────Izuku Midoriya es un Omega adolescente que tiene un Kosei mutante que lo hace ser mitad gato. Con todo lo que implica serlo, vive su vida normalmente. Su padre, es el dueño de la U.A y lo lleva muy seguido. allí vivirá aventuras y tragedias junt...
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Katsuki estaba decidido. Hoy le daría la charla a su novio. Y con charla se refería que le daría un par de consejos para que no fuera molestado por los de nuevo ingreso, ya que en unos meses ya empezaban las postulaciones a la U.A.
Lo invitó al parque, ya estaba harto de tener que ir a verlo a su casa, parecía rapunzel.
Ya se había puesto su ropa. Era algo casual después de todo no iban a algo muy formal.
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En cambio Izuku, cuando recibió el mensaje de la cita en el parque, se puso uno de sus conjuntos favoritos.
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Fue un milagro que su padre lo dejara ir con falda, después de todo normalmente no lo dejaba.
Quería salir a caminar así que tomó sus audífonos y fue caminando hasta el parque. Con uno que otro piropo de por medio pero pudo llegar sano y salvo a su destino.
- ¡Kacchan! - Gritó al ver su cabellera ceniza. Se lanzó a abrazarlo y este le correspondió.
- Deku, te compré un helado, vamos a sentarnos al árbol. - Le dijo en primera instancia. - Linda falda. - Izuku se sonrojó y agradeció el elogio. - Necesito hablar algo contigo. - Besó su mejilla.
Se sentaron y comieron el helado tranquilamente. Hasta que surgió el tema del cual Katsuki quería hablar.
El quería darle algunos consejos. Y con consejos se refería a algunas reglas.
- Uno, debes contarme todo lo que pasa en el día, quien te habló, como es, que te dijo. - Izuku iba anotando en su mente.
- Dos. Yo creo que no vas a querer que esto sea tan aburrido ¿no? - Izuku asintió. - Si alguien se te declara, dímelo. Dile que tienes novio pero no le pares el cortejo. A ver si podemos sacarle provecho. - Le dijo con una sonrisa maliciosa.
Izuku no entendió y preguntó.
- Entonces les informo que tengo novio, ¿pero dejo que me haga las cosas que tu me haces? - Katsuki asintió. - Bueno, como tu quieras. - Le dijo.
Como no había niños se sentaron en los columpios y Katsuki disfrutaba como Izuku se divertía como un pequeño niño.
- Oye Deku. - Izuku lo miró parando de balancearse. - ¿Hasta que hora te dio permiso tu papá? - Preguntó.
- Creo que hasta las cinco. ¿Porqué? - Respondió.
A Katsuki se le bajaron los colores del rostro, ya eran las ocho, ¡Su suegro lo iba a matar! Pero más lo iba a golpear si no lo iba a dejar de inmediato.
Tomó a Izuku como un saco de papas y salieron corriendo de allí, por suerte Izuku llevaba un short bajo la falda.
- Kacchan, mi papá dijo que te había reservado un cupo en la U.A.. - Le dijo divagando.
- Que bueno Deku. - Felicitó sin darle atención, llegaron a la casa del felino y Katsuki con miedo lo bajó y tocó el timbre.
- ¿Cuál es tu excusa, Hijo de puta? - Preguntó hostilmente con su voz de Alfa, mientras le tapaba los oídos a Izuku.
Katsuki tragó duro esperando el escobazo, aunque su Alfa interno le decía que no se dejara, debía mostrar respeto.
- Izuku, hijo. ¿Porqué no vas a tu cuarto? Quiero hablar con Katsuki de hombre a hombre. - Le sonrió al Omega y este asintió metiéndose a la casa.
- Adiós Kacchan.. - Despidió Izuku con su manito.
- Adiós Deku.. - Se despidió sabiendo lo que se venía.
- Ahora si hijo de puta. - Hisashi se abalanzó contra él irresponsable que solo esperaba que su tortura terminara rápido.
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