Suspiro adentrándome en el cuarto. Toco los accesorios que hay.
Varas, látigos, vibradores, pinzas, mordazas.
¿Bridas para cables? ¿Eso para qué?
« ¡Joder! ¡Aparte tiene de todo! ¡Hasta lo que no conozco! »
Acaricio un látigo de 8 tiras negro de cuero.
- Es un látigo de 8 tiras - me dice al parecer querindome explicar lo que es.
Sonrío cínica sin que me vea y niego con la cabeza incrédula.
« El primer hombre que me interesa en mi vida y llega con un látigo y un contrato de confidencialidad. »
Mientras veo lo que hay alrededor me incomodó de pensar en los recuerdos que esto me trae. Sacudo la cabeza intentando olvidar eso.
Sigo caminando como si nada hasta que escucho un susurro detrás de mí.
- Por favor, dime algo. - dice con voz suplicante Christian.
Sonrió cínica y niego con la cabeza. Ya llegué a la etapa del enojo.
- Así que dígame amo ¿Con qué me quiere castigar? ¿Vara? ¿Fusta? ¿Un látigo tal vez? ¡No, ya se! ¿Me quiere amarrar y luego follar verdad? - dije viéndolo fríamente.
- ¿¡Qué!? - grita Christian con los ojos a segundos de salir de sus cuencas.
- Christian ¿Me quieres de tu sumisa? - le pregunto burlona pero intimidante.
Me acerco a el y me cruzo de brazos esperando su respuesta.
- ¿Qué? ¿Acaso quiere verme desnuda, acostada, atada y toda a su merced amo? - le murmuró burlona mientras muerdo mi labio inferior.
Veo como se va tensando y un bulto crece en su entrepierna.
Bajo la cabeza y me empiezo a reír estruendosamente.
- Esto no me puede estar pasando. - niego con la cabeza mientras me sigo riendo y me acerco a él. - No soy ninguna puta personal Christian y mucho menos soy estúpida para que me guste el dolor. - le susurro en la oreja, le muerdo el obulo y me alejo de él.
- Pero eso si. Ten por seguro que hasta hace una hora te me hacías perfectamente delicioso. - digo y salgo del cuarto de juegos
Bajo las escaleras y me encuentro con Gail.
- ¿Señorita...
- Adiós Gail. Mucho gusto en conocerte y nos vemos luego.
- Pero Ana...- ¡Ana! - escucho el grito de Christian.
Me voy rápidamente hacia el elevador pero antes de poder entrar unas manos en mis caderas agarrándome desde atrás me lo impiden.
- Suéltame en este instante Christian.
- No. Necesito que me escuches y..- ¡No me interesa! ¡Suéltame ahora mismo! - grito mientras intento quitar sus manos de encima mío.
- Nadie me grita. Lo odio - me dice mientras aprieta un poco más mi cadera con sus manos y pega su cuerpo al mío.
- Lo lamento tanto pero ya llego la primera. - digo cínica y sonrio falsamente.
- Me encantas. - dice mientras inhala en mi cabello.
- ¿Qué dices?
Pude esperar que me dijera muchas cosas, pero no eso.
- Que me encantas Anastasia. Tu belleza, sencillez, valentía, sensualidad pero a la vez esa timidez que me enloquece. En ocasiones eres débil que dan ganas de protegerte pero en otras... En otras eres tan fuerte como el acero. Simplemente me fascinas y por eso es que te deseo de mi sumisa. - Esconde su cara en mi cuello mientras me abraza por la cintura con fuerza. - Anastasia te aseguro que te puedo dar mas placer que dolor. No todo lo de ese cuarto es dolor.
« ¿Que? Claro que no. Todo lo de ese cuarto es puro dolor, absolutamente todo. »
Suspiro mientras niego con la cabeza.
« Me voy a arrepentir de esto. »
- ¿Podrías explicarte mejor? - al preguntar eso, él sonríe.
- Claro. - dice y me carga sobre su hombro.
- ¿¡Christian pero que te pasa!? ¡Bájame!
Puedo escuchar su risa para después llevarme hacia un cuarto. Al entrar al cuarto veo que es el suyo.
« ¿¡Qué carajos quiere hacer!? »
Espero les gustara el capítulo.
Voten y comenten plis.Sin nada más que decir.
Hasta luego nen@s...
A2P9_Greysessed
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"El Sufrir de Anastasia" EDITANDO
FanficPROLOGO: - Por favor espera - me grita mientras que yo bajo por las escaleras. - Adiós Christian - digo caminando mas rapido para irme pero no puedo dar ni dos pasos mas ya que un par de brazos me abrazan de la cintura desde atras Me voltea y en es...