Era un breve silencio el que adornaba los tranquilos parametros de la finca del agua, Giyuu había de encontrarse sentado bajo la fresca sombra de un gran arbol de pinos que habitaba en el patio trasero de su finca. Esa mañana se había despertado primero que los demas, necesitaba tomarse un respiro de todas las locuras que habían estado ocurriendo en esos ultimos meses, y que mejor manera de hacerlo que tomando una buena taza de café al aire libre mientras esperaba el amanecer.
No pasaban de ser las seis cuarenta cuando se digno a tomar aquella decisión, no había tenido la oportunidad de hacerlo tiempo atrás pues su hijo no había pasado los mejores momentos y le había dedicado mucho más tiempo del que realmente disponía actualmente; sus responsabilidades como cazador se habían visto algo afectadas en ese tiempo, no solo por el hecho de que Ethan hubiese sido secuestrado, sino también porque los ataques de demonios habían aumentado con mucha frecuencia en esas ultimas semanas donde se había dedicado a recuperar a su hijo de las garras de unas locas personas, mismas que no quería siquiera recordar.
Era claro que la situación se estaba escapando de las manos de algunos cazadores, pues que de repente los ataques aumenten y luego se reduzcan repetitivamente, era algo capaz de alarmar mucho a la sede de cazadores, mas, sin embargo muchos no querían darme mucha importancia a ese hecho como tal.
━━━━¿Ethan, sigue durmiendo?. ━━━━sanemi había aparecido repentinamente a unos cuantos metros de él con su típico atuendo de cazador, su mirada parecia cansada y algo fastidiada pero parecía querer disimularlo.
El Shinazuwaga no había amanecido en su finca durante las aproximadamente dos semanas ya que según entendía, queria darle su espacio al mas pequeño luego de la no tan agradable escena que habían vivido antes de que Roció hiciese lo que hizo; y claro que respeto aquella decisión, Ethan era un niño inteligente y medio imprudente, no obstante sabía que al final terminaría corriendo a los brazos de su padre y lo perdonaría pir tremenda estupidez.
━━━━Se paso la tarde correteando de un lado a otro, supongo que se ha estropeado un poco. ━━━━Murmuró dejando de observar al shinazuwaga para centrar su mirada en las hojas que caían de uno de los árboles.
━━━━¿Crees que quiera ir conmigo a una mision..?.
Giyuu elevó una ceja. ━━━━¿A una misión?.
Sanemi asintió sabiendo que aquello no parecía ser una buena idea a los ojos del de mirada Oceánica, no sólo por el hecho de que la idea era llevarse al niño a una Misión, sino también porque actualmente la relación entre padre e hijo en esos instantes no era tan buena como para que la convivencia entre ambos fuese la mejor por así decirlo.
━━━━¿Estas seguro?. ━━━━volvió a cuestionar el más bajo no tan convencido de la decisión; aunque estaba consciente que Ethan estaría a salvo en manos de Sanemi, o eso quería saber.
━━━━No del todo, pero es una misión sencilla de Vigilancia y supuse que seria bueno llevarlo conmigo. ━━━━exclamó escogiendo los hombros y haciéndose el desentendido.
━━━━Bueno... Pero ten en cuenta que si algo le llega a pasar a mi bebé, te cortare las bolas en rebanadas. ━━━━amenazó causando que sanemi tragase grueso aún a pesar de que él ya sabia cuál sería su destino si algo le pasaba a Ethan bajo su cuidado.
━━━━Lo tendré en cuenta. ━━━━murmuro sintiendo un breve escalofrío recorrer su columna ante la seria y siniestra mirada que había puesto el Tomioka tras dar su amenaza.
Los minutos pasaron rápidamente y al cabo de una media hora, Ethan se encontraba parado enfrente de la finca del agua justo al lado de su padre, quien parecía estar mas que orgulloso de haber logrado convencer la infante a la primera y no tener que rogarle; así como tuvo que rogarle al tomioka mayor para que lo perdonara después de haber dicho lo que dijo el día que atraparon aquel espadachín con el demonio. Sinceramente, Giyuu si se hacía desear.
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𝐁𝐀𝐁𝐘 「SaneGiyuu」
Fanfic⤷.⭑⧽𝐁𝐀𝐁𝐘 •☽ Y mi vida está en sus manos, tengo la necesidad de protegerlo sin importar lo que pudiese llegar a pasar. ✧ ཻུ۪۪⸙⧽⿻ 𝗗𝗢𝗡𝗗𝗘 𝗧𝗢𝗠𝗜𝗢𝗞𝗔 esconde la pequeña e increíble ...