Kim Seokjin es un chico que ama con su vida el color rosa, las cosas tiernas y delicadas, es más vanidoso que nadie y siempre prefiere las cosas bonitas y brillantes.
Defecto: Jin odia todo lo que tiene que ver con tatuajes. Odia a los tatuadores...
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Después del encuentro con su hermano, los tres decidieron ir al departamento de Jackson y ahora estando cómodos, NamJoon le contó todo lo bueno que había pasado desde que se fue de la casa, pero también se sintió obligado a contar lo malo y lo sorprendido que estaba TaeHyung cuando el menor le mostró los primeros tatuajes que se había hecho y algunas marcas que habían quedado a causa de su padre.
—¿¡Esto lo hizo él!? —preguntó asustado mirando su cuello.
El moreno asintió mientras dejaba que el mayor tocara con sus dedos la piel saliente y la forma que esta tenía.
—¿Qué es? —preguntó al ver que el chico se mordía el labio —Está bien si no quieres decirme..
La mano izquierda del moreno tocó el lugar recordando las palabras, para después suspirar con pesadez y mirar a su hermano —To3ak... Se pronuncia tozaq y significa infierno en Kazajo, país Kasajistán —dijo quitando su mano.
—Si yo me hubiera dado cuenta antes...
La cabeza del moreno negó varias veces para que no pudiera continuar hablando —No lo hagas Tae, no es culpa tuya o mía, las cosas pasaron así, por favor no cargues con esta responsabilidad —pidió apoyando su mano en el joven.
—Yo... he cuidado de él... —habló de un momento a otro el rubio, quién de inmediato se sintió avergonzado por la mirada de ambos hermanos —¡Quédate aquí el tiempo que necesites! —exclamó sintiendo el calor en sus mejillas —¡Por favor! —suplicó en una reverencia.
—Gracias Jackson, has ayudado a mi querido hermanito y no voy a poder olvidarme de eso, espero que no sea una molestia —agregó el castaño al ver la sonrisa del moreno.
—Quiero terminar de estudiar y volver con mamá —dijo el menor mirando el cambio en el rostro del rubio.
—Eso... no será posible —habló con cierto miedo en su voz.
—¿De qué hablas? —preguntó.
—Ya está enterada del asunto y no le importa lo que papá haga, pero mencionó que ahora tiene... un sólo hijo —suspiró al ver la sonrisa de su hermano.
—¿Debería importarme eso? —interrogó con ironía —De alguna manera siempre supe que ella no me quería de la misma manera que lo hacía contigo, pero es mejor así.
—¿De qué hablas?... mamá nos ama y ahora lo dijo porque está dolida y no puede entenderlo —justificó al ver la mirada penetrante del menor.
—Te aconsejo que te alejes de ella antes de que sea tarde, o de lo contrario intentará manipular tu vida a su gusto —agregó levantándose del sofá.
Las palabras del menor provocaron un cierto malestar en su interior porque sabía que tenía la razón y en algún momento se lo iba decir, pero ahora sus planes no era demostrar a su madre lo que era y mucho menos perturbarla, sabía como pensaba y no estaba listo para enfrentarla, por lo que continuaría enfocándose en la universidad y en mantener contacto con su hermano.
