Nada Como Nosotros

capítulo 15: por que...

(Sofia)

Pasarón las horas y aún no sabíamos nada de mi madre, los chicos estuvierón al lado mío todo el tiempo y verdaderamente se los agradezco. Estaba cansada de esperar y nerviosa tambien. Desde el día de ayer había llegado mi padre al hospital, por supuesto no le dirigió la palabra a nadie, para mi no era ninguna sorpresa.

Un médico salió de la habitación dónde se encontraba mi mamá y nos abalanzamos hacía el. Necesitabamos una respuesta definitiva, ya no podíamos más.

- doctor, ¿cómo esta? ¿ya desperto? -

- afortunadamente si, la paciente esta fuera de peligro - respiré aliviada en cuánto lo escuché -  por ahora tiene que hacer reposo, necesita recuperarse. Lo que sucedió con su madre no puede volver a pasar, vamos a tomar otras medidas para tratar su depresión, para su bienestar -

- y, ¿podemos pasar a verla? - preguntó Max

- uno a la vez.... - Cruzamos miradas, todos queríamos verla, pero a la vez, ninguno tenía el valor para hacerlo.

- yo voy a entrar primero - dije firme. Todos parecierón aceptarlo, asi qué caminé hasta la puerta con pasos lentos, observé el picaporte unos segundos y miré a mis amigos antes de entrar, sus miradas me incitaban a que pasará de una vez.

Al entrar, la ví en una bata blanca, típica de hospital, recostada en la cama, conectada a un montón de cables y máquinas para respirar y controlar su ritmo cardíaco. Por un segundo, sus ojos conectarón con los míos, erán igual de verdes. Enseguida, desvió la mirada a un punto invisible en la pared, me senté en la silla que estaba al costado de la cama y la miré en silenció.

- ¿porqué lo hicisté?  - la pregunta salió de mi boca casi sin pensar. La respuesta nunca llegó, y no íba a volver a llorar, eso no solucionaría nada. - respondé - obligué. Me ignoraba por completo, no registraba mi presencia. Comenzaba a enojarme, soy su hija no un extraño, se comportaba cómo una niñita y no lo era - mírame - dije, perdiendo la paciencia. Me levanté de la silla y fuí hasta el otro lado, giró su cabeza evitándome. Repetí el acto otra vez, llendó a dónde me había sentado anteriormente, ella volvió hacer lo mismo. - ¡ELIZABETH MÍRAME! - grité.

Muy sorprendida por mi reacción, volteó a verme. Inhalé y exhalé pesadamente.

- ¿¡porqué lo hacés!? ¿¡porqué!? ¿es por algo que hicimos nosotros? ¿es culpa nuestra? ¡decime! ¿¡porque te empeñas en acabar con tu vida a toda costa!? ¿he? ¿porqué? -  las lágrimas caían de mis ojos, pero no erán de dolor, erán de impotencía, frustración - ¡HABLÁ! -

- ¡POR QUÉ NO PUEDO AYUDARLOS! ¡NO PUEDO! -  gritó

- ¿que? - sus palabras me habían dejado impactada, el llantó se apoderó de sus ojos, por lo qué cubrió su rostro, me acerqué a ella lentamente. Destapó su cara y nuestras miradas chocarón fijamente. Con las lágrimas recorriendo su cara, habló:

- hacé un año, antes de todo esto, nos empezamos a llenar de deudas muy grandes que no podíamos pagar, tratamos de vender cosas, pero no teníamos suerte, nadie nos compraba nada, estabamos en quiebra - suspiré -  Me sentí abatida, triste, los ví a ustedes y sentí mucha culpa, por que no podía darles la vida que siempre quisé, sabía que se íban a sentir decepcionados cuándo lo supierán... y no pudé con eso... - relamió sus labios, cerró los ojos y negó con la cabeza - no encontré otra solución, me sentía estupida, inservible por no poder mantenernos... - me miró fijamente - nada es culpa suya, nada... todo es culpa mía y de tú padre, ¿sabés porque el trabaja todo el día? para evitar volver a acumular deudas. ¿sabes porqué no podía mirarlos o hablarles? por que estar en este lugar me da verguenza.... -

- ¿y porqué lo volvisté a hacer? ¿porque en vez de curarte empeóras si te dá tanta verguenza? - la interrumpí molesta

- por qué me siento poca cosa, sin ánimos, por que sigo sintiendo culpa por lo que pasó y pasá ahora... -

-  y ¿creés que matandóte lo vas a lograr?, que estés así es la principal razón por la cuál sufrimos y  lloramos, todo por tu locura-

- ¡perdón! - dijo

- tampoco va a solucionarse pidiendó perdón... - respiré aire - ¿porque nunca nos dijerón? -

- porqué no queríamos que se preocuparán - al escucharla enfurecí completamente

- ¡me estas cargando! Julia trabaja, los gemelos trabajan.... León, vendió su departamento cuándo vinó a casa después de que te internarán.... ¡podríamos haberlos ayudado y nada de esto hubiera pasado! - tomé mi cabeza entre mis manos y suspiré frustrada - voy hablar con los demás, lo tienén que saber.... -

- ¡no Sofia! tu papá no quiere -  apresuró ella

- ¡me importa una mierda! ya pasamos demasiado... - salí de aquella habitación y a pasos veloces me acerqué a dónde estabán todos.

- Sofia... - Kylan me llamó pero no le respondí

- ¡deciles! - le dije a mi padre en cuánto estuvé frente a el

- ¿de que hablas? - preguntó confundido

- de las deudas, mamá me contó todo - su rostro palideció al oírme

- ¿mamá te habló? - la voz de León fue temblorosa

- si, y me dijo por que se quisó matar... - mis hermanos quedarón estupefactos, no me detuvé y les conté todo lo que me había dicho mi madre.

Sus reacciones no fuerón mejores que las mías. El problema no era que hayán tenido deudas, y que tuvierán problemas para pagarlas, Tampocó que se comportarán así, claro que no es lindo nada de eso pero lo que de verdad nos enojaba muchisimo, es que no lo dijerón, que lo ocultarán. Las cosas hubierán sido distintas y menos dolorosas, y al parecer, ellos no lo tuvierón muy en cuenta.

Después de eso, volvimos a casa, claro que no me alcanzarón las palabras para agradecerles a Fanny, Kylan, Cynthia y Brian por estar conmigo. Ellos prometierón no decir nada a nadie, otra cosa que agradecí muchisimo.

Caí en un profundo sueño apenas toqué la almohada

nota:

Nuevo capitulo!!!! esta vez lo subí más rapido ya que tuve tiempo, se me hizó algo corto, es que ya no se que mas escribir por hoy lo siento... prometo que el que viene será mas largo :)

ojalá les guste BESOS! <3

PD: perdón si hay errores.