(Kylan)
Entre a mi casa dando un portazo provocando un estruendoso ruido y un sobresalto de mi madre.
- lo lamento - dije sin ánimo. Ella me miró compasiva, no se de que manera pero ella sabía lo que me pasaba, o al menos sabía por quien estaba así. Intuición materna tal vez, o quizá se lo contaron, no me importaba tampoco.
- hice tu comida favorita -
- no tengo hambre gracias - hice un inútil amago en sonreir. Subi a mi cuarto y me acoste en mi cama después de dejar mi mochila tirada.
Sentía un profundo vacío en el pecho, un hueco en el corazón. No quería hacer nada. no quería salir, no quería ver a nadie, no quería comer ni dormir.
No quiero existir.
Era como si el mundo se volviera oscuro, sin nada de luz, sin sentido. Lo único que quería era estar con Sofia.Sofia. Sofia. Sof....
La puerta de mi habitación se abrió sacandome de mis pensamientos. Cynthia caminó hasta mí y sin decir nada me abrazo. Fue lo que necesite para sacar todo el dolor que tenía adentro, para dejar salir aquel enorme nudo de mi garganta. Había estado todos estos dias guardandome las lágrimas, pero ahora por fin podia dejarlas ir.
Nunca he llorado por nadie, menos por alguna chica, pero me sentía tan mal distanciado de Sofia y lo único que mi cuerpo pedía era descargarme.- shh.... llora, lo necesitas - Cynthia me abrazo y me contuvo hasta que pude calmarme. Me aferraba a ella como si se trata de un salvavidas en medio de un naufragio, pero es que eso es Cynthia. Siempre, desde que tengo memoria, ha estado ahí para mi incluso cuando lo hacia todo mal, y no podría explicarlo porque la sensación de agradecimiento con la otra persona es tan grande, que las palabras no alcanzan.
- te quiero muchisimo, en serio - me separé de ella unos centímetros apenas para verle el rostro - se que no soy bueno expresandome acerca de mis sentimientos pero, espero que sepas lo importante que eres para mi - ella sonrió.
- lo se, porque igual de importante eres tu para mi - una vez mas nos abrazamos, no quería perder nunca a mi mejor amiga, creo que podría soportar lo demas. Es decir, me destroza no estar con Sofia, me duelen hasta los
huesos y la extraño y deseo que volvamos, pero aún asi, creo que con mucho tiempo, podría superarlo. En cambió, si por algún motivo Cynthia se fuera de mi vida, no lo soportaría, estoy seguro de que sería una locura, me desvaneceria por completo en un segundo.- gracias - susurre.
Para hacerme sentir mejor, Cynthia busco distraerme. Comenzamos a mirar el álbum de fotos, había muchas nuestras de cuando éramos pequeños, lo que hizo acordarme de el momento en que me di cuenta de que Cynthia era mi amiga.
Bajé corriendo las escaleras al escuchar a mi mamá gritarme por décima vez. Mi hermana estaba sentada en la mesa con una postura firme, igual a la de un militar. Ella es asi, correcta, en cambio a mi me encantaban las travesuras. Al lado, mi hermana menor jugando con sus muñecos, no me gustaba estar con ella, todos la consentian mucho.
Escuché la puerta de entrada abrirse y la voz de mi madre alegre, al mismo tiempo que mi papá había bajado a saludar a los invitados.
Yo ya los conocía. Eran amigos de mis padres y siempre venían los fines de semana, tenían una hija dos años mayor que yo (que tenía seis años), la niña llevaba un vestido verde que resaltaba con sus ojos, su cabello rojo suelto y muchas pecas, ademas de una sonrisa enorme.
También la conocía, y jugaba conmigo a veces, pero a mi no me gustaba estar con las niñas.- hola Kylan - me saludó agitando la mano. No le devolví el gesto.
- hola Cynta - dije indiferente. Su nombre era complicado para mi edad y no lo pronunciaba bien. Ella soltó una risa.
- ¿quieres jugar? - negué y me aleje. Fui a la cocina a buscar los panecillos que hacía mi mamá. Al ver que no había nadie cerca, llevé uno a mi boca y lo mordi, estaba delicioso, dulce y esponjoso.
Al terminarlo, comi otro y la pequeña de cabello rojo entro y me vio. Creí que llamaría a mis padres o a mi hermana mayor que era capaz de delatarme. Al contrario, agarró uno y comió también sin decir nada.
- ahora somos complices el uno del otro - no entendía que quiso decir, por lo que solo asenti y seguí comiendo.
Nuestras mamás nos descubrieron, y retaron a ambos. Sin embargo, ella dijo que fue su idea la de comer sin permiso, y no entendí porque lo hacía.
- Cynthia, que mal ejemplo le das al pequeño Kylan - reto su madre. Abrí la boca para desmentirlo, pero ella se apresuró agarrando mi brazo y mirándome severamente.
- no debes hacer algo sin permiso nunca ¿entiendes? - y lo entendí, ella me cubrió porque no quería que me castigaran, porque era buena y yo mas chico.
Sonreí y miré a Cynthia pasando las fotos, diez años despues de ese día, estaba ayudándome, otra vez.
- gracias - dije captando su atención.
- no hace falta, harías lo mismo por mi -
Asi fue el resto del día, tratando de pensar en otra cosa que no fuera Sofia.
Al día siguiente, en la mañana, no fui a la escuela. No tenía ánimos, ni fuerza, sin embargo, tampoco me quede en mi cama. Necesitaba aire fresco, despejarme, por eso subi mi moto y comenze a andar, no tenía un punto fijo, solo andaba por las calles mientras la brisa golpeaba mi rostro.(Sofia)
Entre al salón cansada, había dormido poco otra vez a causa de mi corazón, que extrañaba con cada partícula de mi ser a Kylan. No podía evitar pensar en él, cada vez que quería olvidarlo algo ocurre que me hace recordarlo y llorar hasta que mi cuerpo se rinde.
Pasa el tiempo, Kylan nunca vino y tuve que morderme la lengua para no correr hasta Brian y preguntarle el motivo de su ausencia.
La mañana estuvo tranquila, aunque mi cabeza maquinara pensando en el morocho, todo fue normal. Vicky había agarrado una gripe y Max tenía Ed. Fisica, asi que volvería sola a casa.
Mientras caminaba por las calles solitarias, vi a una harley davidson en la vereda de enfrente. Podía ser de cualquier persona, no deje que la cabeza me inundara de cosas y seguí, pero no pude ignorar un cuerpo detrás de la moto. Estaba de espaldas y tenía una chaqueta que se me hacía muy familiar, el cabello oscuro y corto igual que... mis piernas ya corrían rezando que no fuera quien mi instinto decía, que fuera otra persona con mucho parentezco.Me arrodille en el piso y lo di vuelta para verlo bien. Se me encogió el corazón. Kylan tenía la cara golpeada, la ropa salpicada de sangre que le salia por la nariz y el labio, me estremeci. Mis ojos se llenaron de lágrimas, busque mi celular en el bolsillo de mi campera y con las manos temblando marqué al hospital. Kylan abrió los ojos débilmente e intentó moverse, pero un quejido salió de su boca mientras que llevaba su mano al abdomen.
- no te muevas - dije. Al fin me atendieron del otro lado de la línea - ¡por favor una ambulancia! ¡hay una persona herida vengan rapido!¡es urgente por favor! - grité desesperada dejando que las lágrimas empaparan mis mejillas. Di la direccion de dónde estábamos después de un enorme esfuerzo por acordarme, ya que la desesperación y miedo me recorrían el cuerpo impidiendome pensar claro.
- Sofia - me llamó en cuanto corte.
- no hables, tranquilo, vas a estar bien - traté de convencerme mas a mi que a el. No podia dejar de llorar, no quería que nada malo le pasara, me moriría. Kylan sujetó mi mano con fuerza y yo le correspondi apretandolo igual o mas fuerte, no evitaba ahogar mis sollozos, estaba aterrada, sentía mi pecho oprimirse.
"Estará bien", me repetía a mi misma, "no lo perderé".
Nota:
Nuevo capitulo! ¿que paso con Kylan? ¿va a estar bien? ¿se arreglarán al fin? Muchas dudas. Voten y comenten. El próximo esta en marcha y en poco tiempo lo van a tener.BESOS Y GRACIAS POR ESPERAR! ♡♡♡
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Nada Como Nosotros
Romance¿Que pasa cuando el amor elige opuestos? ¿y si esa persona no cree en el amor? Uno no eligen a quien amar solo ama