Capítulo 02

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NIRA

Abro los ojos y me sorprendo al no encontrarme mi habitación. ¿Donde estoy?

-Túmbate -dice una voz, empujándome otra vez hacia la cama.

-¿Quien eres? ¿Donde estoy? -pregunto histeriacemente mientras me remuevo en la cama pero hay alguna cadena que me impide ir demasiado lejos.

El Na'vi del bosque al que disparé solo rueda los ojos antes de contestar.

-Soy Neteyam -murmura en tanto me pasa un trapo frío por la frente sin mucha delicadeza.

-No has contestado a la segunda -escupo con odio.

-A ver, princesa, ¿Donde crees que estás? -pregunta sarcásticamente.

Se está riendo de mí el muy capullo.

-Uhm... ¿Al lado de un gilipollas? -contesto yo levantando una ceja.

Él solo se ríe y aprieta el trapo sobre mi herida de la cabeza, y yo suelto un grito de dolor.

-Prueba otra vez. -Ladea la cabeza pero aparta el trapo de mi cabeza para remojarlo en agua.

Iba a contestar pero una voz grave me interrumpe;

-Neteyam -dice la voz pero suena más como una orden.

Neteyam se tensa y se aparta de mi camilla.

-¿Señor?

-Tu turno ha terminado -dice el na'vi del bosque mirándome fijamente a mi.

Es obvio que es su padre y que no está contento de que su hijo me pase un trapo por la frente.

-Si, señor.

Neteyam agacha la cabeza y se va de la cabaña sin dedicarme tan solo una mirada, justo en este momento acabo de notar que tiene el brazo izquierdo cubierto por una venda blanca por mi disparo. El Na'vi del bosque entrecierra los ojos en mi dirección y yo le sonrío.

-Ahora vas a venir conmigo -murmura él y yo me limito a sonreír.

No es que tenga elección.

[...]

No me están torturando, y en verdad es un poco decepcionante. Solo me están preguntando datos sobre mi clan que solo un idiota contestaría.

-¿Cuantos soldados tienes? -pregunta Tonowari por terecera vez.

Mis soldados se deben de haber retirado para informar a mi padre de mi desaparición, pero no tardarían en venir a buscarme en cuanto descubran que estoy aquí.

-Los suficientes como para acabar con tu pueblo -contesto con cara neutra.

Tonowari frunce el ceño.

-Es inútil, ella no va a hablar -indica el na'vi que he descubierto que se llama Jake Sully.

-Pues déjame hacer que hable -gruñe Neytiri.

-No funcionará, solo mírala -contesta Tonowari señalándome con la cabeza -. Su clan la ha torturado para prepararla para este momento, la han sometido a torturas mucho más fuertes de las que vamos a hacerle jamás.

-Pues las preguntas son igual de efectivas -gruñe Neytiri.

Tonowari se queda pensando un segundo y yo solo puedo pensar en mis muchas heridas en mi rostro y cuerpo y en la mala pinta que tendrán. Me duele todo.

-Va a vivir con nosotros -dice Tonowari al cabo de unos segundo y Jake y Neytiri se giran hacia él con la mirada perpleja -. Va a aprender nuestras costumbres hasta que vengan a buscarla. Porque vendrán.

Neytiri gruñe pero sabe que no puede decir nada, no es su clan. Y he descubierto que ellos vinieron hace apenas dos años así que no es que tenga voz en esto, supongo que está aquí porque dispare a su hijo.

Desde luego las decisiones la toman Tonowari y Ronal, que ahora está fuera de la cabaña.

-¡Tsireya! -ladra Tonowari y una na'vi del agua preciosa aparece delante de mí un segundo después.

-¿Si?

Su voz es dulce... No me gusta.

-Vas a enseñarle a Nira nuestras costumbres -ordena Tonowari y Tsireya asiente.

Obviamente no hacen esto porque si. Quieren estudiarme, saber como es su enemigo y utilizarme como una rata de laboratorio. Pero esto les costará la aldea entera.

Dejarme vivir no es un riesgo que ahora mismo puedan asumir.

[...]

Yo ya sé respirar, ¿porque tengo que aprender otra vez?

Neteyam está a mi lado, centrado en Tsireya, que le da instrucciones a su hermano sobre la respiración. Parece que Lo'ak siente algo por ella, y Tsireya tampoco está indiferente.

Aun no he conocido al hermano de Tsireya, que según ella está cazando con su madre.

-¿Cuando vas a decírselo? -le susurro a Neteyam en la oreja, señalando a Lo'ak con la cabeza.

Él frunce el ceño y disfruto de su intriga.

-¿Decirle el que?

-Que te gusta su novia -me burlo y él tensa la mandíbula.

Oh, no le gusta lo que oye. Sabe que es verdad.

Desde que Tsireya nos ha reunido a todos he podido ver como la miraba, y no es para menos, es hermosa. Pero teniendo en cuenta que a Lo'ak también le gusta me atrevería a decir que Neteyam está avergonzado de sus gustos.

-Cállate.

-¿No te gusta que te lo digan? -digo inocentemente.

Neteyam gira su cara hacia mi y nuestras miradas se conectan. Entrecierra los ojos en mi dirección y yo levanto una ceja en respuesta. Y, si, los Ayuura tenemos cejas.

-Cállate, princesa. No me hagas levantarme -advierte él muy cerca de mi cara.

-Ya has perdido una vez, no te hagas esto a ti mismo -contesto con burla.

Seguro que también se avergüenza de eso.

Neteyam gruñe, enseñando sus colmillos y eso llama la atención de los tortolitos.

-Hermano, basta -le dice Lo'ak a Neteyam.

Neteyam no contesta, solo gira la mirada al frente.

-Venga, hermano, ayúdala con eso de la respiración -murmura Lo'ak y casi le suplica con la mirada que lo deje estar.

-Por favor -añade Tsireya.

Y ahí es cuando Neteyam se gira hacia mi. Ambos lo hacen débil, él haría cualquier cosa por ellos.

-Bien.

Una mano de Neteyam cae sobre mi abdomen y la otra sobre mi espalda baja, provocando una sensación nueva en mi que me obligo a ignorar.

-Respira -ordena con voz ronca y yo obedezco -. Ahora expira lentamente por la boca.

Eso hago.

Él me mira y yo me obligo a decir algo para romper la tensión.

-Cuidado con donde tocas, a ver si te voy a dejar sin mano -me burlo de él.

Neteyam rueda los ojos pero luego baja la mirada a sus manos.

-Tengo mejores cosas que hacer -contesta en mi oído.

-Pues desde luego solo pareces un niño de papá. -Sonrío burlonamente.

Él ni siquiera se digna a contestar, se limita a soltar un par de maldiciones por mover el brazo.

-¿Tu ya sabes respirar? -le pregunto con el fin de dejar de aburrirme.

-Yo aprendo rápido.

Sin decir una palabra, lo aparto de mí y le digo;

-Y yo.

Chica de CenizasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora