My destiny ~ Jenlisa

Capitulo 9

El ambiente se estaba creando incomodo para las tres chicas, aunque todas parecían tener diferentes reacciones. Mientras Jennie estaba confundida por la presencia de la menor, Rosé parecía un poco asustada por eso, pero Lisa miraba con furia a la pequeña omega que estaba muy cerca de la castaña.

- ¿Lisa? ¿Qué haces aquí? - Lisa se giró para ver a Jennie, quien soltó rápidamente las manos de Rosé.

- Hice lo que me dijiste, vine a buscarte después de graduarme del instituto - Lisa seguía seria por la cercanía de las chicas.

- Hola, ¿Quién eres? - Rosé sentía como las feromonas del alfa se empezaban a sentir en el lugar.

- Soy Lisa, el alfa destinado de Jennie - la castaña abrió los ojos sorprendida por las palabras de la pelinegra, Rosé miró a Jennie intentando procesar la nueva información.

- ¿El alfa de Jennie? ¿Eres una omega? - la rubia se veía más sorprendida de lo que Lisa esperaba - No puede ser, lo siento tanto, no lo sabía y yo... - Rosé se detuvo cuando vio como una chica llegaba corriendo hacía ellas.

- ¡Lisa! ¡Tienes que probar esto es increíble! - Jisoo llegó hasta las chicas, la pelinegra no entendía el porque del ambiente tan incomodo - Oh... Veo que encontraste a Jennie - la castaña se giró para ver a aquella niña que conoció hace muchos años. Jisoo se giró y cruzó miradas con Rosé quien parecía no formular palabras desde que la pelinegra había llegado - Hola, creo que no nos han presentado soy Jisoo - la pelinegra extendió su mano.

- Soy Rosé - la rubia tenía una sonrisa en su rostro, mientras sentía como su corazón se aceleraba. Lisa miraba confundida las miradas que intercambiaban su amiga con aquella rubia.

- Chu, ¿por qué no compras algo de pollo?

- Pero no he terminado con esto aún... - la pelinegra quedó en silencio cuando vio como Lisa le lanzaba su cubeta de pollo al piso - Eres el diablo Lisa - Jisoo suspiro frustrada.

- Rosé, ¿por qué no acompañas a Chu por su pollo? - la rubia sonrió por aquella propuesta, en cambio Jisoo miro detenidamente a su amiga.

- ¿Qué planeas Manoban? - el susurró de la pelinegra solo fue audible para la menor, que tenía una sonrisa en su rostro - Bueno Rosie, ¿vienes conmi... - la rubia no espero que la pelinegra terminara su pregunta cuando ya la había tomado del brazo y arrastrado hacia la esquina de la calle.

- Bueno, ahora que estamos solas... Hola Jennie - Lisa le sonrió a la castaña, quien no había dicho nada desde que había visto a la chica.

- Wow, haz crecido demasiado desde la ultima vez que te vi - la menor sonrió al ver como Jennie no dejaba de mirarla.

- Ya no tengo cinco años Jennie - la castaña asintió.

- Si, se nota - Lisa sonrió cuando un sonrojo apareció en las mejillas de la omega.

- ¿Qué es lo que estaba pasando contigo y Rosé? - Jennie frunció el ceño.

- Ahora que mencionas el tema, no puedes ir diciéndole a todo el mundo que eres mi alfa - la pelinegra frunció el ceño.

- Pero es verdad - Lisa hizo un puchero y Jennie no pudo evitar reírse.

- No puedo creer que hayas hecho eso.

- Vamos, eso te encantaba - la castaña parecía estarse divirtiendo con esa conversación.

- Si, cuando tenias cinco Lisa.

- Bien, lo siento, pero no puedes molestarte vine hasta aquí por ti - Jennie entrecerró los ojos.

- Tengo que admitir que estoy un poco sorprendida de verte.

- No podría perder mi oportunidad de cortejarte - Jennie trago en seco por las palabras del alfa.

- ¿De qué hablas?

- No me digas que no lo recuerdas, hace varios años me prometiste que cuando creciera podría tener una oportunidad contigo - Jennie se sintió mal al ver como la menor tenía una mirada desilusionada.

- ¿Cuántos años tienes ahora Lisa?

- Dieciocho.

- Bueno, al menos ahora eres legal - la pelinegra asintió y se acercó para pasar su brazo por encima de los hombros de la castaña.

- ¿Por qué no cumples con otra de tus palabras y me llevas a recorrer la ciudad? - Jennie se golpeo mentalmente por aquello.

- Bien Lisa, es claro que tenemos muchas cosas de que hablar y te prometo que lo haremos mañana, pero ahora debes descansar debe haber sido un largo viaje. Además, no puedo llevarte a recorrer la ciudad a esta hora - Lisa asintió.

- Bueno, tenemos mucho tiempo para poder conocer la ciudad, ¿por qué no empezamos por conocernos nosotras? - Jennie sonrió y camino hacia una de las maletas que estaban cerca.

- Vamos, te llevare a mi departamento - Lisa sonrió y tomo la otra maleta antes de seguir a la castaña.

Rosé se rio al escuchar alguna de las cosas que Jisoo le contaba, la rubia realmente parecía emocionada al estar cerca de la pelinegra. Ambas llegaron dónde habían dejado a sus amigas, pero el lugar no tenía rastro de ninguna de las dos.

- ¿Dónde están? Se supone que me quedaría con ellas - Rosé sonrió al escuchar aquellas palabras de la pelinegra.

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