Desafortunado. //BL//

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Estaba revisando mi vestimenta frente al espejo, faltaban un par de minutos para que Zack llegara a la cena con mis padres... quería estar bien vestido y presentable. Terminé de arreglarme y salí del baño.

Bajé las escaleras camino a la sala en donde mi padre y mi madre estaban esperando, Michel estaba sentado en otro sofá con su móvil en mano.

Revisé la hora y eran las 7:49pm... como se le ocurra llegar tarde a ese idiota, lo mataré.

El reloj de la sala marcó las 8:00pm mi corazón se aceleró como nunca y cuando pensé que llegaría tarde, el timbre sonó. Noté a Felicia dirigirse a abrir y ni loco iba a permitir eso, me levanté rápidamente del sofá y fui hasta la puerta tomando antes que Felicia el pomo de la puerta.

-Yo abro, gracias. -Fingí una sonrisa, ella frunció el ceño y se hizo a un lado- Zack, desgraciado pensé que llegarías tarde. -Me quejé al verlo al otro lado de la puerta con su sonrisa-.

-Lo lamento, pero estoy acá... puntual.

-Sí... pasa. -Sonreí, él así lo hizo y noté como soltó aire lentamente-.

Lo llevé hasta la sala en donde mi madre y mi padre lo esperaban de pie.

-Zack, ellos son mis padres. Emma y John. -Los presenté, Dylan sonrió encantador y les estrechó la mano a ambos, mi madre sonrió amablemente y mi padre lo miró de pies a cabeza-.

- ¿Pasamos al comedor? -Preguntó mi padre- Me sorprende tu puntualidad, Zack. -Halagó, quise reír y Zack sonrió-.

-Muchas gracias, siempre he sido muy puntual. -Fruncí el ceño, maldito mentiroso-.

Todos nos dirigimos al comedor y yo me senté al lado de Zack, mi hermano al lado de mi madre y mi padre en la cabeza de la mesa.

Las empleadas de cocina comenzaron a servir los platos de la entrada.

-Y... cuéntanos de ti, Zack. ¿Qué tal tus notas? -Preguntó mi padre-.

-Bastante bien, me he dedicado bastante a estudiar para sacar buenas notas y de esa manera graduarme sin ningún problema. -Y eso sí era cierto, a pesar de que cuando yo llegué a la Universidad pensé que Dylan era irresponsable ya que a veces ni siquiera entraba a clases, pero en realidad sus notas eran de admirar-.

-Ya veo... ¿y tu familia? -Carraspeé un poco e iba a hablar ya que sabía que ese era un tema difícil para Zack, sin embargo, me cortó y me dedicó una mirada tranquilizadora-.

-Mi familia no ha estado presente en mi vida, me crie con mis abuelos. -Respondió calmado, miré a Michel y este me miraba burlón, el desgraciado estaba disfrutando verme nervioso-.

Comenzamos a comer y de vez en cuando Zack soltaba un par de pequeñas bromas solo para que yo las escuchara, me estaba haciendo reír más de lo que esperaba... puntos a su favor, ya que, si mis padres me veían sonriendo con él de esa manera, sabrían que es alguien bueno para mí.

- ¿Cómo se conocieron? -Preguntó esta vez mi madre-.

-El día que James entró a la Universidad, él chocó conmigo y ahí nos conocimos. -Respondió, recordé aquel día y recordé como el idiota se había burlado de mi altura-.

-Qué lindo... -Dijo mi madre, si tan solo supiera que el maldito me estuvo obligando por dos días para que cumpliera su favor-.

-Sí. -Asintió sonriente Zack-.

- ¿Qué quieres de James? -Preguntó mi padre, lo miré frunciendo el ceño y él levantó las manos como si fuese una pregunta totalmente normal-.

-Quiero tener su atención... -Respondió Zack, lo miré y sentí un sonrojo comenzar a crecer en mis mejillas, más cuando noté sus hermosos ojos verdes conectando con los míos- Quiero que él sepa que siempre puede contar conmigo... que siempre lo voy a cuidar... quiero tener su confianza... su cariño... -Mi corazón comenzó a acelerarse y tenía tremendas ganas de abrazarlo y besarlo, pero me contuve. Zack sonrió y devolvió su mirada a mis padres los cuales miraban enternecidos la escena, mis mejillas ardieron y bajé la mirada a mi plato de comida mientras bebía un poco de limonada intentando calmarme-.