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Minho besó a Yongsun. Al separarce, ésta limpió sus labios. Minho se mostró confundido. ¿Por qué pidió el beso si se lo iba a limpiar?

— Apúrate y casate conmigo, Minho.

El demonio se molestó — Lo que dices y haces es completamente distinto. No tienes interés en mi.

— No es verdad. — sonrió — Claro que tengo interés, ¿Cuánto poder seré capaz de ganar si me caso con el gran demonio Lee Minho? — se dirigió a la salida. — Bien, te veo en la fiesta.— Lee bufó molesto.

Tenías una prometida, Minho. Lix no sabía nada de eso.

[...]

Felix y los hermanos se encontraban ya en la habitación. El primero, sentado en la cama, se veía totalmente desanimado.

— ¡Está todo bien, Bokkie! Él tiene una "prometida" pero en realidad es algo arreglado, como lo mío con Hyunjin. — Byul trataba de animarlo. — Generalmente, tenemos un prometido desde que nacemos. Incluso él tiene uno — señaló a Changbin. —¡Así que, animate!

— ¿Qué quieres decir con "incluso"? — murmuró Seo, molesto.

Felix alzó la vista. —¿Ah? Lix está bien. — su voz no decía lo mismo.

— Mmm... ¡De acuerdo! — Moon tomó las manos de Felix. —Nos escabulliremos en la fiesta — Seo abrió los ojos como platos, ¿qué pensaba hacer con su "prisionero"?. El rubio la miró con sorpresa — ¿Quieres celebrar el cumpleaños de Minho?

— ¡¡Sí!!

— ¡¡No bromees, te dije que es un rehén!! — ¿por qué nunca lo escuchaban?

— Si te preocupa, entonces ven con nosotros. Sólo miraremos desde la distancia sin llamar la atención. — Ah, pero siempre lo escuchaban. Que a veces no le dieran importancia es otra cosa.

— Sin llamar la atención dices. Si un mocoso como este se cola en la fiesta, ten por seguro que será descubierto.

— Entonces... Si puede que noten a un niño, lo convertiré en adulto.

— ¿En adulto?

— Tomé esto de la casa de Minho. — la demonio mostró el frasco con la pócima.

— Pero... Le prometí a Minho que ya no la usaría.

— Estará bien. No vas a encontrarte con él. Estaremos detrás de cámaras. — En pocas palabras, cuando el gato duerme...

Felix dudó un momento...

Pero Felix es Felix.
Si es solo por un momento, estará bien.

Luego de conseguir un poco de ropa para el muchacho y de que Byul se arreglara, ambos se colaron a la fiesta junto con su chaperon, Changbin.

Seo no paraba de mirar a Felix. No podía creer que este joven bien vestido y de buena imagen sea aquel niño piojoso y molesto.

— Bokkie, ¿qué es esa flor? Parece muerta.— Felix sostenía en su mano la flor para Lee.

— Cuando la traje aquí, se marchitó. Se la daré a Minho cuando termine la fiesta.

— Oigan, miren, Minho va a entrar al salón.

Un gran "Ooooohhhh" hizo barullo por todo el salón.
Ahí estaba el Duque Lee Minho. Su expresión mostraba supremacía y arrogancia, pues, el mundo estaba a sus pies. Vestido con un gran traje negro y un sobretodo decorado con plumas negras, al igual que la diadema que traía en su cabeza. En su mano, unos guantes blancos. Sostenía su bastón negro que daba otro toque de elegancia. Todo el mundo aplaudía su magnificencia.
Caminó hasta llegar al asiento que se hubicaba en la punta y se sentó.

 𝖀𝖓𝖆 𝖋𝖑𝖔𝖗 𝖕𝖆𝖗𝖆 𝖚𝖓 𝖉𝖊𝖒𝖔𝖓𝖎𝖔 - ᴍɪɴʟɪx - [𝐀𝐝𝐚𝐩𝐭𝐚𝐜𝐢ó𝐧]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora