Erase & Forget

Chapter 13

Chapter 13

Ese día, aunque se estaba terminando había sido genial. Sólo dos sílabas: ge-nial.

Estaba en la buhardilla tumbada en la cama con su mejor amiga viendo un CD entero de la tercera temporada de Anatomía de Grey. Además ya se habían zampado tres bolsas de patatas fritas y palomitas, dos botellas de fanta y un bote de helado. Era su particular noche de los viernes después de una larga semana de exámenes. Cada semana tocaba en casa de una y esta vez lo estaba siendo en la casa de Alice.

Hacía cuatro horas que no veía a Mickel, una semana y tres días que no veía a Alexander, y un día que no veía a Kian.

Mierda. Ya estaba pensando otra vez en chicos. Parecía una posesa y necesitada, pero la verdad es que no lo estaba. Sólo era que...le importaban demasiado. Su móvil vibró.

- "Hola cielo, ¿qué tal estás? Seguro que estás con alguna de tus amigas viendo una peli de amor cursi o pensando en mí. Aunque no lo parezca, os conozco demasiado."

- "Para de llamarme de ese modo. No soy un cielo, soy una persona normal y corriente. Mal humorada, bipolar y flaca. Me han destrozado el corazón dos veces y no quiero que lo vuelvan a hacer. Por cierto, eres un cabrón si le haces eso a tu hermano."

- "Eres una mal humorada, bipolar y flaca. Todas esas cosas me ponen, así que no hay ningún problema. No te voy a destrozar el corazón porque sólo somos amigos. No soy un cabrón y mi hermano tampoco. Deja de liarme y de ponerme excusas sin sentido. Hablame que me aburro y no tengo nada que hacer."

- "Estoy viendo Anatomía de Grey con Carrie. Déjanos en paz. Voy a apagar el móvil. Ah, no soy un juguete y no estoy para entretener a nadie."

- "Gruñona"

- "Pesado"

- "Gruñona"

- "OFFLINE"

Ahora venía su capítulo favorito y no se lo iba a perder por nada del mundo. Ni siquiera por un chico, aunque le importase mucho.

2:08. Alice se despertó medio encima de Carrie. Le dolía la espalda. Se levantó a apagar la tele que aún estaba encendida y volvió a tumbarse en la cama, esta vez un poco más alejada de su amiga. Encendió el móvil para ver si tenía algún mensaje. Cinco.

- "Hola Alice. Lo siento mucho. Perdóname por todo lo que te dije. No eres ni una zorra, ni una inmadura. Llámame cuando me perdones para hablar, ¿vale? Te quiero."

- "Gracias por ser tan buena amiga y hablarme cuando lo necesito. De verdad, muchísimas gracias."

- "Hola fea. Vaya friki estás hecha."

- "Call me Maybe? Te quiere, Alex."

- "Mi hermano es un pesado, ya lo sé. Te quiero."

No pensaba contestar a ningún mensaje. Vaya pesados. Por su culpa ya no tenía sueño.

Fue hacia el armario de las películas y lo abrió. Cogió su favorita: "Por Siempre Jamás" y la puso. Por más que la viese nunca se cansaba.

4:15. Le dolía demasiado la cabeza como para ver otra peli. La dormilona de Carrie seguía en la misma posición. Para no molestarla cogió una manta de lana del armario al lado de la cama y se tumbó en el sofá. Sacó el móvil.

- "¿No tienes otra cosa que hacer que molestar a la gente mientras duerme?"

- "No estabas durmiendo."

- "Pero ya sabes que me gusta dormir, y vuestros mensajes no me dejan. Además, si soy una friki y no tengo vida social, ¿para qué me hablas?"

- "¿Y para qué me contestas?"

- "Para dejar las cosas claras."

- "Seguro."

- "No te lo creas. Me da igual."

- "Puta Alice. Fea. Friki. Lo peor es que te crees guapa y todo. Jaj."

- "OFFLINE."

¿Por qué le había tenido que contestar? Siempre acababa llorando. La insultaba y hacía que se sintiese una mierda. No era justo. Odiaba estar en ese círculo amoroso y no saber quién realmente la importaba. Había tenido algo con Mickel y luego la habían mandado a la mierda, estado unas semanas con Alex y la habían vuelto a mandar a la mierda, había besado a Kian y eran amigos, pero, ¿la rompería el corazón y la mandarían a la mierda otra vez?

Volvió a conectarse para enviar un mensaje.

- "ONLINE."

- "Lo siento Alex. No quiero quedar contigo."

- "Qtd"

- "Gracias guapo."

- "Perfecto."

"OFFLINE"

Que bien. Uno menos, o más bien dos menos. Alice se decidió a quedar con Kian. Hasta ahora no había dado ninguna señal de ser un capullo o idiota. Si le rompía el corazón se haría monja y no volvería a salir con ningún chico.

- "Hola"

- "¡Por fin te dignas a hablarme!"

- "Lo siento. Estaba...haciendo otras cosas."