Ride | BrightWin | Adaptación

| Capítulo 2: Parte III

2. The calm before the storm (Parte 3)

Bright se despertó por unos toques insistentes sobre sus piernas. Empujó a quien sea o lo que sea que lo estaba haciendo y se acurrucó más con lo que lo que lo hacía sentirse calientito. Se sentía bien.

— ¡Bright!

Bright suspiró, forzándose a si mismo a abrir los ojos. Encontró a Gunsmile mirándolo un poco más de cerca de lo que necesitaba estar. Bright se alejó un poco y le devolvió la mirada. — ¿Qué carajos, Guns? — Se quejó cansadamente.

De ahí, Guns se paró y miró a Bright y Win que prácticamente estaban envueltos entre si. Win estaba completamente dormido sobre el pecho de Bright, y Bright tenía su brazo alrededor del cuerpo del menor. Asumió que se quedaron dormidos mientras veían la película. No, no había nada sospechoso ahí.

Después de un rato, Bright cayó en cuenta de la situación en la que se encontraba. El pelo de Win le hacía cosquillas en la cara y la mano de este descansaba sobre su otra pierna. Bright miró a Gunsmile esperando respuestas solo para darse cuenta de que tenía la misma cara de duda que él, ¿cómo rayos Gunsmile iba a poder explicar que Bright estaba arrunchandose con un chico que acababa de conocer?

— ¿Uhm? — Fue lo que salió de la boca de Guns.

Bright rodó sus ojos. — Lo sé, lo sé. No quiero... No quiero despertarlo. — Su voz salió suave mientras intentaba sentarse un poco. Win se aferró mas fuerte y Guns sonrió por la acción.

— Déjalo dormir, yo no estoy juzgando.

Bright asintió, agradecido de que su amigo no fuera un imbécil como otras personas. Trató de alcanzar su teléfono para ver la hora, pero no quería molestar a Win. — ¿Sabes qué hora es?

Gunsmile asintió, poniéndose su camisa. — Nueve y pico. Dew mandó un mensaje diciendo que ya están en la playa así que voy a ir saliendo.

Bright asintió. — De acuerdo. Ve y nosotros los alcanzamos en un rato.

Gunsmile se puso de pie y chocó su puño con el de él. — Nos vemos más tarde.

— Dale. — Dijo Bright con voz bajita.

Gunsmile se fue y cerró la puerta con delicadeza al salir. Bright puso toda su atención sobre el chico que tenía en sus brazos. Acercó a Win un poco más a su cuerpo y suspiró. Esto era a lo que se refería Win. Podía entender porque esa 'cercanía' pudiera llegar a sentimientos confundidos y lo último que quería era hacerle daño a Win. Sabía que a Win se le había hecho dura la mudanza y merecía ser feliz. Por otro lado, a Bright le gustaba esto. Dew y Nani casi se comen a besos horas atrás, ¿por qué él no podía ser así de cercano con Win? ¿Aún podía ser clasificado como algo platónico?

Tal vez esto era demasiado. Esto se sentía muy íntimo, incluso para Bright y a él le encantaba arruncharse. Aunque nunca con un chico. Pero Win no era cualquier chico. Win era especial. Después de un poco más de 24 horas de conocerlo, de oír su risa y verlo sonreír por primera vez, Bright sintió que era su deber hacer que siguiera haciendo esas cosas. Si lo llegara a admitir a voz alta, Win le diría que es gay, pero Bright sabía que no lo era.  Él amaba a las chicas, y ellas a él. Solo quería que su amigo de increíble trasero fuera feliz. No lo podían culpar por eso.

Win se movió un poco y Bright le consintió un brazo. Esperó solo un rato para apurarlo a que se despierte.

— Dale, pequeño. Papi va a llegar en cualquier momento.

Win se estiró, su mano casi golpeó a Bright en la cara. El castaño se rió al esquivarlo con las justas. — Mierda, Win.

Win procesó la voz y sus ojos se abrieron de una, sentándose al reconocerla. Bright lo miró y trató de no reírse por la marca roja que tenía en el lado izquierdo de su cara al dormir sobre ella mientras el chico lo miraba incrédulamente.