Contra Las Reglas; Pedri González

Capítulo 9: Mateo

Alejandra's P.O.V

La tan esperada salida con mis amigos por fin había llegado, iríamos a una discoteca aquí en Barcelona. Estaba fuera de mi edificio ya lista solo esperando a que Valen pasara por mi.

— ¡Valen! — exclamé cuando mi mejor amiga paró el coche justo frente a mi.

— ¿Cómo está mi jugadora favorita? — le quitó llave al coche para que yo pudiera subir. Cuando entré al coche, me tiré a sus brazos, la extrañaba demasiado.

— Bastante bien, todo tranquilo — comenté — ¿Tú qué tal? — pregunté viendo cómo salíamos de la Ciudad Deportiva.

— Tuve un examen de química que me mandó a la mierda, pero fuera de eso, todo bien... — yo reí por su comentario.

— ¿Qué tal los entrenos? — pregunté mientras revisaba mi maquillaje en el espejo.

— Normal, pero no son lo mismo sin ti — dijo sin quitar la vista del camino.

— Seguro ya se acostumbran, estuvieron veinte años sin mi, seguro pueden otros veinte — reímos.

— ¿Tú ya te acostumbraste? — preguntó — Me imagino que vivir con gente famosa tan de repente, asusta — comentó.

— Ya sabes que al inicio siempre me cuesta tomar confianza — comenté jugando con mi anillo — Pero se han portado muy bien conmigo, son buenas personas — dije recordando lo bien que me habían recibido todos.

— ¿Y los hombres? — preguntó haciendo que yo me tensara un poco — ¿Están tan guapos como en la televisión? — yo reí.

— La verdad si, pero más allá de lo guapos son buenas personas — pensé en ellos.

— Cuéntame todo, el camino es largo y yo quiero saber con lujo de detalles — dijo haciendo que yo tomara una bocanada de aire y le contará todo lo que había vivido en tan solo una semana.

Que en lo personal, me parecía una completa locura.

— Te envidio tanto — dijo cuando terminé de contarle absolutamente todo.

— Seguro algo malo traerá, no me confío — dije viendo que estábamos llegando a la discoteca.

— Es que no me lo creo... — dijo — Además, tú le ibas al Madrid antes de que te llamaran — reclamó y yo reí.

— Eso es cierto, pero ese será un secreto nuestro — dije sin dejar de reír.

— Si me llevas a conocer la Ciudad Deportiva me quedo calladita — dijo haciéndose la molesta mientras se estacionaba.

— Trato — estreché mi mano cuando el coche ya había parado por completo.

Ambas nos bajamos y entramos en aquel lujoso lugar, era la primera vez que veníamos a esta discoteca. Valen iba frente a mi abriéndonos paso, estábamos en una mesa al lado del área VIP.

Cuando finalmente vi a mis amigos, no pude evitar sonreír. Pero cuando vi a Mateo mis ganas de abrazarlo se apoderaron de mi y corrí hacia él.

Él me recibió con los brazos abiertos, me atrapó entre sus brazos y me cargó levemente. De él no me había podido despedir en persona porque estaba de viaje, hacía más de un mes que no lo veía y verlo finalmente, me hace sentir completa.

— Hola — dije sin soltar mis brazos de su nuca.

— A la próxima mínimo despídete bien — reclamó él para luego darme muchos besos en la mejilla sin bajarme.

— Te extrañé tanto — apreté un poco mi abrazo, sentirlo me hacía muy bien.

Mateo y yo teníamos historia, nuestro romance quedó en el pasado, pero nunca dejamos de ser indispensables para el otro.