My destiny ~ Jenlisa

Capitulo 5

Cinco meses, ese era el tiempo exacto que había pasado desde que Jennie había conocido a Lisa, al inicio fue impactante pensar que su pareja destinada era una niña, pero Jennie no podía negar que era realmente adorable. Sin embargo, una parte de la castaña no estaba convencida de que hacía lo correcto al pasar mucho tiempo con Lisa, por lo que había tomado la decisión de hablar con el papá de la pelinegra para saber que era lo que él opinaba de la decisión.

Marco estuvo sorprendido al enterarse que la pareja destinada de su hija era mayor que ella, pero su sorpresa fue mayor al ver como la pequeña parecía no querer separarse de la adolescente. El omega sabía que Jennie no le haría nada malo a su hija, por lo que le tenía bastante confianza a la chica, la castaña solía cuidar muy bien a Lisa.

Varios alumnos de la escuela estaban sorprendidos de ver como la castaña parecía pasar mucho tiempo con una niña, incluso había veces en las que Lisa y Jisoo almorzaban con Jennie y sus amigos en la cafetería, mientras les cuentan que era lo que habían hecho durante el día.

Todo parecía ir bien, pero había un detalle que hizo que Jennie volviera a la realidad, hace unos días le había llegado una carta de admisión para la universidad, lo que implicaba que el año estaba por terminar y ella debería irse el siguiente año. La castaña no estaba segura en como debería decírselo a Lisa, ya que sabía que la noticia le afectaría, así que se encontraba nerviosa de su reacción, especialmente en esos momentos que estaba en la casa de la pequeña.

- ¿Me estás escuchando? - Jennie regreso su vista a la niña, que le mostraba el dibujo que había hecho esa tarde.

- Si, lo siento - la castaña dudo unos segundos antes de hacer que Lisa se sentara a su lado en el sillón - Lisa tengo que decirte algo importante - la niña columpio sus pies que no tocaban el piso y miraba atenta a la adolescente - ¿Sabes que estoy en mi ultimo año de instituto, verdad? - la pelinegra asintió confundida - Bueno, cuando termine tendré que ir a la universidad, ¿sabes que significa?

- Que ya no te podré ver en el recreo - Jennie asintió y se sintió mal al ver como la felicidad en el rostro de la niña se iba apagando - Pero nos veremos cuando terminen tus clases, ¿verdad? - la castaña trago un poco de saliva por el nudo que se formaba en su garganta.

- Lisa, cuando vaya a la universidad tendré que mudarme porque está un poco lejos de aquí - la niña pensó por unos segundos antes de sonreír.

- Creo que estoy entendiendo - Jennie miro confundida a la niña por la sonrisa - Quieres que me mude contigo - Jennie abrió los ojos sorprendida - Claro que iré, le tendré que decir a mi papá, pero el entenderá que tengo que estar con mi omega.

- Lisa, no puedo llevarte conmigo - la pelinegra miro directamente a Jennie y sintió como las lagrimas querían salir de sus ojos.

- Pero si no voy contigo no podremos vernos - la castaña abrazó a Lisa cuando la niña empezó a llorar.

- Lili, no llores, esto será bueno para las dos - la niña se aferro a la blusa de la adolescente.

- Tú solo quieres una excusa para desacerté de mi porque nunca haz querido que yo sea tu alfa - Jennie se alejo un poco de Lisa para que la niña la viera fijamente.

- Lisa eso no es cierto, yo te quiero mucho, pero tengo que irme por un tiempo - la castaña limpiaba las lagrimas de Lisa - Sé que aún eres muy pequeña y cuando termine la universidad seguirás siendo muy joven para mi, pero te prometo que cuando termines el instituto y seas mayor podrás buscarme y llevare a recorrer toda la ciudad en donde este - la niña la volvió a abrazar.

- ¿Lo prometes? - Jennie hizo un ruido para afirmar sus palabras - ¿Cuándo sea mayor me dejarás ser tu alfa? - la castaña no supo que responder en ese momento, no podía imaginarse a la pelinegra como alguien grande en esos momentos, pero tampoco quería hacerla sentir peor.

- Te prometo que cuando seas mayor serás la primera que tendrá una oportunidad conmigo - los ojos de Lisa se iluminaron y Jennie pudo confirmarlo cuando la niña se separo del abrazo y dejo un beso en su nariz feliz.

- Cuando sea mayor vas a enamorarte de mi Jennie - la castaña sonrió por el comentario de la niña y se encargo de disfrutar del resto de la tarde con la pequeña. 

Así fueron los siguientes meses que faltaron para que Jennie tuviera que marcharse, la castaña nunca olvidaría como su lobo sintió que debía correr de regreso cuando vio a Lisa despidiéndose de ella con lagrimas en los ojos y corriendo detrás de su auto para evitar que se fuera.

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¿Opiniones? Ya vendrá el salto en el tiempo.