𝐗𝐕𝐈 [𝑭𝒊𝒏𝒂𝒍]

5.3K 517 1.1K
                                    

~ Narrador Omnisciente ~

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

~ Narrador Omnisciente ~

Hacía una tarde fría en todo Karmaland, como si se supiera lo que estaba a punto de ocurrir. Habían pasado dos semanas desde que encontraron a Mangel dentro del pozo. Todo estaba extrañamente calmado en extremo, apenas y se escuchaban algunos ruidos, causados por los resoplidos de aire que a medida que pasaba el tiempo se hacían más presentes.

Wilbur y algunos familiares de su novio se encontraban terminado su trabajo: poner TNT en túneles que había alrededor del centro de Karmaland, volviendo a la Casa Blanca mientras hablaban del plan que tenían para el día siguiente.

—No tenemos que activarlos hasta que Quackity esté a salvo— les comentó a los encargados de esto, Titi y Franco— O si la cosa se pone muy fea, yo de igual forma les avisaré.

Ambos asintieron, y siguieron su camino.
Hasta que se detuvieron porque escucharon voces cercanas.

Wilbur no las reconoció de inmediato, pero Titi sí.

—¡Uglygly!— dijo el niño, quien fue callado por Wilbur con una mano es su pequeña boca, indicando que no siguiera.

—¿Escuchaste eso, Vegetta?— dijo Rubius mientras buscaba con la mirada a través de los árboles, pero no lograba captar nada.

—Se ha escuchado como Titi, ¿No?— dijo el ojimorado mientras también dirigía la vista hacia donde el oso.

El de pelo rubio se volvió hacía Vegetta, quien también le dirigió una mirada confundida.

—No tengo mucho tiempo antes de que vayan a volver ellos de su misión— dijo Rubius nervioso— ¿Qué es lo que querías decirme?

—Tengo una noticia fatal— dijo el de pelo negro— Quackity ya ha puesto el huevo, y eso solo significa que la masacre está a punto de ocurrir.

Wilbur escuchando esto sintió cómo todo el cuerpo se le tensaba, y la cara le cambiaba a una expresión de impresión.

—¿Tan rápido lo ha puesto?— Vegetta asintió— Joder, tenemos que irnos de aquí rápido. ¿Ya le avisaste a Lolito?

—Lolito no me ha prestado atención. Se ha puesto en la misma posición que Willy, y me da miedo que se vaya a pasar al lado de la Revolución. Pero nosotros sí podemos salir de aquí antes de que todo comience, porque estoy seguro de que Luzu vendrá a buscarme para ayudarle.

El oso abrazó al de menos tamaño, el cual no se quedó atrás y también correspondió el abrazo.

—Te prometo que saldremos de aquí y seremos felices, Vegetta.

Una vez el nombrado partió camino de nuevo para el pueblo, los que estaban escondidos emboscaron a Rubius, quien sorprendido los vió con nervios.

—¡¿Tú sabías que Quackity estaba embarazado y nunca dijiste nada?!— Wilbur se le acercó de manera amenazante— Todo este tiempo nos estuviste traicionando.

𝑻𝒓𝒂𝒊𝒄𝒊𝒐́𝒏¹ (𝑸𝒖𝒂𝒄𝒌𝒃𝒖𝒓) [𝑻𝒆𝒓𝒎𝒊𝒏𝒂𝒅𝒂]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora