My Strange ̶D̶a̶t̶e̶ Boyfriend :SunSun:

☾ The cold one and the humans.

SeonWoo se sentía realmente mal con ver a SungHoon desde su lugar en el sillón mientras trataba de hacer tarea, verlo como movía cosas en la cocina, como buscaba por él mismo una olla para poner la pasta, lo hacía sentir la peor persona; no iba a quejarse, le gustaba que Hoon lo pusiera siempre como una prioridad, pero había sido casi un error garrafal enviarle un mensaje a su novio vampiro invitándolo a cenar.

¿Acaso se le había secado el cerebro de tanto estudiar esos días?

SeonWoo sonrió mientras Hoon se ponía el delantal que estaba dispuesto en la cocina cerca del gabinete de arriba, después dobló sus mangas hasta la altura de su codo y tomó las verduras de la bolsa plástica para ponerlas en un recipiente bajo el chorro de agua; tan malditamente guapo, pensó Kim y regresó su vista a su tarea sobre la mesa.

Simplemente, esa semana y media sin verlo, se le había hecho eterna, pero su proyecto en grupo era su prioridad y era casi la totalidad de su nota, así que le hizo saber a los tres vampiros que sus visitas diarias después de su trabajo de medio tiempo estarían suspendidas por tiempo indefinido, y por ende, no vería a Hoon por ese tiempo. Por alguna razón, SeonWoo se sintió nervioso mientras trataba de enviar un mensaje decente a su novio aquella tarde, había intentado al menos unas siete veces escribir un mensaje largo y hasta pensó en llamarle, pero al final solo escribió, "Hyung, ¿qué haces? Vayamos a comer juntos." Claro, SeonWoo había invitado a su novio no vivo a cenar.

—Podemos bajar y puedo comprar algo de Tteokbokki. —expresó el menor mientras se recargaba en el marco de la puerta, esa parte que separaba la pequeña cocina del intento de sala-comedor que había en el departamento; vio a Hoon sonreír sin voltear a verlo mientras tomaba la cebolla y la ponía sobre la tabla de picar.
—Sabes que no vas a lograr convencerme.
—Pero... no creo que sea necesario ese costoso corte de carne y esa pasta que vas a preparar si solo voy a comer yo.
—Puedo comer contigo, si tan mal te sientes.

SungHoon detuvo lo que hacía con sus manos y movió su cabeza para voltear a verlo, SeonWoo, por otro lado, hizo un puchero, todavía recargado sobre el marco de la puerta, el gesto simplemente siendo tan natural, causando automáticamente en el otro una corta risita nasal al primer segundo de haber acabado su frase; Woo se separó de la pared con un leve empujoncito y caminó hasta el mayor sin deshacer su mueca.

—Tú no puedes comer comida de humanos.
—Recuerda que soy un vampiro, en efecto, puedo comer humanos, aunque prefiero la sangre de animales, va mucho mejor con mi dieta, muchas gracias. —expresó en tono formal el vampiro haciendo poco a poco sonreír a SeonWoo con su divertida actitud.
—Pero solo cenaré yo. Además —Kim se acercó tanto que pudo colocarse a su costado para verle desde ahí, solo unos tantos centímetros alejados de su rostro.—, mis compañeros llegaran hasta más tarde, podemos tener algo así como una cita improvisada.
—¿Y tu tarea? —Hoon enarcó una ceja y sonrió de ladino.
—Solo me quedan algunos párrafos para terminar. Anda —Woo casi se colgó del brazo del otro, sintiendo su fría piel contra la cálida suya.—, vayamos a comprar algo de Tteokbokki.
—¿Sabes lo preocupado que estuve al verte comer toda esta semana? —dijo de pronto con una mueca seria y volteando mejor para verlo, tal que sorprendió al otro.
—¿Qué...?
—SeonWoo, comer una barra de cereal como desayuno, beber tazas de café tras tazas de café, y esas comidas preparadas que compras en las tiendas de conveniencia. No. —negó el mayor con su cabeza haciendo una mueca.— Te alimentaré yo esta vez y tú solo te enfocarás en tu tarea, vamos.

Y con sumo cuidado, pero con un toque divertido, le dio un empujoncito con su hombro, creando en SeonWoo otro puchero, mismo que Hoon no notó. Kim trastabilló un poco, salió de la cocina, pero se dio media vuelta a mitad del camino, y todavía puchereando dijo sin pensar demasiado: "Terminaré todos mis deberes, pero me convertirás en vampiro al final."
Lo que pasó después fue un rápido movimiento que Woo no previó; SungHoon se había acercado tan velozmente al cuello del otro, provocando tres cosas en el débil humano: uno, el repentino temblor de todo su cuerpo al sentir como fue tomado por su cintura y empujado hacia atrás siendo su cuello expuesto, dos, el jadeo entrecortado, y tres, un poco de miedo ante la sensación de algo afilado contra su piel.