Parte 27

81 7 0
                                    

Al día siguiente, sábado, me levanto temprano, miro el móvil y son las 6:30 de la mañana. Me ducho el cuerpo, me visto y voy a la cocina a dejar la ropa sucia. Regreso al salón, me siento en el sofá y miro la hora, las 7:10. Suspiro triste ya que hoy voy al aeropuerto a despedirme de Daniel y sus hermanos, les voy a echar mucho de menos, sobre todo extrañaré a Alex.

Me levanto del sofá, agarro mi bolso, meto el móvil junto mis auriculares, agarro mis llaves y me voy cerrando con ellas y bajo las escaleras.

Camino hasta la parada de tren, espero a que llegue. 10 minutos después, llega el tren y me subo, me siento y me pongo la música. Pasado media hora, llegó a la parada del aeropuerto, me levanto del asiento y me bajo del tren. Subo las escaleras sin ganas y al llegar bien al aeropuerto camino hasta la zona en la que deberían estar ellos. Cuando casi llego, veo de lejos a la familia de Daniel y sus hermanos. Veo que Alex se gira y me ve, corro a donde ellos y de repente todos se giran.

—__! — se sorprende Daniel.

Suspiro cansada y me pongo muy recta mirando a todos triste y me salen lágrimas.

—__ tranquila, volveremos en un mes, no te preocupes, okay? — me tranquiliza Chapi.

Me lanzo a Chapi abrazándole y ella igual me abraza. Lo mismo hago con Daniel y el igual me abraza. Me acerco a su familia y nos ponemos a hablar durante un rato. De repente ya comienzan a entrar varios al avión.

—Bueno, vamos familia — dice la madre.
—A-ahora voy, no tardo — dice Alex.
—Bueno, pero no te tardes — dice la madre.
—Fine.

La familia va entrando al avión y Alex me mira triste, yo igual le miro triste llorando, me lanzo a él abrazándole fuerte, y él igual me abraza fuerte.

—I'm gonna miss you Alex... — digo triste mientras nos seguimos abrazando.
—Me too __... — dejamos de abrazarnos y nos miramos — cuando regresemos te aviso, okay? — pone su mano en mi hombro.
—Okay, i'm gonna waiting — sonrío y me limpio las lágrimas.

Avisan que el avión ya mismo despegará, Alex y yo nos miramos y nos abrazamos de nuevo rápidamente. Nos separamos y Alex se aleja mirándome y ya se va completamente. Me giro para irme, bajo las escaleras y camino a la parada de tren miro hacia el cielo escuchando un avión y veo el avión que se han subido. Continúo caminando y me subo al tren cuando llega.

Cuando llego a mi casa me siento en el sofá y dejo el bolso encima de él. Suspiro tristemente y me tumbo mirando al techo pensando, cierro los ojos y me quedo dormida.

Cuando me despierto, abro los ojos con lágrimas, miro el reloj y veo que son las 15:16 de la tarde. Me levanto sin fuerzas en el cuerpo y me quedo sentada en el sofá, me seco las lágrimas y me echo para atrás y me pongo con el móvil, no voy ni a comer.

Al rato, me levanto, agarro de nuevo el bolso que tiene dentro mis llaves, las agarro, agarro mi móvil igual junto a mis auriculares y me los guardo en el bolsillo. Salgo de mi casa cerrando como hago siempre y me dirigí al centro, al callejón para ser más exactos. 20 minutos después llego al callejón y me voy al fondo del todo y me siento, me pongo mis auriculares y la música a todo volumen y me apoyo en la pared tranquilamente.

Al rato noto que alguien me está mirando, abro los ojos para ver quién es y veo a Leo, me levanto rápidamente asustada y él se acerca a mí.

—Que quieres estúpido? — digo seriamente.
—Ya me enteré que tu novio y su familia se fue del país — dice medio riendo.
—Solo por un mes, además, él no es mi novio, asi que cállate — digo cruzando los brazos.
—No te hagas la tonta, os vi.
—A que te refieres? — pregunto enfadada.
—Os vi como os besabais. A mí no me engañas.
—Agh ya cállate — aparto la mirada enfadada.
—Es tu novio, no digas que no. Porque ya os vi, no vale la pena mentirme.
—BUENO SÍ! — grito ya harta — LO SOMOS, CONTENTO? Pero lo dejamos hasta que vuelvan por nuestra seguridad.
—Entonces ya no sois novios? — dice sonriendo.
—Eres tonto no? Dije que no lo somos, y no te creas que volveré contigo porque ni en broma lo hago.
—Ooh vamos — ríe — sé que aún me amas — se acerca más a mí.
—Eh eh! Espacio personal, aléjate de mí.
—Cállate y bésame — se acerca para darme un beso.

Cuando se acerca le doy un tortazo en toda su cara y cae al suelo, lo miro con odio.

—PERO ERES TONTO O QUÉ? Contigo no vuelvo ni aunque me paguen millones.
—No me golpees idiota! — se levanta y se acerca a mí — vuelve a golpearme y te vas a enterar.
—Y que me harás? — digo cruzando los brazos medio riendo.

Leo levanta su mano y me pega un tortazo, caigo al suelo, me pongo la mano en donde me golpeó y le miro.

—No te creas que no soy capaz de hacer lo que sea! Ya no está tu novio y no me da miedo golpearte las veces que a mí me de la gana — me mira muy enfadado.
—Que te da miedo Alex? — río.
—No te rías estúpida! — grita enfadado.

Leo me da una patada en mi pierna dejándome un moratón grande y que se nota mucho, me salen lágrimas.

—No entiendo porqué lloras!
—Pues yo no entiendo porqué quieres que vuelva contigo y encima me pegas! Así menos querré estar contigo, que ya en sí paso de tí.

Leo se pone de rodillas y me mira fijamente poniendo cara de preocupación.

—En serio que no lo entiendes? Te pego porque te amo y tú no quieres estar conmigo.

Le miro confundida y cambio mi expresión a una de enfado.

—Como me vas a amar con lo que me estás haciendo!? Para empezar tú me engañaste en toda mi cara y me lo dejaste bien claro. Segundo, que tú me pegues para que vuelva contigo no es amor, es obsesión, y eso no es bueno. Yo ya paso de tí, debes superarlo ya Leo, porque lo único que haces es hacerme daño, no me demuestras nada de amor, encima una vez querías convencerme de que hicieramos algo que yo no quería y yo te decía que no todo el rato y hasta te enfadabas. En serio crees que eso es amor?

Leo se queda callado sin palabras, se levanta y se va sin decir nada. Suspiro algo asustada y triste, me levanto y me voy cojeando un poco.

Al llegar a mi casa me siento en el sofá, miro mi moratón en la pierna que es bien grande, está muy negro, morado y algo amarillo, suspiro y me tumbo de nuevo en el sofá, cierro los ojos y me quedo dormida de nuevo.

                         -Continuará-

Una amistad complicada Donde viven las historias. Descúbrelo ahora