QUINCE.

2.6K 176 45
                                    

Tres meses, tres meses habían transcurrido ya, lo que quiere decir que se encontraban a finales de enero.

Estaban teniendo un muy buen mes, celebraron la llegada del año solo ellos, en su pequeño departamento, habían preparado la cena y pusieron velas y vino, como Louis no podía beber, Harry le llevó jugo de uva para simular que era vino.

Después llegó el cumpleaños de Zayn, muy increíble, a decir verdad, Liam había preparado una fiesta sorpresa para él, estuvo muy alocada como todas las fiestas que este daba, obviamente ni Louis ni Harry se la perdieron pero tuvieron que ser muy cuidadosos para evitar algún accidente que perjudique el embarazo y ninguno de los dos bebió alcohol. Sus amigos comenzaron a tener algunas sospechas, no confirmaron ni negaron nada, pues aún no se cumplia el tercer mes en ese entonces y tampoco quisieron que el cumpleaños de su amigo se tratara de ellos, Zayn siendo un excelente cómplice sólo les daba miradas nada discretas con las que les decía algo como "sé su secreto" de igual manera no dijo nada, negando saber cualquier tipo de información cuando su ahora novio, Liam le preguntaba algo.

Además, Louis también había entregado sus mejores trabajos en pintura a la galería de arte con la que su universidad tenía contratos, se espera que el próximo mes inicie la exposición para que personas de distintos lugares puedan conocer las obras de Louis, con suerte vendería alguna.

Harry había conseguido otro trabajo, no pudo rechazar la oferta cuando una editorial que apenas se empieza a abrir campo le contactó para que con su conocimiento profesional y la habilidad de leer libros completos en tiempo récord, analice y haga reseñas completamente objetivas de los trabajos de las nuevas jóvenes promesas de literatura. Era un trabajo perfecto porque se hacía desde casa, le estarían enviando un par de manuscritos mensualmente y él enviaría su parte por correo, sin mencionar la buena paga.

En cuestión a la nueva casa, ya casi estaba resuelto ese tema, el banco les informó que había una en buena área que cumplía con las características que ellos dieron y además se ajustaba al presupuesto, eso los tenía contentos, sólo estaban esperando el llamado para que pudieran ir a verla, por lo que les habían dicho, ahí vivía una familia de seis integrantes y se mudarían pronto, habían ofrecido su casa al banco y por eso este les notificó, al parecer solo estaban terminando de llevarse sus muebles, hasta entonces sólo quedaba esperar.

Como dije, un muy buen mes. Hasta hoy.

Louis estaba estresado, verdaderamente estresado, era sábado por la mañana y se encontraban él y Harry preparando el departamento para recibir visitas para la cena. Quería que todo se viera impecable y en su lugar, tomando en cuenta que contaban con la presencia de diez personas y el lugar era un poco pequeño, no podían tener nada fuera de sí, además aún faltaba preparar la comida.

—No lo vamos a lograr, Hazz, ve la hora. —dijo Louis caminando de un lado a otro, quizá exagerado un poco.

—Relájate, bebé, todo va a salir bien. —Harry tomó el rostro de Louis con una mano y su cintura con la otra, dando un gran y tierno beso.

Sirvió para que su cuerpo se soltara un poco, sólo que no lo hizo por mucho tiempo, se separó del beso de golpe.

—¿No era que el estúpido de tu mejor amigo vendría a ayudarnos? —Louis tenía el entrecejo fruncido.

—¿Hablas de Niall? ¿Tu hermano?

—Si, como sea, igual es estúpido. —Harry quiso no reír pero se le escapó la risa por la nariz a modo de resoplido y sus hoyuelos se hundieron en sus mejillas.

—Niall dijo que saldría de su piso a las cinco de la mañana, debe estar por llegar.

—Más le vale que se dé prisa porque ... —No terminó la frase, en eso la puerta principal se abrió, revelando al joven rubio con una maleta pequeña en su mano derecha.

Cama para dos. LSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora