Capitulo |8|

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Emma.

Entró a la casa de Gloria y busco mi bolso, cuando iba a irme me detuve porque no recordaba su dirección.

Salgo al patio trasero y busco a Austin y lo veo tomando ponche en una esquina, agradesco que esté lejos de James y no pueda reprocharme.

— Austin, hola — me sonríe y termina su bebida —¿Podrías por favor darme la dirección de Nate? — Frunce el ceño — Es que...tenemos que hablar ¿sabes?.

— Oh, entiendo. Por eso se me hizo raro ver a Sarah aquí.

Asiento fingiendo pesar y este me pide el teléfono para anotarla en mi gps , le agradezco y salo de casa para subirme a mi coche.

Doy exactamente todas las vueltas tontas por los vecindarios, pero media hora después llegó. Dejo el coche adelante del suyo. La casa era realmente grande y hermosa, no se como supe escaparme con éxito al principio.

Subí las escaleras del ante jardín y llegue a la gran puerta de mármol. En una esquina veo el timbre y lo tocó varias veces para que les molestara el sonido.

Nate abre la puerta con la camisa desabotonada al igual que sus pantalones, ajusta la puerta detrás de él y yo solo lo veo con la boca abierta.

— No.lo.hiciste —. Digo en pausa, tratando de controlarme.

— De hecho si.

Muerdo la parte interna de mi mejilla y doy un grito de rabia antes de golpearle el pecho con mi bolso.

— Te odio. Te odio. Te odio.

Él no se cubre ni me detiene, en su descuido entro a la casa y cierro la puerta dejándolo afuera.

— Emma— escuchó que toca la puerta — ¿Que vas hacer?, ábreme.

— No,  eres un cabron. Igual a todos.

— Esto es lo que quieres de mi.

— ¡ay ya cállate!, también puedes decirme que no, así demuestras que eres un adulto, entenderé que no estes deacuerdo en la cosas que decidió y aunque me vaya a molestar al final lo aceptaré porque no soy una maldita cabrona.

Se queda en silencio y me quedo mirando la puerta con una decepción terrible, se que yo me lo busque pero no crei que fuera capaz de hacerlo.

La ira me inunda la cabeza al solo pensar que la beso, la toco y se la follo como me folla a mi.

¿Donde está esa maldita perra?.

Empiezo a subir las escaleras abriendo todas las habitaciones buscándola. Recorrí todo el primer piso pero no la encontré, baje y busqué en las habitaciones pero nada, entonces veo unas escaleras hacia el sótano y veo la luz encendida.

Te encontré.

Baje las escaleras y entrar en este la veo sentada en el sofá en una esquina mirando la televisión. Al verme se sobre salta y se pone de pie. Mira hacia las escaleras con miedo.

—¿Donde está Nate?.

— Salió a dar una vuelta. — lanzó mi bolso al sofá individual  y me acerco a ella.

— Yo...yo lo siento.

—¿Porque tan nerviosa?, hace media hora parecías que estabas dispuesta a todo.

Ella niega alejándose — Lo siento.

— Deja de disculparte, ¡por Dios! ¿Porque creen que soy la mala?.

Me frustro delante de una chica de 20 o 19 años, más bajo no podía caer.

— Es que me intimidas mucho. Eres la que perturba los pensamientos del chico que amo, debería odiarte pero no puedo.

¿Qué problema tiene la edad? [CORTO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora