Contra Las Reglas; Pedri González

Capítulo 11: La Llamada

Alejandra's P.O.V

Finalmente hoy era el primer entrenamiento. Les mentiría si les digo que no estoy nerviosa, es decir, entrenaré con las mejores futbolistas y mi cerebro aún no lo termina de procesar.

Me entregaron mi uniforme para entrenar y me dejaron escoger mis botines. Escogí unos totalmente negros, no quería complicarme.

Ya tenía otras cosas que pensar y unos botines eran lo de menos.

No pude dormir toda la noche pensando en Pedri, en qué significaba todo lo que estaba pasando o si realmente no era nada y yo lo estaba exagerando, pero como anteriormente les dije, no soy una persona que se enamora y que confía fácilmente.

Me gusta que me den atención y ya está, pero el colmo es que soy una persona que sobre piensa todo, absolutamente todo.

Mi cabeza estaba con mil pensamientos por segundo hasta que Jonatan sonó el silbato indicando que debíamos bajar.

Empezamos a caminar fuera del vestidor y pude ver qué los chicos también estaban saliendo del suyo.

Y se me ocurrió algo...

— Vean esto — le dije a Jana y Laia parándome en las escaleras.

Esperé unos segundos y justamente salió la persona a la que estaba esperando.

Gavi.

Entonces fue ahí cuando solté la botella para que cayera al lado de él y así, hacerle una pequeña broma por nuestro primer encuentro.

Gavi volteó enfadado hacia arriba buscando al responsable haciendo que mis amigas explotarán en risas.

— Disculpe, Su Alteza — dije cuando terminé de bajar las gradas — Se me resbaló — dije y recogí la botella.

— No sé cómo voy a hacer para soportarte diario — dijo riendo y negando con la cabeza, yo imité su frase con voz chillona y una mueca.

Juntos empezamos a caminar al campo, Gavi se había vuelto un buen amigo, me hacía reír mucho.

— Suerte en tu entrenamiento, príncipe — dije volteándome hacia él y dándole cinco con la mano para luego chocar el puño.

— Suerte, enana — me correspondió el saludo. Yo negué con la cabeza y reí un poco por su comentario para luego alejarme.

Me senté en el suelo con mis compañeras esperando las instrucciones. Seguí viendo como muchos de ambos equipos seguían saliendo del vestidor, hasta que uno captó mi atención.

Pedri me saludó y sonrió cuando nuestras miradas conectaron, yo me límite a saludarlo con la mano y apartar mi mirada rápidamente.

¡Concéntrate Alejandra, sin distracciones!

El silbato volvió a sonar llamando la atención de todas las jugadoras.

— ¡Buenos días, señoritas! — sonrió Jonatan — Vamos a empezar con 10 vueltas al campo para que calienten un poco — volvió a sonar el silbato y todas nos levantamos para empezar a correr.

No me quejo, me gusta correr y tengo buena resistencia, lo cuál hacia que estuviera dentro de las primeras en la fila.

Logrando acabar rápidamente y entre las primeras.

— ¿Cómo aguantas tanto con el revoltijo de vida que llevas? — preguntó Jana tomando bocanadas de aire entre cada palabra a lo cuál yo reí.

— Me gusta mucho correr, lo hacia casi diario — bebí de mi agua.

— ¿Cuánto corrías? — preguntó Laia con las manos en su cintura.

— Como 10 kilómetros — respondí haciendo cuentas.