𝖀𝖓𝖆 𝖋𝖑𝖔𝖗 𝖕𝖆𝖗𝖆 𝖚𝖓 𝖉𝖊𝖒𝖔𝖓𝖎𝖔 - ᴍɪɴʟɪx - [𝐀𝐝𝐚𝐩𝐭𝐚𝐜𝐢ó𝐧]

36. La tiranía de Felix

Finalmente, luego de todo lo sucedido, ahora lo sé, estoy seguro, amo a Minho.

Pero no de la manera fraternal, yo realmente amo a Minho.

Con quien quiero pasar mi vida es con MinMin.
Con quien quiero una familia es con MinMin.

A quien quiero tocar y que me toque... Es Minhonnie...

Era una tarde soleada, todo estaba tranquilo y Felix disfrutaba de la brisa, sentado bajo un rosal.

— Tengo que decírselo. - se decidió.- Le diré a Minhonnie que lo amo.- se paró y dio la vuelta para volver al castillo, pero cayó al suelo por el impacto al chocar con alguien.

Miró hacia arriba.

Un hombre que jamás había visto, se paraba frente a él.

- Así que tú eres el dichoso Felix - sonrió. -Qué ternura.

- H-Hola... ¿Quién es usted?

- Mi nombre es Kim Minjae, es un gusto, muchacho. Déjame ayudarte. - extendió su mano hacia él y el menor la tomó, levantándose.

- Gracias. ¿Eres amigo de Minhonnie? Puedo ir a buscarlo, espera aquí. - Felix quiso correr a la mansión, pero fue tomado del brazo.

- Tranquilo chiquito, yo iré por él, pero antes debo ocuparme de ti.

- ¡No, no, ya basta! - Lix se removió, ¿es que siempre debían perturbar su calma? -¡Min-

Minjae tapó su boca. - Lamento decirte esto justo después de que te dieras cuenta de tus verdaderos sentimientos, pero debo llevarme tu corazón.- de un empujón lo dejó de nuevo en el suelo.

- ¡Me escuchaste!... ¿M-Mi corazón?

- Sí - estiró su mano hacia Felix - Ahora, olvida completamente que alguna vez amaste a Minho.

-¡No! ¡No olvidaré! ¡Minhonnie! - Minjae se inclinó para cubrir su cara con la mano. Felix trató de sacarlo de encima, en vano.

No olvidaré, no quiero olvidar. Es un sentimiento importante del que por fin tomé conciencia.

¡Minhonnie!

[...]

Minho despertó con un sentimiento extraño. La presencia de un demonio se sentía en la mansión.

Se levantó rápidamente y caminó por la mansión con calma hacia la presencia.

Se detuvo cuando la figura de un hombre alto y castaño apareció ante él.

De espaldas, el demonio castaño, se encontraba observando los cuadros que decoraban la pared.

- ¿Qué es lo que quieres, Minjae?

Ante la mención, el demonio volteó a verlo, sonriente.

- Largo tiempo sin vernos, Minho. - se acercó a él. - Están hablando de ti en el mundo de los demonios. Dicen "el gran demonio Minho se llevó al novio del rey demonio."

- ¿QUÉ ...ESTUPIDECES DICES?

- Yo te vi, lo que hiciste fue algo realmente ultrajante.

- ¡No bromees! Para empezar, él es mío. Ese viejo pervertido empezó todo.

- ¡Vaya! - ambos fueron interrumpidos por la presencia de Hyunjin. -¿Qué hace un Duque como Kim Minjae aquí?

- Ah, cierto. He venido a apoderarme de lo que Chan-nim no pudo. Lo que es más valioso para Minho.