07。

4K 204 9
                                    

SITUACIÓN: Sanji & Zoro mirando a su capitán y a ti (NSFW)

(AVISO): Los diálogos de Sanji serán escritos en cursiva y los de Zoro en negrita. En el tumblr traducido se basaban en colores, y es difícil darles a entender quien es quien sin especificar esto. Luego, las conversaciones entre Luffy y Yu se dan a entender, por lo que irán con letra normal. También revisar que sean diálogos, obviamente tienen que iniciar con el — para que sea algo dicho por ellos.

 También revisar que sean diálogos, obviamente tienen que iniciar con el — para que sea algo dicho por ellos

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Era de no creeer.

Mírala.

Demonios.

Quien hubiese pensado que un chico como Luffy supiera que hacer con una chica como tú.
Quien hubiese pensado que un chico como Luffy podría hacer que una chica como tú sepa hacer sacar otro lado de ti misma en la cama.

Es realmente una perra, eh.

— Mierda. – Gimió Luffy, tan adicto a tu gusto y borracho en tu vagina que ni siquiera se dio cuenta que ya te habías corrido.

— Mierda... No es justo... Ella se corrió dos veces en su lengua, joder... Yo podría–

Como si fueses capaz de comerle el coño sin sangrar.

Calla tu maldita–

— Ah! Lu!~ No!... No más, por favor!

Luffy levantó tu pelvis de la cama, los dos hombres de fuera abrieron los ojos en shock, los brazos cruzados de zoro cayeron a sus lados y el cigarrillo de Sanji al suelo. No podían creer la vista ante ellos de lo que su capitán podría llegar a hacer.

Luffy te estaba arruinando.

Los dos querrían estar molesto, la chica que les gusta estaba con su capitan, abrazándote, riéndose, besándose.

Siendo una perra para el capitan y no para ellos.

— Mierda... – Sanji escapó palmeando su polla con vergüenza, Zoro lo vio y lo miro con disgusto burlándose.

¿Disfrutando el show? Pedazo de mier

Que te jodan, ese de ahí debería ser yo.

Si, bueno, no es como si fueses a durar mucho con una chica como él

— O~oh! Luffy! – Tu voz sonaba suave como la mantequilla mientras gemías su nombre, tus tobilleras se envolvieron entre sí como si quisieras mantener a tu hombre en ti durante un momento más largo para salir de otro orgasmo.

El lamento y las discusiones de los dos hombres se detuvieron al escuchar el estruendo de su cama. Se acercaron para verte mejor. Tus brazos y piernas enredadas alrededor del cuerpo bronceado de tu novio. Se sentía que en ese momento no podías estar más cerca de Luffy. Su lengua presionada y arremolinada en tu boca, sentiste que su saliva y tus liquidos se mezclaban. Ninguno de los dos nunca se contenían cuando se trataba de besarse.

Luffy tenía una mano debajo de tu muslo, levantando apenas tu pelvis de la cama mientras metía y saca su polla de tu coño que parecía apretar más fuerte que la primera vez cada momento que te empujaba.

Jurabas que su polla era más grande que la ultima vez, apretándote tan dolorosamente bien. Luffy movió su otra mano para agarrar y apretarte tus senos, casi jugando con ellos un poco mientras tiraba de tus pezones.

Lo hacía rápido,  aunque se detenía dejándote lloriqueando por robarte el orgasmo cercano al que estabas llegando.

Su cuerpo flotaba sobre el tuyo como si fuera un eclipse, la luz trasera de la lámpara que te hizo dejar prendida estaba detrás de él, pero no te impidieron ver cada músculo que tenía, las gotas de sudor transparentes que caen de su pecho a medida que se levanta y baja ligeramente de todo el trabajo que te puso. Te intimidó por un momento. Sus ojos no son completamente visibles ni su sonrisa. Ves sus ojos casi cerrados, su pelo ahora volviendo a sus ligeros rizos que te encantaba ver cuando sudaba tanto.

— Móntame. – Fue todo lo que Luffy dijo con su voz áspera antes de sostener tus caderas mientras te posicionaba encima de él. Te deslizaste sobre él compartiendo un jadeo mientras te mantenía cerca mientras te apoyaba en la cabeza temblorosa.

Tenía algo que demostrar para su público.

No tenias suficiente y Sanji y Zoro lo vieron. Fue tan atractivo verte así, joder. Si ellos supieran que una chica dulce como tú podría montar una polla como una estrella porno.

¿Crees que ella nos dejaría unirnos? – Zoro preguntó casualmente con una débil sonrisa mientras seguía mirandote. Tu culo golpeando sus caderas mientras te inclinas para acostarte sobre tu capitán y besarlo para que pueda disfrutar plenamente del espectáculo.

— El simple hecho de que pienses que nos dejaría me hace tener ganas de golpearte, cabeza de mierda.

— ¡Joder, si!

Zoro miró fijamente tu cuerpo, la forma en que sabías cómo parar y mover tu suave cuerpo en la polla de Luffy como una profesional era fascinante para él, es como si tu cuerpo estuviera en piloto automático por la forma en que movías tu cuerpo para obtener los sonidos correctos de Luffy. Zoro nunca admitiría lo mucho que lo has excitado.

Sin embargo, Sanji se estaba volviendo loco. Él te necesitaba. Necesitaba cambiar de lugar con Luffy ahora mismo. Tus gemidos, tu cabeza hacia atrás, la forma en que llamas el nombre de Luffy, ¡maldita sea, ese debería ser él, no ese payaso de 19 años! Siempre te encontró atractiva y que le dieras a Sanji un espectáculo gratis fue una puta broma para él, el bulto en sus pantalones se hizo vergonzosamente duro.

¿Cómo podrían no haber sabido que eras tan ruidosa y llorona cuando te estaban follando? Habrían empezado a verlos a los dos antes.

¿Así que esto es lo que aprendió Luffy en Dressrosa?

Definitivamente lo hizo. Pequeño pervertido

— ¿Por qué demonios lo dejaste ver todo eso?

No lo hice, solo lo encontré allí, imbecil...

— Joder! Yo... Yon...

Cada fibra de Zoro quería abrir la puerta, y Sanji noto como su mano agarraba el pomo de la puerta, deseando que realmente la abriese.

Luffy, por otro lado, no le habría importado si hubieran entrado, no le habría importado si hubieran estado mirando, no le habría importado si se ofrecieran a turnarse. Pero tal vez no todavía, porque ver el aspecto de sus caras mientras vas a limpiar el lío que hiciste en su polla con tu boca no tiene precio.

Pero.

— Yon... –  Luffy gimió sosteniéndose con los codos, dándote una sonrisa débil mientras lentamente mueves tu cabeza sobre su polla. — ¿Te importa si la próxima vez... Sanji o Zoro estuvieran aquí con nosotros?

No le importaría compartirte con los hombres que son sus manos derecha e izquierda.

one piece | one shotsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora