My destiny ~ Jenlisa

Capitulo 10

A la mañana siguiente Lisa sonría al mirar a Jennie, la castaña le había dejado dormir con ella y en serio se lo agradecía. La menor no sabía como había podido pasar tantos años sin estar cerca de la omega. Cuando Jennie despertó se froto los ojos para acostumbrar su vista y se sorprendió al ver como Lisa a su lado.

- Hola pequeña - la castaña frunció el ceño con una sonrisa al escuchar ese apodo.

- Es raro, antes yo solía llamarte así, pero ahora eres más alta que yo - Lisa acarició la mejilla de la omega y vio como Jennie cerraba los ojos por el contacto.

- Por favor dime que me dejarás hacerlo - la castaña se sentó y Lisa imito su acción.

- ¿Qué cosa?

- Déjame cortejarte Jennie - la omega miro a Lisa y suspiro pesadamente antes de pasar una mano por su cabello.

- No lo sé Lisa, aún eres joven, te faltan muchas cosas por vivir y... - la pelinegra sujeto el rostro de Jennie para que la mirara fijamente.

- Mi lobo te ama Jennie y lo ha hecho desde el primer momento en que te vi, no quiero tener que esperar más tiempo para poder estar contigo, estoy segura de lo que siento y... - la castaña tomo las mejillas de la menor y le dio un rápido beso en los labios.

- Esta bien Lisa, hagámoslo - la pelinegra sonrió al escuchar las palabras de Jennie y se lanzó contra ella para poder abrazarla, quedando encima de la omega. Lisa dudo unos segundos antes de volver a dejar un beso en los labios de la mayor.

- Eso será interesante - Jennie se rio por la emoción de la alfa.

- Aún tenemos que aclarar muchas cosas si vamos a hacer esto en serio Lisa, pero ¿te parece si lo hacemos mientras desayunamos? - la pelinegra sonrió y dejó un beso en la nariz de la castaña. El timbre del departamento hizo que ambas chicas se miraran confundidas, pero se levantaron.

- ¿Esperas a alguien? - la omega hizo un sonido de negación ante la pregunta.

Jennie llegó hasta la puerta y la abrio para encontrarse a Rosé que tenía una sonrisa en el rostro, mientras detrás de ella caminaba Jisoo, quien se acercó hasta la puerta.

- Hola Jennie, que gusto verte - la pelinegra entro al lugar sin dejar que la castaña les diera permiso - aquí estás Manoban - la alfa miraba molesta a su amiga, que parecía sorprendida de verla. Jennie miró a Rosé pidiendo una explicación, pero la rubia solo se encogió de hombros.

- Hola Chu - Lisa trago un poco de saliva al ver lo molesta que se encontraba Jisoo, eso era algo que sin duda no solía verse regularmente considerando que la chica solía estar relajada y era la primera que seguía cada una de sus locuras.

- Tú y yo vamos a tener una larga conversación más tarde y más te vale no volver a olvidarte de mi - Lisa asintió sin decir nada más cuando vio como su amiga se giró con una sonrisa hacia las dos mujeres que las miraban a unos metros de distancia - ¿No tienen hambre? Yo invito el desayuno - Rosé y Jennie parecían confundidas, pero terminaron aceptando la invitación de la chica.

Las cuatro chicas se sentaron en en una mesa cerca a la ventana. Jisoo miraba las sonrisas que se dedicaron Lisa y Jennie desde que habían salido del departamento, asimismo, la pelinegra era consiente de las miradas que la rubia le daba desde que se habían conocido.

- ¿Rosie como se conocieron con Jen? - la rubia se veía un poco emocionada de tener la mirada de la joven sobre ella.

- Nos conocimos en la universidad, estábamos en la misma carrera y un día fui a su habitación...

- ¿Para qué fuiste a su habitación? - Jennie giró los ojos por los celos de Lisa.

- Si, ¿para qué fuiste a su habitación? - Lisa alzó una ceja al escuchar el tono de voz de su amiga, quien tocio para aclarar su garganta - Lo siento, no quería que sonará así... - la castaña frunció el ceño al ver como Jisoo se sonrojaba, era la primera vez que era la pelinegra que reaccionaba de esa manera en vez que su amiga.

- Y chicas... ¿Qué harán ahora que terminaron el instituto? - Lisa le dio una sonrisa a la castaña.

- Hemos venido esta semana para conocer la ciudad y regresaremos a nuestras casas para preparar algunas cosas antes de la universidad, nos mudaremos aquí en un par de meses.

- Espera, ¿universidad? ¿Cuántos años tienes? - Rosé miro a Jisoo con algo sorprendida.

- Cumpliré diecinueve en unos meses - la rubia asintió por la respuesta de la pelinegra, que intentaba no reírse por su expresión - Tranquila, hare que te olvides de mi edad - Jisoo le susurró en el oído causando que la rubia se sonrojara.

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