Kojiro Hyuga hace unos días estando en la selección perdió a su familia, debido a un desastre natural.
el Equipo de la selección junto a su entrenador intentando animar a Kojiro hicieron una excursión a un lugar lleno de inventos revolucionarios. Un...
-¿¡Entonces podía volver a la normalidad!? -pregunto exaltado el entrenador.
-aclaro que si ¿Cuando dije que no? -respondío con algo de desinterés el científico.
-¡Pero usted me dijo que solo UNO podría estar como antes! -reclamo Kitasume.
-si, pero me refería a que solo UNO podría estar como antes, antes del mundial. El otro tendría que esperar unas semanas hasta que cargue la energía.
-me hizo preocuparme al pedo -volvio a reclamar.
-bueno, considerando la actual situación, al pedo, pedo no sería. -respondío burlón el de bata. Tratando de disimular su sonrisa.
-ahg
El ambiente en el laboratorio se había vuelto algo tenso.
El científico estaba enojado por la destrucción de su máquina. Kitasume por lo poco claro que fue el primer mencionado. Kojiro lloraba a pata suelta agarrado a Wakashimazu, mientras que esté trataba de consolarlo. Tsubasa se lamentaban el no darle su lugar a Kojiro cuando tuvo la oportunidad. Y los demás miraban todo esto impotentes, ya que sabían que no podían solucionar nada.
Lo único bueno en ese momento era que ya había vuelto la luz. Porqué por lo demás, era todo un caos.
-¿No hay nada que se pueda hacer? -se ánimo a preguntar Takasugi.
-no. -respondío seco este el dueño del lugar.
-¿Y que va hacer Hyuga? Nadie nos va a creer que se metió a una máquina del tiempo
-pues hubiera pensado en eso ANTES DE METERSE A LA MAQUINA -le grito Liam. Ya estaba harto de esos jugadores, no quería verlos ni en pintura. Pero para su mala suerte, los tenía a toditos en su sala.
-y a todo esto ¿Por qué creaste una máquina así? Es decir, solo tu cuerpo viaja en el tiempo, no tú. Realmente no veo su utilidad -menciono Ishizaki, abriendo su gran bocota, en el peor de los momentos. Varios giraron hacia más calvo con cara de "¿Es enserio?"
-tengo 105 años, aunque no lo parezca -le respondió con seriedad y una cara de pocos amigos.
- ¿Y que? La usaste para parecer de 104 -pero Ishizaki ni cuenta se daba de esto, o más bien ni le importaba.
Sin embargo a los demás...
Todos los que no se habían girado con el primer comentario del 14, ahora sí lo hicieron, y con bastante rapidez.
Todos los ajenos a la casa donde se encontraban, miraban con exaltación al último que hablo.
No podían creer lo que estaba diciendo. Y en la situación que estaban eso no era bueno.
-¿Que dijiste? -pregunto Liam rojo de ira, y con una vena apunto de estallar
-que se ve muy joven
-SALGAN TODOS YA!
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Narra Ishizaki
Realmente no entendiendo a las personas.
Al principio estaban todos apurados, queriendo salir lo más rápido posible de la casa e irse al entrenamiento. Y ahora que estamos todos fuera del lugar como querian ¿Se enojan conmigo?
-ustedes no agradecen nada -les reclamé muy ofendido
-¿Agradecer? -me repitió Genzo con unos pequeños tics en su ojo.
-¿¡Quieres que te agradezcamos por dejarnos varados bajo la lluvia, mientras esperamos que alguien pueda despertar al conductor del bus para que nos deje entrar!?
-si!
-¡Pues GRACIAS!
-¡De nada!
-alguien puede callarlo -se escucho la voz de soda más al fondo.
Bufé molesto por eso. Encima que le doy soluciones a sus problemas ¿Se quejan? ¡Que malagradecidos!
Narra Wakabayashi:
Me encontraba tiritando bajo la halada lluvia, ya que a Ryo se le ocurrió salir con alguna de sus babosadas en el peor de los momentos, sin mencionar a un conducto tiene el sueño pesado, y no nos abre la puerta.
Mire a mí alrededor agotado, buscando donde refugiarme. Y en mí búsqueda veo a Ken tratando de cubrir a Kojiro con su buzo, el moreno se veía bastante mal, quizás se había resfriado. Me les acerque sacándome mí buzo rojo y poniendo encima del más pequeño.
-no es perchero -me reprochó el portero.
-lo se, es para resguardar a Hyuga -le dije. El karateca me miro no muy convencido, sin embargo no dijo nada, solo se dedicó a arrullar a su amigo.
-¡Ya abrió, pasen!
Luego de eso todos subimos, y pasamos a otro silencioso viaje, pero de regresó
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Narra Kojiro
Al pasar de un tiempo bajo la lluvia me dormí. Mí cabeza y ojos dolían. Además de que había agarrado temperatura.
Wakashimazu hacia lo posible por cubrirme del diluvio, pero las prendas con las que me tapaba estaban mojadas, y solo lograba causarme más frío. Igual no me quejaba, ya que los brazo y pecho de Ken me transmitían algo de calor. Luego de un tiempo desperté, estaba en mí habitación, con ropa seca y bajo las cobijas. Me removí un poco tratando de acomodarme y en lo que lo hacia me percate de algo, o mejor dicho alguien.
-wakabayashi?
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
