NIRA
—¿Porque me cubriste ese día cuando le lancé el cuchillo a la niña? —pregunto estirada en la cama.
Nunca quise saber el porqué, pero parece que hoy estoy preguntona.
—Pensé que merecías una segunda oportunidad —murmura Neteyam con los ojos cerrados sin mirarme.
—Pero disparé a una niña.
—Y yo ya lo he olvidado, haz lo mismo —replica él por lo bajo.
Cierro los ojos pensando en sus palabras. Siempre he pensado que era una persona mala, sin capacidad para mejorar, pero a lo mejor me merezco algo más que torturas.
Abro los ojos, después de unos treinta minutos, y me encuentro la cara de Neteyam a centímetros de la mía.
—¿Pero que...?
—No puedo dormir —contesta antes de que pueda preguntarlo.
Está sentado al lado de mi cama mirándome fijamente sin expresión en su rostro.
—¿Y que quieres que haga? —pregunto sin comprender.
Neteyam suspira y pone su sonrisa más encantadora antes de preguntarme:
—¿Puedo dormir contigo?
¿Eh?
—¿Eh?
—¿De verdad vas a hacer que te lo repita, princesa? —pregunta él con fastidio.
—¿Si? —cuestiono sin saber muy bien que decir.
Él suspira pero abre la boca para hablar:
—¿Puedo dormir contigo?
No sé porque de repente su cara se ha vuelto más agradable a mis vista. Ahora puedo ver las lágrimas atrapadas en sus ojos y su alma pura, que está muy lejos de la mía.
—Está bien —acepto y diviso una sonrisa de niño pequeño en su cara.
Neteyam se coloca detrás de mí en cuanto le hago un hueco y su mano descansa pacíficamente en mi cintura mientras dobla sus piernas con las mías.
—Gracias —susurra en mi oído un segundo después de que haya cerrado los ojos.
—Más te vale darme algo a cambio —replico rodando los ojos.
No le veo la cara pero seguro que tiene una pequeña sonrisa divertida en su rostro.
—¿Y que quieres a cambio? —murmura rozando sus labios en mi cuello.
Pues no lo sé, ¿quizás un beso?
No digas tonterías Nira, tu no quieres eso.
—Que mañana me lleves fuera de esta cárcel —respondo yo.
Oigo un bufido en mi cuello pero mi mente se centra en como su brazo envuelve mi cintura más fuerte, apretujándome a él.
—Veremos.
Y cuando se ha dormido por fin puedo relajar mi cuerpo.
[...]
NETEYAM
Es imposible que hoy la lleve fuera de esta cárcel, y eso que tenia intención de hacerlo.
—¡Neteyam! —me llama mi padre mientras corre hacia mi.
La guerra que tanto esperábamos por haber secuestrado a la chica de cenizas ha llegado. Todos estaban preparados para este día, al parecer todos menos yo.
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Chica de Cenizas
عاطفيةNira y Neteyam no tenían porque conocerse pero a pesar de lo que estaba predestinado, lo hicieron. Sus clanes llevan años peleados y dos años en guerra, y Nira es la próxima líder de su clar, por lo tanto están obligados a odiarse. A Nira siempre l...