El ayer que olvidé ━━ 𝘚𝘩𝘪𝘴𝘶𝘐𝘵𝘢

XVI: El nombre de un lugar tranquilo

La confesión de Itachi aquella noche me cayó como balde de agua fría, mi mente trató de procesarlo lo más rápido que ella mismo se lo permitió, sabía muy bien lo que eso significaba, de verdad me inquietaba mucho el haberme sentido emocionado.

Ese hombre no debía importarme.

Pero yo mismo me contradecía una y otra vez, volviendo al inicio, desbaratando todos aquellos avances que por un par de días se sintieron como la gloria, estuve corriendo en la línea del fuego por un tramo muy largo, necesitaba algo de agua para traer la calma, un sentimiento que me había despojado de sus ventajosos estándares.

━Empiezas a recordar ━llegué a esa conclusión después de analizarlo rápidamente.

Era obvio, solo un ciego no se daría cuenta.

Hablaba de un lugar único, ocupado por dos mentes, y una de ellas dejó de existir, al menos parcialmente.

En serio que esto podía significar que mi ex esposo volvería a ser el mismo de siempre cuando pensamos lo contrario, cuando nos rebajamos a aceptar que empezar de cero y crear nuevas cosas hasta el final sería nuestro destino. Pues por un tiempo de verdad lo pareció

El viejo Itachi estaba volviendo a la vida.

Ese viejo amigo que me traicionó.

━¿De verdad lo crees? ━cuestionó llegando hasta mi lugar.

Sin querer ser tan obvio retrocedí unos pasos discretamente, poniendo una de mis manos sobre mi cabeza como si estuviera pensando tal y como los detectives de esas películas de misterio, dando un par de vueltas por mi sala sin rumbo fijo.

Mentiría si dijera que no me resultaba tentador que su memoria regresara por completo hasta llegar a la noche del accidente, porque había tantas cosas que necesitaba preguntar, las dudas no se iba a quedar ahí flotando por la eternidad.

Antes de partir y no volver a vernos jamás de verdad me tenía que decir, a partir de su versión, qué lo llevó a tomar la decisión de divorciarse de mí, me estaba esforzando y desmoronando por llegar hasta ahí, necesitaba de mi recompensa, me daría paz de aquí hasta terminar el camino.

━Nunca te hablé de Nakano, en todo este tiempo jamás lo he hecho, no se me pasó por la mente, y aún así no tengo manera de mostrárselo como para te hicieras una imagen mental de cómo era, simplemente no hay manera ━regresé la vista a la puerta de salida, y hacia esos ojos oscuros y curiosos.

Ahí surgió una idea que bien y podría llevarme al borde del precipicio definitivamente.

Con el cuerpo tenso y tembloroso me apollé en una de las paredes de la casa, y mi mente viajó hacia el otro lado del mundo, donde se encontraba el paraíso de Nakano, quiero imaginar que sigue siendo el mismo que yo y mi mejor amigo habíamos encontrado, escondido entre lo más recóndito del bosque, hubo pisadas antes de las nuestras en ese lugar, sin embargo nos sentíamos los dueños de ese pequeño trozo de tierra, a pesar de que habíamos visitado Japón a lo largo de nuestra vida en Estados Unidos nunca volvimos a Nakano de nuevo.

¿Podía ser hora de mi regreso?

Quería que Itachi recuperara su memoria borrando todo lo que habíamos pasado estos meses de tormenta constante, pero tampoco quería que alguien más que no fuera solo nosotros dos ultrajara nuestro pedazo de cielo.

━¿A ti te gustaría ir a Nakano? ━mi pregunta rasgó el silencio y el mortífero juego desconocido que habíamos empezado.

━Claro que sí ━sus movimientos me recordaron al alboroto de las bandadas de aves que vuelan a sitios más cálidos, sitios que les hacen recordar cosas mejores━. ¿Qué acaso no lo ves? De verdad mi sueño me podría llevar al lugar donde obtendré todas las repuestas que necesito para volver a ser yo, y no desaprovecharé esa oportunidad, lo único que debes decirme es dónde queda ese tal Nakano.