Gato En Mi Vida ♡ Jikook

Gatito protector

Después de unos besos en el cine, la película terminó y Jimin y yo nos fuimos. Salimos los últimos, y no solté la mano de mi pequeño por nada.

Miré la hora en mi celular. Ya era pasada la 1pm. El tiempo realmente pasó rápido.

— Mochi, ¿qué tal si dejamos las compras en el auto y vamos a un parque cercano? Yo propuse.

- ¿Un parque? - tus ojitos brillan como yo amo.

"Sí, pequeña. ¿Vamos?

Jimin asiente varias veces haciéndome sonreír. Llevé a mi bebé al estacionamiento, donde guardaba nuestras compras.

Tomé la mano de mi pequeño una vez más y lo guié hacia la calle. Caminamos una cuadra hasta llegar al parque. Suele estar lleno de flores por aquí en esta época del año, así que siempre vengo cuando puedo. Como la universidad me ocupaba, dejé de venir. Hablando de eso... Creo que terminaré la universidad en casa. Tengo miedo de dejar a Jimin solo en casa.

Jimin estaba encantado con la vista. Solté su mano y mi pequeña corrió por la hierba, lanzándose entre las flores.

Su cabello estaba lleno de mechones, lo que lo hacía lindo. Mi pequeño comenzó a jugar con las flores y a perseguir las mariposas.

Solo lo observé con una sonrisa. Mi pequeño jugó tan inofensivamente. A pesar de todo lo que ha pasado, todavía tiene una dulce sonrisa.

Observé a mi pequeño y de repente Jimin se detuvo y aguzó las orejas.

"¿Qué pasó, pequeña?" pregunto acercándome.

— Jimin escuchó un grito — dijo y noté sus pupilas, ahora eran dos líneas.

Jimin se levantó y comenzó a caminar. Lo seguí hasta que nos detuvimos frente a un árbol. Miré hacia arriba y había un gatito maullando.

— se ha perdido — dijo Jimin — ¡miau!

Jimin maulló al gatito, como si se estuviera comunicando con él.

"¡Yo subiré!"

- ¡Ey! Jimin! Espera, antes de que terminara mi discurso, Jimin trepó rápidamente al árbol dejándome sin palabras. El más pequeño bajó del árbol con el gatito en brazos.

El gatito ya había dejado de maullar y estaba acurrucado en el regazo de Jimin.

— No tiene mamá, Kookie... ¿Jimin puede tenerlo? preguntó con esos ojos de Gato con Botas.

Suspiré

— Claro, pequeño, llevémoslo a casa — digo y Jimin sonríe.

"¡Gracias, Kookie!" - dice feliz y besa mi boca. Jimin se fue y yo me quedé atrás, sonrojada.

"¡Espérame!"

[...]

En casa, observé con incredulidad cómo Jimin le daba el biberón al gatito. El gatito más pequeño sostenía el biberón con sus patitas mullidas y regordetas.

Jimin sonrió mientras acariciaba al pequeño.

"Jimin, ¿cómo le vas a llamar?"

"Jimin pensó en White", dijo lindo.

-¿Blanco? ¿Por qué?

— ¡Es porque es blanco, y tiene grandes ojitos azules! el explica.

— Sí, White es bueno... Mochi, es tarde, ¿nos vamos a dormir? digo levantándome.

"Kookie..."

- ¿Mmm?

— ¿Jimin puede dormir con "vuxe"?