— ¿Estás lista? — pregunta Merlina, las chicas se alistaban para ir a la universidad. El festival era una celebración que ocurría antes de las vacaciones de invierno, por lo que todos los estudiantes estaban volviendo a casa, pero no antes de despedirse de sus amigos.— !Si!, Estoy lista dulzura — responde Enid, terminando de ajustar su corbata, y dedicando una sonrisa a la gótica.
— No me digas así, apresúrate o llegaremos tarde.
Enid la mira, inflando sus mejillas en un puchero — ¿Por que?¿ Si apenas anoche me decías que me amabas entre suspiros y llamándome...— Enid se acerca a Merlina y le dice susurrando al oído — Cara mía♡.
Merlina sintió como un escalofrío le recorrió el cuerpo, dando un paso hacia atrás mientras cubría su oreja con las mejillas sonrojadas.
— !!C-cierra la boca!! — Merlina se da la vuelta de forma apresurada y sale por la puerta, dejando atrás a Enid, que se reía de la adorable situación, siguiendo a la morena.
— Espérame♡.
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Al llegar a Nevermore ambas se dirigieron al patio, donde estaban los demás, cada uno con su respectivo equipaje, listos para marcharse. Al notar a las chicas, todos se dan la vuelta para recibirlas entre cálidos saludos.— !Hola chicos! — Dice Enid, quien es recibida con un abrazo por Yoko.
— Enid, Merlina, es extraño verlas llegar juntas luego de lo que ocurrió ayer — Dice Eugene, acomodando sus lentes — Creí que estarían discutiendo hasta hoy.
Las chicas se dedican una mirada rápida, para luego volver a los ojos de aquel chico.
— No te preocupes, ya me encargue de castigar a Merlina — Dice Enid, con una sonrisa algo traviesa, y golpeando ligeramente con su hombro el de la morena.
Merlina ignora su comentario, y se acerca al sitio donde estaban Bianca y Lily, quienes hablaban con mucha más soltura entre ellas.
— Parece que se llevan de maravilla — Dijo la morena, mirando de forma desafiante a la sirena, quien se levanta de su asiento para estar a la par con su mirada.
— Te ves de maravilla hoy Addams, y yo que creí que te había roto la nariz, es una lastima — Bianca sonría de manera burlona ante su propio comentario, pero un tirón de su camisa por parte de Lily la hace retroceder en su broma — Me alegra verte mejor — Dice de mala gana, desviando la mirada de los ojos oscuros que la observaban.
Merlina suspira, a decir verdad no le guardaba ningún rencor a la sirena, incluso con pesar en su alma podía considerar que estaba agradecida con ella por haberla derrotado en su propio juego, cosa que jamás espero de nadie, pero eso definitivamente no era algo que Merlina admitiría, primero vestirse con alguno de los perturbadores colores de el arcoiris que admitir su debilidad.
— Gracias por tu preocupación a medias, Bianca — Bianca vuelve a mirarla, impresionada, era la primera vez que la pelinegra la llamaba por su nombre sin sonar insultante. Bianca no pudo evitar esbozar una pequeña sonrisa, para luego volver a aquellos ojos con más determinación.
—Fue un honor luchar contra ti, Merlina.
Lily sonriendo alegre, por la repentina muestra de respeto por parte de ambas no pudo evitar pensar en lo feliz que era en ese momento, ver a las dos personas que más amaba convivir sin detenerse a insultar a la otra, la dejo con una delicada calidez en su pecho que la arrullaba en la paz.
— Divina, ya es hora de irnos — Yoko toma el equipaje de ambas, y camina hacia la limusina Hummer que se detuvo en la entrada de la universidad a recogerlas.