𝑪𝑨𝑷𝑰𝑻𝑼𝑳𝑶 𝑫𝑰𝑬𝑪𝑰𝑺𝑬𝑰𝑺

1.4K 62 11
                                    

"𝙰𝚞𝚗 𝚝𝚎𝚗𝚐𝚘 𝚖𝚞𝚌𝚑𝚘 𝚊𝚖𝚘𝚛 𝚎𝚜𝚌𝚘𝚗𝚍𝚒𝚍𝚘 𝚋𝚊𝚓𝚘 𝚖𝚒 𝚙𝚒𝚎𝚕"

"𝙰𝚞𝚗 𝚝𝚎𝚗𝚐𝚘 𝚖𝚞𝚌𝚑𝚘 𝚊𝚖𝚘𝚛 𝚎𝚜𝚌𝚘𝚗𝚍𝚒𝚍𝚘 𝚋𝚊𝚓𝚘 𝚖𝚒 𝚙𝚒𝚎𝚕"

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

NICOLE MAYBANK

Tardaron, exactamente —ni un minuto arriba, ni un minuto abajo—, diez minutos en encargarse de que mi habitación se convirtiera en la boca del metro a primera hora de la mañana en cualquier ciudad de Estados Unidos. Tenía mi primera clase en menos de una hora y media, tardaba casi cincuenta minutos en llegar y por lo que estaban presenciando mis ojos, hoy era uno de esos días en los que me iba a tocar sentarme en la última fila por haber llegado tardísimo a clase.

    Por un momento pensé que nos estaban robando o algo porque pasamos del silencio absoluto que reinaba a esas horas de la mañana en mi casa a escuchar carreras y grititos emocionados para ser un simple lunes. La primera en entrar fue Martina, seguida de mi madre, mi tía Kiara, mi tía Tammy y, por supuesto, mi tío John B. Los cinco se quedaron en la puerta, uno encima de otro, con sonrisas que parecían más de personas que no estaban muy bien de lo suyo, que de personas normales que se han levantado contentos por empezar el día. Yo los miré esperando a que dijeran algo, pero ellos solo me miraban con picardía mientras parpadeaban algo más rápido de lo habitual. Acabé resoplando porque era más que obvio que no iba a salir de aquí sin antes largarle al club de cotilleo que es lo que había pasado entre Connell y yo.

    —¿Quién de vosotros va a empezar con el interrogatorio? —pregunto, dejando de lado la maleta y dejándome caer sobre la cama. Mamá y Martina se miran y es mi madre la que avanza a paso ligero hacia mí.

    —Cariño, es guapísimo —dice, súper entusiasmada—. Mira, os hice ayer una foto a los dos por la ventana para enseñárselas a tu tía.

    —No me puedo creer que le hayas escondido a tu tía semejante muchacho—se queja mi tía Kie.

    —¡Eh, bombón! Estoy aquí —interviene el tío John B.

    —Lo sé. Que esté a punto de casarme contigo no significa que sea ciega —se defiende la morena—. Pero no estamos aquí para debatir esto —dice, rápidamente—. Dale, rubita, cuéntale a tu tía todos los detalles —me anima, acercándose a mí, mientras me da unas palmaditas emocionada.

    —Y a tu tío, a tu tío cuéntaselo también —añade mi tío John B tan emocionado como el resto de mujeres que hay en la habitación.

    —No la presiones, que parecéis el FBI cada vez que hay algo nuevo en esta familia —interviene mi tía Tammy, intentando ser la persona seria del grupo.

    —¡Por Dios, Tam! Si venias diciendo que te morías de ganas de escuchar toda la historia desde el principio —la pica mi tío John B.

    —Eso no es cierto —responde esta, indignada.

SALVANDO MR SKI LOUNGEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora