Capítulo 12. El perdón es parte de madurar

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En la mañana siguiente prosiguió con normalidad. El jefe había dado oportunidad para los que faltaban postular. Por ende, a mi también me despreocupaba esa parte de ver los currículums, ya que había tiempo de sobra.

- Gracias por su compra. -me despedí amablemente del cliente.

- ¿Ya escogiste sabiamente?

- Sólo a uno. -me senté para descansar un poco mis pies- Escogí al encargado del almacenamiento.

- ¿Es difícil, no? -me pasó una bebida.

- Nunca vi tantos currículums con tanta experiencia -di un sorbo a mi bebida.

- Si quieres puedo ayudarte esos días.

- Tranquila, yo puedo, además puede haber clientes esperando su taza de café en ese momento.

Reímos juntas.

Como siempre las horas pasaban rápido cuando te mantenías ocupada en muchas cosas que hacer. Y sí, mientras bridgette se fue a comprar nuestro almuerzo, yo me quedaba en la cafetería siendo perfeccionista en la limpieza.

Creí por un momento que todo andaba limpio hasta que escucho el vaso cayendo en la mesa. Allí fue en donde toda mi atención se mantuvo en aquel jugo que caía al piso.

Demonios..

No tuvé mas opción que tomar el trapeador y un trapo para limpiar el desastre. Una vez limpiando todo el derrame del suelo. Mi mirada fue naturalmente a las chicas sentadas en la mesa.

- ¿Courtney?

- ¿Gwen? ¿Heather? -las observé con sorpresa.

- Que sorpresa que te veamos, chica. -dijo heather dejando su smotie.

De la nada una mano tocó mi hombro y era mi adorada compañera de trabajo Bridgette.

- Perdón por no decirte que estaban aquí. -me dio su típica sonrisa tierna y vio a las chicas- ¿Cómo va la página?

- Todo genial hasta el momento. -me miró- Courtney.. yo sólo quise venir a decirte algo a ti, ya que gracias a Bridgette pude saber tu ubicación y te debo una disculpa que-

La interrumpí con un abrazo.

- No me debes nada, gwen. -me separé después de un buen minuto y sonreí- Me da alegría verte denuevo.

- A mi también, créeme. -me devolvió la sonrisa.

- Hey, basta. Tanto amor se me va a pegar y no me gusta mucho el romance. -se quejó heather de una forma graciosa, por lo que reímos al escucharla.

Aquel sueño me dio la valentía de afrontar todo mi pasado y recuperar a mi vieja amiga que es Gwen. Por otra parte, ellas dos se quedaron hasta muy tarde para ayudarnos con la limpieza del local, ya que ellas no tenían nada interesante que hacer. De tanto, pudimos cerrar la cafetería e irnos a casa.

- Adiós Courtney. Adiós Bridgette. -se despidieron de nosotras.

- Adiós, chicas. -nos despedimos ambas de ellas.

Barista, ven a mí. - Duncan & Courtney.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora