Mellizas

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- por favor se que puede hacer algo, hasta deshizo el endurecimiento de Rainer - dijo aquella niña con lagrimas en los ojos.

- espera, ¿hace cuanto tiempo pasó eso? - respondió el mismo chico de mis anteriores sueños.

- Armin - dijo una chica de cabello corto y negro.

Por algún motivo esto no me gusta nada, inmediatamente el chico se fue corriendo parecía un poco desesperado cuando se fue la chica de cabello corto se voltio hacia mi y me miró con una cara bastante triste.

- estoy bien Mikasa, sabía que esto iba a pasar tarde o temprano, aunque no pensé que tan pronto - dije con lagrimas en los ojos.

Paso casi un día y cuando el chico llegó comencé a ver borroso, desperté de una forma muy brusca y cuando miré mi celular aún faltaba una hora para que sonara el despertador.

- que extraño, ya hasta Mikasa aparece en mis sueños - susurre - pero ¿porque estaba llorando? - preguntas invadían mi cabeza hasta que sentí como vibro mi celular en mi mano.

Buenos días, espero verte en la preparatoria pronto tengo algo para darte.

~ Armin

Cuando vi el mensaje no logre entender nada, apenas conocí al chico ayer y ya tiene algo que darme esto es raro y estar cerca de él me dan ganas de llorar, no me gusta nada, mientras pensaba en eso me aliste y baje a desayunar, Mikasa ya se encontraba abajo con mamá y papá.

- buenos días - dije para todos

- que milagro que estas despierta a esta hora - dijo mi papá con cara de felicidad.

Normalmente no veo a mi papá antes de irse a trabajar ya que se va temprano, pero parece que ese sueño tiene sus ventajas, adoro a mi papá así que siempre espero ansiosa la noche para verlo y hablar de nuestro día, algo así es como mamá en realidad todos somos muy unidos y nos contamos casi todo, confío en mis padres ellos siempre me dan los mejores consejos y no me juzgan cuando hago algo mal, para eso ya tengo a Mikasa, comenzamos a desayunar y hablar de cosas triviales que habían pasado ayer como de los clubes a los que asistiriamos Miksada y yo, terminamos de desayunar y papá se ofreció a llevarnos a la prepararía, ambas subimos al coche y antes de arrancar logré ver una silueta familiar, en ese momento mi papá llamó a esa silueta cuando se acercó vi que era Levi.

- hola Levi, buenos días - dijo mi papá saludandolo.

- buenos días señor - dijo Levi inclinándose.

- te llevo, sube - dijo señalando el auto.

Levi intento negarse pero fue en vano así que subió y se sento a mi lado, mientras Mikasa iba al frente con mi papá. Mis padres adoran a Levi desde que me ayudó hace tres años sin embargo a Mikasa casi no le agrada pero intenta llevar las cosas en paz por mi, ya que sabe que los dos son muy importantes para mi.

Llegamos bastante rápido a la prepararía, cuando íbamos bajando mi papá invito a cenar a Levi a lo cual es acepto sin duda, supongo que no quería despreciar, hace un tiempo no va a mi casa, nos despedimos de mi papá y entramos Levi se despidió de ambas y luego entramos al salón.

Pasaron dos horas y cuando estábamos en un pequeño receso escuché mi nombre.

- tú eres Megumi ¿verdad? - dijo un chico alto y castaño.

En nuestra próxima vida ~Armin Arlert ~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora