El primero en despertar había sido el oso, francamente era la mejor noche que habían dormido desde el incidente, especialmente Juan quien rara vez lograba volver a dormir despues de una pesadilla. Spreen intento levantarse con cuidado para no despertar a Juan, el problema es que el hechicero estaba aferrado a el y no importa cuanto intentara hacer que lo soltara, el maguito solo parecía sostenerlo con mas fuerza cada vez que lo intentaba. El oso no tuvo mas remedio que quedarse ahí, de cualquier manera iba a llegar tarde a su trabajo hoy y si eso implicaba que Juan pudiera descansar un poco mas entonces valía la pena.
El hechicero no tardo mucho en levantarse, inicialmente pensó que estaba abrazando a una almohada, el problema es que las almohadas no suelen hablar. “Buenos días, bella durmiente.” Existe la pequeña posibilidad de que Juan se sonrojara por la voz de Spreen la cual sonaba mas ronca porque se acababa de levantar, no tuvo tiempo de pensar en ello. “AY CABRON!” Finalmente Juan lo soltó y en su pequeño pánico termino por caerse de la cama, el oso sacudió levemente la cabeza con una pequeña sonrisa, el mago realmente era un pelotudo.
“Asumo que dormiste bien.” De hecho si, Juan no se había sentido tan descansado desde … de hecho no se acuerda desde cuando, ser el hechicero supremo era un trabajo muy cansado. “Pues para tu información si dormí muy cómodo.” Spreen se levanto de la cama ofreciéndole a Juan una mano para ayudarlo a levantarse del suelo. “Me di cuenta boludo, no me querías soltar.” El leve sonrojo en la cara de Juan se volvió mas fuerte, aunque esta vez fue por vergüenza. “Perdón.” El oso solo se encogió de hombros saliendo del cuarto. “No la penses mucho wacho, no es la gran cosa.”
Juan decidió ir al baño antes de bajar, echarse algo de agua fresca en la cara para despertar por completo e intentar bajar el color de sus mejillas, si es que solo a el le pasan este tipo de cosas. Llego a su biblioteca por el libro con el hechizo antes de bajar a la cocina donde Spreen ya se encontraba haciendo el desayuno, Juan se sentó repasando el hechizo en su mente cuantas veces pudo antes de que el oso le sirviera su plato. El híbrido termino arrebatándole el libro y sosteniéndolo fuera de su alcance. “No hay magia de cumpleaños si no comes, no te quiero desmayándote.”
Juan coloco sus codos sobre la mesa y su cabeza sobre sus manos. “Aw, si te importo~” Despues de todo lo que habían pasado era mas que obvio, pero el molestarse como lo hubieran hecho en el pasado siempre era divertido. “Mas quisieras Gafotas, ahora cállate y come.” Juan le envió un mensaje a Zorman para que viniera antes de realizar el hechizo y finalmente se puso a desayunar … mas que nada porque Spreen le gruño al ver que se había distraído con algo mas, no era una amenaza pero aun así era un método efectivo.
El desayuno paso sin mayor conflicto y Spreen finalmente le devolvió su libro, Juan salió a preparar todo lo necesario para su hechizo delimitando un área para trabajar que Zorman ni Spreen debían cruzar, usualmente la magia de Juan ya solía salir mal, el que este inestable solo podía dar peores resultados así que quería asegurarse de que ninguno de sus amigos saliera herido o terminaran con algún efecto secundario. Spreen se quedo mirando al hechicero trabajar hasta que llegara el científico, jamás pensó que Juan pudiera concentrarse tanto … de hecho jamás pensó que Juan pudiera concentrarse en general.
“Zorman! Que bueno que llegas! Mira en resumen, voy a hacer un hechizo pero como mi magia sigue medio corrupta no sabemos que pueda pasar, así que mejor si estas aquí.” Juan se sentía un poco emocionado de intentar usar su magia normalmente otra vez, estaba seguro que podía hacerlo sin que su poder se saliera de control. “Juan debería revisarte antes de que hagas algo.” Zorman sujeto la muñeca con la intención de revisar las marcas negras notando que estas se veían mas grandes que antes, no tuvo mucho tiempo de revisar ya que Juan se zafó de su agarre y Spreen lo veía como si quisiera matarlo, mentalmente Zorman tomo nota de que Juan aun seguía incomodo con el contacto físico. “En fin, puedes acomodarte donde gustes solo no entren al cuadro hasta que haya terminado por su seguridad.”
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Matar a un dios • Spruan
FanfictionJuan y Spreen han tenido sus roces y peleas en el pasado, pero cuando Spreen encuentra a Juan tras ser atacado por un desconocido, se vuelve su misión personal el encontrarlo y hacerle pagar por todo. Sea una persona o un dios el mimso de encargara...