•Scaramouche Raiden• | Kazuscara |

XII

Se sentó en la cama y se quedó mirando al suelo durante un rato para pensar en lo que estaba pasando.

A pesar de haberse esforzado todo lo que pudo para llegar a tiempo, ya no podía hacer absolutamente nada para ayudar en aquella terrible situación.

Kazuha había sido secuestrado por el Abismo, aunque hubiera intentado evitarlo junto con más gente. De tan solo pensar en ello, se le revolvía el estómago y le daban ganas de llorar.

Estaba tan asustado que tuvo que sacar un polo de su bolsillo y empezar a lamerlo para controlar su positividad congénita, la cual le hacía pasarlo mal en situaciones de estrés.

Scaramouche lo había mandado junto con Xingqiu para que lo ayudaran a vigilar a Kazuha en esa fiesta. Como el mayor supuso, los miembros del Abismo aprovecharían esa oportunidad para hacer lo que estuvieran planeando. Y así fue cómo habló con Shogun para que buscara a algún conocido que le pudiera ayudar.

Sin embargo, por mucho que aquellos dos chicos de primero estuvieran inflitrados en la fiesta en secreto, no sirvió de mucho haberlos traído.

El pobre chico de pelo de color azul celeste estaba aterrorizado de explicarle a Scaramouche lo que pasó. Sabía que se iba a enfadar por no haber podido hacer nada o se iba a frustrar demasiado y querría romper todo.

Después de calmarse un poco, decidió levantarse de la cama y acercarse a la puerta aunque le temblaban las piernas. Al poner la mano en el pomo de la puerta e intentar girarlo, se dio cuenta de que no se abría por mucho que quisiera.

Chongyun empezó a ponerse cada vez más nervioso e incluso tenía ganas de llorar, sobre todo porque tenía miedo a los espacios cerrados y no había nadie que lo pudiera ayudar.

Tras pensar qué hacer, se asomó por la ventana y comprobó la altura que había. Tenía claro que no podía saltar desde ahí, pero era posible que hubiera algún objeto útil dentro de esa habitación.

Buscó un rato entre los muebles, pero no encontró absolutamente nada. Aún así, ¿por qué alguien iba a tener una cuerda en su habitación? Justo después de hacerse esa pregunta, fue cuando encontró una cuerda de verdad, la ató a una de las patas de la cama y salió por la ventana, quedándose en el jardín trasero.

Después de haber pasado veinte minutos buscando a Scaramouche por toda la mansión y haberlo llamado más de diez veces, lo encontró en un rincón de la cocina mientras este parecía estar concentrado en sus cosas. Sin embargo, cuando pudo acercarse más, se dio cuenta de que estaba herido.

Xingqiu intentaba taparle la herida del abdomen con un trapo de cocina mientras este hacía todo su esfuerzo para no desmayarse. No había perdido demasiada sangre, pero el dolor que sentía era indescriptible. Después de todo, muy poca gente está acostumbrada a que le rajen el abdomen con un cuchillo.

—¿¡Qué ha pasado!?— preguntó Chongyun, después de llegar corriendo— ¡¿Quién le ha hecho eso?!

—¡Sshh!— Xingqiu le tapó la boca con la mano antes de que siguiera hablando— Baja la voz y cierra la puerta, no queremos que nos oiga nadie.

—¡V-voy!— tras sonrojarse por la cercanía de los actos de su amigo, Chongyun obedeció y volvió a acercarse a donde estaban— ¿Qué ha pasado aquí?

—No sé muy bien cómo explicarlo, ha pasado todo tan rápido...— dijo Xingqiu— Digamos que Albedo ha venido a hablarle, se han empezado a pelear por algunas cosas que ha dicho sobre Kazuha y cuando Scaramouche ha sacado una navaja, el muy hijo de puta de Albedo le ha tirado un cuchillo de cocina y se ha ido. Pero...dice que no volveremos a ver a Kazuha nunca más.