PROLOGO:
- Por favor espera - me grita mientras que yo bajo por las escaleras.
- Adiós Christian - digo caminando mas rapido para irme pero no puedo dar ni dos pasos mas ya que un par de brazos me abrazan de la cintura desde atras
Me voltea y en es...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Ibamos caminando hacia al carro Christian y yo. Al llegar a este él me tomo de la mano y se me queda viendo como si me quisiera decir algo.
- Taylor a La escala. - Taylor asiente y arranca.
Christian de nuevo pone su mirada sobre mi.
- Ya dilo.
- ¿Qué? - me dice confundido.
- Dime lo que me quieres decir - el me miro confundido pero a la vez nervioso - Vamos. Solo dilo, tus ojos lo reflejan.
- ¿Confías en mi? - pregunta.
- ¿Qué? - en la voz se me nota lo shockeada que me dejo.
- Ana, tú... ¿Confias en mi? - Por primera vez su mirada se ve un poco vulnerable.
« ¿Confiabaen el?... Creo que sí. »
- Si ¿Porqué? - pregunto curiosa pero a la vez intrigada.
- No, por nada. Por cierto... Que bella te ves - me dice.
Al verlo a los ojos puedo ver esa mirada tan familiar que hasta miedo me da, direccionada a mis labios.
- Te estas mordiendo el labio... - dice con la voz ronca.
Apenas soy conciente de eso lo dejo de hacer.
Christian se me acerca viendo fijamente mis labios.
- ¿En qué quedamos que pasaría si te mordias ese labio? - pregunta.
Me entran unas ganas malditamente poderosas de besarlo. Me siento en su regazo, lo agarro del cuello y lo acerco a mí.
- Christian lamento decirte que me acaban de entrar unas ganas de besarte que no voy a contener asi que... - lo agarro del cabello y lo jalo hacia mi besandolo.
Puedo sentir decenas de fuegos artificiales en mi estómago. Este es un beso donde yo tengo el control y eso me encanta.
Con mi lengua toco sus dientes y el abre la boca, meto mi lengua y está baila con la suya.
« ¡Dios! ¡Me encanta! »
Coloca sus manos en mis caderas y su lengua intenta tomar el control pero no lo dejo.
Lo jalo del cabello un poco mientras se lo alboroto con mis dedos. Gimo contra su boca, disfrutando del sabor de este beso.
Siento su ereccion golpeando por salir de sus pantalones y eso me hace reaccionar. Sin aire en los pulmones me separo de su boca y me bajo de su regazo.
Me siento en mi lugar mientras intento respirar bien.
- ¿Excitado Señor Grey? - le digo con tono burlón. Al voltear, veo que todavía no se ha movido de dónde lo deje e inevitablemente se me suelta una carcajada.
