Ella me pertenece

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⚠️Advertencia capítulo no apto para personas sensibles ⚠️

Evelyn se despertó aún desorientada. No entendía qué había pasado, no sabía dónde estaba. Se encontraba en el suelo en una habitación vacía. Podía escuchar el sonido de la música, al parecer no había pasado tanto tiempo, pues incluso aún sentía las vibraciones del gran evento de afuera. Al momento se dio cuenta de que llevaba otra ropa, traía puestas unas medias blancas y unos zapatos tipo escolar, junto con un vestido azul cielo, un delantal blanco y un listón en el cabello del mismo color. Al estilo de un cuento infantil.

La puerta se abrió y un hombre con una máscara de conejo entró, al verlo intentó correr, él cerró la puerta y quiso acercarse, pero ella comenzó a gritar y a moverse de un lado a otro intentando no ser atrapada, él la persiguió como si de un juego se tratase

—Juguemos Alicia.

La atrapó, ella pataleó y gritó desesperada, él intentó tapar su boca, pero ella lo mordió tan fuerte como pudo. Él la golpeó en el rostro haciendo que lo soltara y cayera al suelo, intentó huir arrastrándose, pero él la jaló del vestido. Pataleo desesperada, la tomó del tobillo y volvió a tirar con fuerza. Evelyn, asustada, logró patear su rostro y volver a arrastrarse.

—¡¡¡ES EL MONSTRUO REGRESÓ POR MI!!! —decía entre gritos aterrada.

Se levantó y corrió hacia la puerta, la abrió y salió corriendo por un pasillo gritando histérica. Volteaba constantemente atrás y observó al hombre seguirla. Intentó abrir algunas puertas que había a su paso, pero estas estaban cerradas. Siguió corriendo hasta unas escaleras que llevaban a la azotea del lugar. Subió, al momento que salió una corriente de aire frío golpeó su rostro. Miró a todos lados buscando por dónde escapar, pero no había salida, solo el vacío hacia la calle.

🖤🔪

—Yo no soy como tú, no los amo. Yo quiero verlos morir, me gusta verlos morir —Él sonrió.

—¿Excepto a ella? Te lastima verla sufrir.

—No, es porque ella es mía, me pertenece, yo decidiré hasta cuándo morirá, será cuando me canse de jugar con ella —dijo Darcel mientras caminaban por el pasillo del hospital.

—Una vez yo dije las mismas palabras, pero después me di cuenta de que me engañaba a mí mismo. Creí que podía controlarlo todo y no supe cómo mantenerla a mi lado. El destino nos alcanzó y cuando quise cambiarlo ya era demasiado tarde. Me la arrebataron, ahora Solo me queda esperar a que algún día el creador le dé la oportunidad de regresar y encontrarla de nuevo aquí. No cometas los mismos errores, renuncia al juego y reclama su cuerpo y alma a Azrael antes de que sea demasiado tarde. —Darcel se detuvo de golpe y frunció el ceño, Draven lo miró confundido.

—¿Qué sucede hijo de Airioch?

—Algo pasa con Evelyn.

—¿Sientes su dolor?

—No lo sé, pero algo duele aquí adentro. —levantó su mano y la empuñó en su pecho a la altura de su corazón.

—Es lo que pasa cuando un ángel se enamora, tu alma se une a la de ese ser.

—Solo son estupideces, yo no soy como tú, no soy tan débil, haré las cosas a mi manera.

Una oscuridad apareció detrás de Darcel y como si se lo tragara desapareció, Draven sonrió y siguió su camino.

Darcel entró a la casa de Evelyn a paso rápido, registró la casa buscándola, pero no la encontró.

—¡¡¡Evelyn!!! —la llamó en repetidas ocasiones. Salió a la calle y miró hacia ambos lados intentando encontrarla, cerró los ojos tratando de sentir su presencia—. ¡Maldición! ¿Dónde mierdas te metiste?

𝐄𝐥 𝐃𝐞𝐦𝐨𝐧𝐢𝐨 𝐃𝐞 𝐄𝐯𝐞𝐥𝐲𝐧Donde viven las historias. Descúbrelo ahora