de mi mochila.
. . .
Frank se pasó toda la tutoría jugando con un lápiz y viendo las aves pasar por encima de su cabeza. ¿Quería matarlo? Si ¿Podia matarlo? Si ¿Iria a la cárcel? Seguramente. No echaria a perder mi futuro por un chico que solo quiere fastidiarme.
Los siguientes días de tutoría Frank se la paso igual de fastidioso, haciendo preguntas sin sentido y hablando de sus ideas sobre las chicas, fue lo peor.
Esta vez decidí que aplicare la de no me importa, porque en otras ocaciones le hable con sarcasmo pero esta vez ya estoy harta, ayer tuve que trabajar hasta tarde en la cafetería y no tuve oportunidad de dormir mucho.
Ya en su cuarto comenzamos a hablar de Historia y no hay nada que me dé más sueño que ello, me va bien en esa materia con puro esfuerzo.
Frank como siempre cambia el tema y empieza a hablar de las bujías de un Mustang y yo me pierdo mientras veo sus labios moverse al hablar, recostado mi cabeza en el escritorio del sueño, mientras finjo escucharlo.
. . .
Siento unas calidas sabanas a mi alrededor, comienzo a abrir los ojos poco a poco y ¡Oh no! Me sorprendo de inmediato al observar que no es mi habitación.
¿¡Que rayos hago en la habitación de Frank!? Miro bajo las sábanas y tengo ropa «Okey, no he sido violada».
De pronto aparece afincado a el marco de la puerta.
— ¿Veías si te había hecho algo?
—Pues claro eres un desconocido para mi. —arruga su cara ante mi respuesta.
— ¡Ay no! Ya tenemos historia.
—Si, la historia en la que tú me engañaste y yo te di una bofetada por ello.
—Exacto y la historia de que te quedaste dormida en media tutoría e dormiste en mi cama. —me quedo algo estupefacta por lo que dice.
— ¿Que hora es?
—Apenas son las 9:00 pm.
— ¿¡Apenas!?
—Si, apenas.
—Necesito ir a mi casa.
—Pues vete.
Estúpido ¿No podrías llevarme?
—Tu tienes un Mustang.
—Mi papá tiene un Mustang —comenta con obviedad.
— ¡Mi casa está a treinta minutos de aquí!
—Pues pide que te lleve.
— ¡Ja! ¿Estás bromeando, cierto? —digo.
—No.
—Okey, Frank Foxter llévame a mi casa.
— ¿Por favor?
El quiere que yo lo mate.
Suspiró y luego digo.
—Por favor.
—Perfecto ¿Tan difícil era?
Respiro para no ahorcarlo.
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¿Les ha gustado? Espero que sí ¿Pudieron imaginar a Frank sin camisa? Jijij espero que sí.
Seguro es de noche así que deseo que sueñes con mis personajes y los ángeles.
Chaooo!!! ✨☺️
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La atracción está en el aire #1
Teen FictionAtracción: Algo no muy profundo pero incontrolable casi como el hambre. Amor: Cuando amas las imperfecciones de una persona y las aceptas. ¿Fue amor o atracción? ¿Fue a primera vista o con el tiempo? Preguntas que ni yo sé responder o ¿Sólo me hago...