¿Qué problema tiene la edad? [CORTO]

Capítulo |2|

Emma.

Mi cuello dolía por la posición que tenía y mi cabello estaba pegado a mi cara que estaba húmeda de sudor.

No, diablos.

Odiaba sudar.

Quise moverme pero el brazo pesado de alguien no me dejaba. Giro sobre esta y al recobrar la memoria sonrió sabiendo que era Nate. No podía recordar la última vez que haya disfrutado de un buen sexo.

Veo la luz de la mañana por su ventana y supe que era hora de irme, no debí quedarme dormida aquí desde un principio.

Recojo mis bragas del suelo y me la pongo.

-¿Te irás como ladrona?.

Doy un brinco del susto. Giro para verlo y su cabello castaño estaba alborotado y sus ojos alto hinchados. Wow no recordaba que se viera tan sexy, ni siquiera lo pude apreciar bien anoche porque lo único que quería era tenerlo dentro de mi.

- Me asustaste. - recojo mi vestido y me lo pongo. - Y si, ya tengo que irme. No debí quedarme a dormir.

- Estabas ebria, no iba a dejar que te fueras así.

Se pone de pie y me deja a la vista su trasero redondito. Se pone unos bóxers sueltos de cuadros azules y una camisa que agarra de su armario.

- Pero ahora ya tengo que irme. Fue divertido, gracias.

Tomo mis botas en la mano y cuelgo mi bolso en mi hombro. Cuando abro la puerta este la cierra de un portado y me giro sorprendida para quedar acorralada entre su pecho y la puerta.

-¿Me agradeces por tener sexo contigo?

- Soy una mujer agradecida - me encojo de hombros y este con su mano libre acaricia mi mechón para dejarlo detrás de la oreja. Fue sexy pero no quería que lo repitiera. - Tengo que irme. Ahora.

En un acto sorpresivo toma mi rostro y me besa de forma brusca y fogosa. Gimo al tomarme fuera de base y hago que mis botas caigan para enredar mis manos en su cabello. Baja ambas manos a mis muslos y me sube hasta su cintura y mis piernas se enrollan en esta.

Sonríe en el beso y le da un apretón a mi trasero.

- No creo que te quieras ir aún, ademas mis padres se irán como en media hora.

Dejo de besarlo para separarme.

-¿Vives con tus padres aún?.

Asiente -¿Que tiene de malo?.

- No lo se, yo me fui de casa a los 18.

Miro detrás de él y hay una foto de él y sus padres en su escritorio junto con un lienzo y unos libros.

- Está en mis planes vivir solo luego - besa mi cuello pero ahora mi cabeza rondaba otra pregunta.

- Nate, ¿cuántos años tienes?.

- Mmm veinte.

Ay Dios mío.

Mi cuerpo se pone frío y me bajo de él inmediatamente dejándolo confundido.

- Mierda, mierda, mierda - pasó mi mano por mi cabello mientras camino por la habitación.

- ¿Qué pasa?

Lo miro furiosa y lo empujo con fuerza pero este apenas y se mosquea.

-¿Porqué no me dijiste que tienes veinte?, oh Dios mío. ¿Si quieras has terminado la universidad?.

- No aún me falta un semestre. Tranquila.

- ¡No me digas que me tranquilice!. No me acuesto con menores ¡Dios!.

- No soy tan menor.

- Cállate, cállate. - cojo mis botas nuevamente y abro la puerta de su habitación.

- ¿supongo que no quieres que te llame?

Su rostro estaba algo herido , no era mi intención pero estaba tan enojada y decepcionada. Yo no salgo con menores y aunque solo sean siente años son muchos para mi.

- Por supuesto que no. Y si yo te di mi número elimínalo por favor.

Luego salí de ahí corriendo ignorando a sus padres que comían en el comedor, fue tan humillante.

...

- Y luego saliste corriendo como en una maratón - repite James mis palabras mientras se ahoga en sus carcajadas.

- Ya basta.

- La tranquila Emma saco las garras. Toda una asalta cunas.

Le sigue Melanie.

- No les volveré a contar nada. - suspiro haciéndome un ovillo en el asiento individual.

- Emma el tipo era lindo, por lo que recuerdo, y no se le notaba nada precian una pareja normal.

- Deja de hacer comparaciones con parejas que me da náuseas, follamos y se terminó no quiero hablar de eso.

- Emma, relájate. Tú eres la única que se complica. - dice Melanie.

Y era verdad, me siento como si hubiera cometido un delito. Pero yo no hice nada para pervertirlo, ese ya era todo un picaron de cara inocente pero con el diablo entre las piernas. Aunque yo le coquetee toda la noche.

Ay Dios, mátame.

- Mejor dinos cómo te fue con Blaeck ¿Si fue?.

Pregunto cambiando de tema.

La cara de Melanie cambia y hace una mueca.

- Si fue pero se interesó en otra bailarina y pues creo que follaron y todo, la perra no paro de hablar de su gran pene.

- Ouh, lo siento.- le dije.

- Tranquila Mel, lo que aprendí de Marcos fue a no mendigarle atención a nadie quien no se la merezca.

- James tiene razón. - le apoyó y ella asiente. - Bueno, fue lindo conversar iré a bañarme tengo guardia y tengo dolor en el cuerpo de mil demonios creo que me inyectare un relajante muscular.

- Uuuy, tiene buena mano el colageno. - le lanzó el cojín a James - au.

En la ducha mientras el agua caia en mi cara mi mente me hace una mala jugada recordando los sucesos de anoche. Cuerpo quería volverlo a ver pero mi mente le huía aterrada. Decía que era un niño, pero en definitiva no lo era.

Sus manos grandes, su boca, su lengua...

Necesitaba ayuda profesional.

...

- Doctora Macabee, que bueno es verla. - dice al jefe de enfermeras que claramente le caigo mal. ¿Porque?, no se.

- Amm, si, trabajo mucho por eso no me ves seguido. ¿Me necesitas ? tengo una paciente que atender

- Nada, solo que me sorprendió no haberla visto anoche, hubo premios y comida.

- lo se, he ido a una celebración del día del médico, espere ¿que hacía usted ahí?.

Guardo mi mano en mi bata mientras camino por los pasillos.

- Bueno, salgo con el doctor Dean y pues me invitó.

Ya sabía que este acercamiento venía con algo más, el doctor Dean y yo salimos un par de veces ambos teníamos mismos intereses pero al enterarme que habla de sus conquistas con sus internos lo deje ahí, no quería que los internos supieran de mí y como follo.

- Bien por ti, ahora me retiro.

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Segundo cap, se que es muy rápido para quedar atrapados pero agradezco el tiempo que le dan.

Graciassxoxoxoxo