Un Saiyajin entre Demonios

Capítulo 22: Compañía no agrada

Todo el club había regresado del mundo de Goku, ahora todo regresaron a sus actividades academias, para suerte de todos no tuvieron ningún atrasado con sus trabajos, después de unas largas horas académicas, todo estaba en el club hablando.

—Vaya, me quería quedar un tiempo más—Dijo Akeno.

—Es verdad, tiene dulces muy ricos—Dijo Koneko, mientras le daba un mordisco a una barra de chocolate.

—Es verdad, pero creo Goten quería pasar más tiempo contigo Rias—Dijo Goku.

—Yo también quería pasar más tiempo con él—Comentó Rias.

—A mí me gusto fue la playa—Dijo Asia.

En ese momento, aparece un círculo mágico y de ellos salieron dos personas muy conocidas por todo el club, y para desagrado del saiyajin.

—Hola a todos, me alegro, haya regresado—Dijo Sirzech. Todos los del club los saludaron.

—Hola hijas, me alegro de que estés bien—Dijo Lord Gremory.

—Si papá, he estado muy bien—Dijo Rias.

—Bueno, tengo cierto desagrado por cierta persona que esta presenta, ¿Qué hacen aquí?—Exclamó Goku, con una mira de asco dirigida a Lord Gremory. Todos se dieron cuenta la mirada que el saiyajin le estaba mandando a Lord Gremory.

—Bueno, vinimos para ver ¿cómo has estado? Y también para ver sus notas académicas, y recordarles que ya se acerca el día que los padres acompañen a sus hijos—Manifestó Sirzech, para romper el ambiente tenso que se había formado.

—Es verdad, ya se acerca ese día, ¿Por qué quiere ver nuestras notas académicas?—Pregunto Rias.

—Es deber de nosotros, saber cómo le está va a los de club con sus estudios—Dijo Sirzech.

—Bueno, mucha suerte, muchachos—Comentó Goku con burla.

—Eso no es justo, tú te salvas por ser un demonio de clase suprema—Dijo Rias, con un puchero.

—Tienes razón—Manifestó Goku, con una sonrisa.

—Además, no tienes que estar bajo la orden del clan—Exclamó Rias.

—Ahí te equivocas, Rias, tienes razón, no estoy bajo las órdenes del clan—Dijo Goku.

—Si la lo sé, me lo recuerdes—Dijo Rias, con un pequeño puchero. Goku se acercó a Rias y se arrodilló enfrente de ella, para sorpresa de todos.

—Pero Rias, dame una de tus órdenes, porque quiero ser unos de tus soldados en las filas del amor—Manifestó Goku, mientras que besaba la mano con suma delicadeza, mientras que la pelirroja se sonrojaba de la vergüenza.

Después de ese momento, Sirzech paso a decirle que van a venir para el ese día, que ya tiene todo arreglado, solo que la madre de Rias no podría asistir, así todos asintieron con, se despidieron, para luego irse en un círculo mágico.

—Qué bueno que se fueron—Dijo Goku.

—Goku, debería intentar perdonar a mi padre—Dijo Rias, recuperando sé las palabras que le dijo su novio.

—Bueno, tal vez, pero no lo sé, cada vez que lo veo me recuerda que por su decisión esa maldita te dijo una palabra tan repugnante y con una cara de perro se acercó como no pasara nada—Dijo Goku, con su semblante serio.

—Bueno, pero ya paso, ahora tú y yo estamos comprometidos, y quiero que te lleves bien con mi familia—Dijo Rias.

—Bueno, voy a ser un intento, pero no te garantizo nada—Dijo Goku.