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Apenas se asomaba el sol en la habitación de Bandit y Chilli.

Los esposos se encontraban reconociendo la realidad que los rodeaba.

–¿Mamá? –La voz de su hija mayor los sorprendió. –¿Papá?

–Buenos días cariño. –Saludo su mamá. La verdad estaba preocupada. Bluey no era de las personas que madrugan.

–¿Sucede algo nena? ¿Hay algo que te moleste? –Su padre de igual manera se preocupó y más cuando vio unas pequeñas ojeras debajo de los ojos de su hija.

Definitivamente había algo preocupando a la primogénita que incluso no la dejo dormir.

Bluey se acercó a la cama de sus padres, y colocándose entre ellos. Abrazo sus piernas haciéndose bolita y bajo sus orejas.

–Oh cariño. ¿Qué paso? –A Bandit jamás le gustó ver a ninguna de sus hijas tristes.

–¿Cómo...? –Bluey hablo levemente. Tomo aire. –¿Cómo sabes que estás enamorado?

Ambos padres se tensaron. ¿Eso era?

–¿Por qué la pregunta hija? –Hablo Chilli. –¿Hay alguien que te guste?

Las orejas de la cachorra se levantaron y volvieron a bajar.

–No. –Dudó. –¿Si? –Ya no estaba segura ni de sus propios sentimientos. –No lo sé...

Bluey se envolvió en las cobijas.

–Oh, Bluey. ¿Qué sucede? –Bandit acaricio la espalda de su hija, transmitiendo consuelo y seguridad.

–Bingo dijo que Mackenzie y Jean Luc están enamorados de mí. Pero eso no es cierto. –La niña hablaba a través de las cobijas.

Bandit y Chilli intercambiaron miradas. Ellos habían notado la atmósfera extraña que rodeaban a los amigos de su hija mayor. Y si, paso por su mente la posibilidad de que ambos cachorros estuviesen interesados en Bluey, de otra manera que no fuera simplemente amistad.

–Y si dices que no es cierto, entonces ¿Por qué la preocupación? –Chilli intento sacar a Bluey de su cueva.

–Por qué no pueden. –Hablo la pequeña, que empezaba a quebrarse su voz. –Por qué no quiero elegir.

–¿Elegir? –Bandit ayudo a su esposa a sacar a la niña de las cobijas.

–No quiero herir los sentimientos de nadie. –Bluey a este punto estaba bañada en lágrimas. –Porque si alguno de los dos me confiesa sus sentimientos, eso significa que...

No pudo continuar, los sollozos de la pequeña podían más. Sus padres la abrazaron para calmar el llanto y la duda de su hija.

–No tienes que elegir si no quieres, cariño. –Bandit acaricio la cabeza de su hija. Meciéndola suavemente.
–Si mi niña, si no quieres corresponder no lo hagas. Ellos te quieren mucho. Respetarán tu decisión. –Chilli sobaba la espalda de la pequeña. Uniéndose al arrullo que inicio su esposo.

–¿Bluey, estás bien? –Era la voz de la hija menor. Que al ver el estado de su hermana se preocupó. Y fue rápidamente hacia la cama.

–Lo siento... –Dijo al abrazar a la mayor. –No quería que te sintieras mal, Bluey perdóname.

En la mente de la pequeña Bingo, esa situación era culpa suya. Si no hubiera dicho nada probablemente su hermana no estaría triste ahora.

Juntos (Bluey×Mackenzie×Jean Luc)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora