Durante el resto de la mañana me quedo en el sofá sentada, pensando una y otra vez en lo que pasó hoy. Si no hubiese habido ningún profesor ni nada, hubiese sido capaz de partirle la cara literalmente a mi ex, por tonto. Espero que con esa lección que le di, aprenda a no meterse conmigo, ni Alex, ni nadie.
Miro mi móvil y veo la hora, son las 14:47. Me levanto, agarro mis llaves y me voy cerrando con ellas. Iré al instituto para ver a los demás, sin acercarme mucho. Si mi ex se pone chulito de nuevo, no dudaré en partirle la cara aunque tenga la mano vendada.
Al llegar, miro el móvil, las 14:55. Ya mismo saldrán todos, me quedo esperando en la barandilla que da la vista al patio. Suspiro y me pongo con el móvil por mientras.
Suena el timbre, veo a todos salir. Guardo el móvil y me quedo mirando, a los segundos se me acercan rápidamente Daniel y Chapi, preocupados.
—¡__! — grita Daniel.
—Hola chicos...
—¿Que te pasó en la mano? — pregunta Chapi.
—Nada, un pequeño accidente, pero no es para tanto.
—Bueno, nos iremos ya. Si necesitas algo, nos avisas — dice Daniel.
—Está bien, adiós.Ellos se alejan y yo me quedo aún, me apoyo la cabeza en la barandilla y cierro los ojos. De repente, escucho que alguien me llama, miro a mi izquierda y veo a Alex.
—¿Qué quieres Alex? — digo muy seriamente.
—Look, i'm sorry.
—¡Es que no consigo llegar a entender Alex! ¿Por qué...? — me entristezco.
—I told you, for our safety, YOUR safety.
—¡Y porque eres una horrible persona también! — dice otra voz.Miramos a donde venía esa voz y volvemos a ver a Leo, frunzo el ceño y él se acerca a nosotros, riéndose.
—¿Que haces aquí? — digo entre dientes muy enfadada.
—No te importa, cállate.
—Don't talk to her like this — se enfada Alex.
—Tú cállate emo idiota, que me alegro que hayáis cortado porque hacíais una pareja horrible.
—¡NO LE HABLES ASÍ A ALEX, IDIOTA!Me lanzo de nuevo a mi ex, volviendo a golpearle con mi mano vendada. Vuelvo a dejarle varios moratones, en su cara. Alex rápidamente me aparta de él.
—¡Tranquila __!
Leo se levanta con expresión de miedo, casi apunto de llorar. Le he dejado un ojo bien morado, la mejilla derecha muy roja y le sangra la boca un poco.
—¡Eso, así te quería ver! ¡Para que sientas como me sentí cada vez que tú me hacías lo mismo! — grito bien enfadada.
—¡Ya basta __! — grita Alex algo harto y me giro a verle — tienes que parar. No te entiendo, ¿que pasó con la niña que antes eras?
—Esa niña desapareció, desde que decidiste dejarme.Le meto un pequeño codazo a Alex para que me suelte, creo que le di fuerte porque se quejó. Me voy corriendo sin mirar atrás, hacia mi casa.
Al llegar a mi casa, me siento en el sofá echándome para atrás en él. Miro mi mano, me quito un poco del vendaje y veo mi mano morada por los golpes. Vuelvo a ponerme el vendaje y suspiro algo cansada. Mejor si duermo un poco, estoy cansada por lo de hoy.
Dos horas después.
Me despierto con mucho dolor en la mano, no puedo moverla directamente. Agarro mi móvil y veo que tengo varias notificaciones de Alex, ruedo los ojos y deslizó las notificaciones. Vuelvo a dejar el móvil a un lado y suspiro, me levanto del sofá y voy al baño, me quito la venda y la dejo a un lado. Abro un cajón y me echo una crema en la mano, me vuelvo a poner la venda y vuelvo al salón.
Continuará.
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Una amistad complicada
De TodoAntes que nada, quiero avisar que aquí cambiaré un poco la personalidad de Alex.