Ya es sábado por la noche y Luke se dirige otra vez al bar.
Podría haber ido a la fiesta de Mackenzie con sus amigos pero ya le había prometido al pelirrojo que iría a verlo. Además, sinceramente prefería pasar aquella noche con el menor.
Había despedido a su madre con un beso luego de que lo dejara en la puerta de la casa de Mackenzie.
Ya habían hablado y pasado un gran rato juntos que a su madre le sorprendió un poco al principio.
Su madre ya sabía que seguramente no volvería hasta la madrugada.
En su chaqueta llevaba un sobre. Era una sorpresa para su gatito.
Caminó hasta la entrada y se detuvo a apreciar la fachada.
De noche era mucho más intrigante que de día, y más esta vez porque una larga fila de adolescentes (mayores que él), daba la vuelta a toda la cuadra.
Los miró y notó que todos llevaban ropa corta, maquillaje en exceso y una euforia que se sentía a varios metros.
¿Qué el bar no era para personas... Mucho más mayores?
Aún así se acercó a la puerta y vió como un chico trataba de convencer al guardia que estaba parado la entrada.
Se quedó quieto mirando la escena y entonces el guardia notó que estaba allí.
Se reconocieron mutuamente al instante.
«Calvin»
-Niño, veo que has vuelto. Ven, pasa.
Y le abrió la puerta cosa que le extrañó totalmente, aún así le agradeció un bajito al mayor que logró escucharlo.
Antes de ingresar totalmente y que se perdieran los ruidos externos por la alta música, pudo escuchar como el chico que estaba en la fila se quejaba.
Cruzó la entrada del lugar y apenas puso un pie en el interior, unos labios lo atacaron sin dejarle tiempo de reaccionar.
Se sorprendió pero al reconocer aquellos labios se dejó llevar.
Estos sabían a fresas, debido a un brillo labial.
Se besaron con ganas. El menor pasó sus brazos por los hombros del mayor y este posó sus manos en la mitad de la espalda del pelirrojo para acercarlo más a su cuerpo.
Cuando se separaron, notó que el color de los ojos verdes se perdía con las luces.
-Gatito...
-Hola, Lu.
Ambos se miraron complices.
Entonces la música subió y más gritos se escucharon.
Luke dió una pequeña vista al lugar.
Michael lo notó y entonces le dijo:
-A veces Josh hace algunas fiestas para personas más jóvenes.
Luke asintió.
-Ven.
Caminaron hasta la barra donde el bartender le dió a Luke una cerveza y luego miró a Mike con cara de advertencia. Este solo resopló y lo ignoró.
Luke bebía en silencio mientras el menor le contaba que una o dos veces al mes hacían una gran fiesta para jóvenes y estas solían llenarse.
Para cuando terminó la bebida Michael parecía ansioso.
El pelirrojo se acercó a su oído y le dijo;
-Vamos a bailar un rato, Lukey.
Eso incentivó al rubio a seguirlo.
Se metieron en medio de la pista de baile.
La música estaba realmente alta pero era mejor así.
Michael se dió vuelta y se pegó al cuerpo de Luke.
El ojiazul se reía del menor.
Entonces lo giró y tomó sus manos para girar juntos mientras se reían, para ese momento Michael se rindió con su plan de seducir el rubio.
Se estaban divirtiendo mucho.
Saltaban y cantaban algunas canciones que conocían.
Estaban realmente pegados porque la gente a su alrededor los empujaba.
Entonces una chica empujó a Luke sin querer y este se chocó con el pelirrojo.
Quedaron más cerca que antes si era posible y se miraron a los ojos.
Unos segundos de choque entre el verde y el azul que se miraban con verdadera lujuria.
-Vamos a un lugar más tranquilo, Luke.
Este asintió y se dejó llevar por el menor que tiraba de su muñeca.
Estaba seguro de que el pelirrojo movía sus caderas a propósito mientras caminaba delante suyo.
Esta vez los guió hacia otro lugar. Uno que no conocía ni había visto antes.
El menor abrió una puerta y lo invitó a pasar para luego cerrarla.
Mike prendió las luces de aquella habitación.
Luces tenues y amarillas que hacían al lugar parecer realmente tranquilo.
Una cama con una manta de terciopelo rojo encima.
Encima de ella, colgada de la pared, otra tira de terciopelo que terminaba en el techo.
No está muy seguro, pero seguramente es para dar una sensación de intimidad.
(Empezaba a creer que eran amantes del terciopelo en este lugar)
Unas mesitas de luz a cada lado y encima un bol con...
Luke miró detenidamente el bol mientras el menor daba vueltas por el cuarto haciendo quien sabe que.
«¿Preservativos?»
Aún así no tuvo mucho tiempo para pensar en ello porque el menor lo empujó a la cama.
Luke rápidamente lo miró mientras este se quitaba las zapatillas.
-Oye, quítatelas, a Josh no le gustan las marcas de zapatos en las sábanas.
El ojiazul aún sin entender mucho, se quitó las zapatillas y las dejó a un lado de la cama.
Acomodó la almohada y sentó contra el respaldo.
El menor pronto se subió a la cama y se posicionó otra vez en las piernas del rubio, con las suyas a cada lado.
Se acercó a los labios del mayor y los besó suavemente.
Luke estaba totalmente perdido, pero aún así correspondió el beso.
Pronto sus manos viajaron a la cintura del menor y este posicionó las suyas en el pecho del rubio.
El pelirrojo se tiró hacia delante y la espalda de Luke chocó contra la madera del respaldo.
No les importó. Se siguieron besando.
Michael abrió la boca y dejó que Luke metiera su lengua en ella.
Dentro de sus bocas, una gran batalla se disponía por ver quién dominaba el beso.
Se separaron por aire unos segundos donde el rubio apoyó su rostro en el pecho de Mike y lo abrazó.
El ojiverde le hizo unos pequeños mimitos en el cabello.
-Me gustas, Bad Kitten. Mucho.
ESTÁS LEYENDO
Bad Kitten//Muke ✓
Fanfiction𝐌𝐮𝐤𝐞|| ❝Bad Kitten no era para cualquiera y Luke correría el riesgo❞ ★NO permito copias ni adaptaciones. ★Historia hecha con el fin de entretener. ★¡Me encanta leer tus comentarios! ★Iniciada: 3/11/22 ★Finalizada: 22/2/23