En caso de que algo me pase || Hyunlix

VII

(N.A: Este es un capítulo especial por el cumpleaños de I.N y solo es una pequeña historia antes de todo lo sucedido en la fanfic. Sin más que decir, espero que lo disfruten)

Febrero 8, 2008

La campana resonó por los salones y pasillos de esa escuela primaria indicando que el día de clases habría terminado y dando paso al —tan esperado— fin de semana.

Jisung se encontraba muy emocionado por que hoy sería la primera vez en la que sus padres le dejarían tener una pijamada y no veía la hora de llegar a su casa y jugar videojuegos toda la noche con Hyunjin y Chan.

Jisung ya tenía todas sus cosas guardadas en su mochila, pero por otra parte, Hyunjin se estaba tardando demasiado para el gusto del menor; tanto que diría que estaba yendo a paso de tortuga embarazada.

Chan ya se encontraba en la puerta del salón esperando la salida de los otros dos chicos mientras Jisung apuraba insistentemente al pobre de Hyunjin para que terminara de agarrar sus pertenencias y dirigirse a la casa del menor.

En cuanto Hyunjin terminó de recoger sus pertenencias los tres chicos salieron de la institución en cuestión de unos escasos minutos, y ahora se encontraban caminando hacia la residencia del de mejillas que recordaban a las de una ardilla.

El camino a casa fue uno lleno de risas y bromas entre los tres niños, y la diversión aumentó aún más cuando llegaron a la residencia Han.

Hyunjin y Chan saludaron amablemente a la señora Han en cuanto entraron por la entrada principal de la casa, y acomodaron cuidadosamente sus pertenencias en el cuarto de Jisung.

Cuando los niños regresaron al comedor encontraron sus platos de comida servidos y una nota de la señora Han indicando que no estaría en casa alrededor de dos horas por las clases de fotografía del mayor de los hermanos Han.

Los tres chiquillos comieron a toda prisa y limpiaron el espacio recién usado para después jugar videojuegos en lo que esperaban a la llegada de la mamá de Jisung y salir al parque cerca de la casa.

Aunque bien el padre de Jisung podría acompañarlos al parque, el pequeño prefería la compañía de su madre y decidió que no haría daño esperar un poco a su llegada en vez de molestar a su padre que se encontraba encerrado en la oficina de esa casa.

Estuvieron un rato jugando Super Mario Galaxy en la nueva consola de Jisung, hasta que escucharon que alguien tocaba a la puerta.

Jisung rápidamente fue a atender el llamado y se encontró con su vecino Jeongin sosteniendo un recipiente con pastel dentro.

Jisung invitó al menor a pasar para saludarlo y felicitarlo apropiadamente.

— ¡Innie, feliz cumpleaños! —dijo Jisung mientras envolvía al menor en sus brazos con un cálido abrazo.

— Gracias —continuó Jeongin mientras se separaba del mayor— mamá me dijo que les trajera pastel.

— ¿Es de vainilla? si no, no lo quiero —bromeó Jisung.

— Obviamente —se escuchó la sonora risita del cumpleañero.

Y en ese momento fue que Jisung recordó que tenía invitados en su propia casa y debía presentar a su mejor amigo con los otros dos.

Los chiquillos que se encontraban en la entrada de la residencia se dirigieron al cuarto de Jisung para encontrarse a los dos mayores hablando de cosas triviales en lo que esperaban el regreso del chico de lentes.