Capítulo 27

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NamJoon venía caminando por el otro pasillo, uno donde se encuentran el área de psicología —Hola HoSeok, han pasado días desde que no vienes tan temprano

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NamJoon venía caminando por el otro pasillo, uno donde se encuentran el área de psicología —Hola HoSeok, han pasado días desde que no vienes tan temprano.—

—Hey.— saludé con alegría genuina al verlo —Ahora si tengo tranquilidad, y no ando bajo mando de nadie.—

—Ni de JiMin...— respondió, y fruncí el ceño, entonces explicó —Supongo que el doctor Park te lo dirá hoy, pero debes esperar, ahora mismo está reunido con el socio Kang... llegó hace un rato exigiendo verlo.— hizo una mueca de asco y molestia.

Pero mi reacción fue diferente, sentí como mi cuerpo se tensaba y mi instinto finalmente tomó sentido. Ambos unidos en el mismo pensamiento de reconocer el peligro que es el alfa, estando cercano al omega.

No respondí a NamJoon y giré en el pasillo, justo en el momento donde mis oídos captaron algo cayendo dentro de la oficina. Y no sonaba como algo accidental.

Me apresuré, corriendo hasta llegar a la puerta, escuchando a NamJoon gritar que no podía entrar. Pero no me importó una mierda, abrí la puerta de inmediato, encontrando a DongHo tomando la camisa blanca de vestir de JiMin.

Forzándolo a corresponder un beso, mientras su mano se perdía en las ropas pulcras -ahora desprolijas- del omega. Había un adorno hecho pedazos sobre el suelo, parecía que JiMin intentó defenderse, pero Kang lo inmovilizó. Apreté con fuerza el pomo bajo mi palma, y me impulsé dentro, viendo todas las alarmas alzarse, diciendo que esto sería una batalla perdida.

Pero en ese momento, amé a mi lobo, mi instinto me impulsó a proteger y no a ser un cobarde.

En un segundo había estampado mi puño en la cara del pedazo de mierda que estaba violando la integridad física de JiMin, de un precioso y fuerte omega.

Perdió el equilibrio y se fue sobre el estante de libros, donde pegó la cabeza. La tabla falló y los libros se fueron abajo, algunos adornos de destrozaron sobre el suelo y en la cabeza de DongHo. Aunque no se amedrentó ante eso y se levantó, intentando devolver el golpe, pero logré esquivarlo y darle un segundo golpe en su estómago esta vez.

Aguanta, aguanta hasta que puedas, incluso si es una batalla que no puedes ganar.

Escuché ese susurro.

Cuando el enojo tomó el control por completo de DongHo, logró dar el primer golpe. Justo sobre mi pómulo y ese había dolido más que el infierno.

Su fuerza está muy arriba, lejos de la mía.

Escuché el grito que soltó el omega al presenciar la pelea. Nuestras feromonas apestaban en todo el lugar.

Los golpes de DongHo comenzaron a caer, mientras escuchaba como JiMin y NamJoon llamaban para que alguien detuviera eso.

Refusing | Hopemin |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora