El Príncipe Cortado

Capitulo 45: Secreto

La vida de Remus Lupin en Azkaban fue horrible.

Lo enviaron al lugar temido con nada más que la ropa que llevaba puesta, y con su varita los guardias lo guardaron para siempre y no tuvo oportunidad de luchar contra la terrible presencia de los Dementores que deambulaban por la prisión. Su celda de detención incluso fue reforzada con pintura plateada en las barras y paredes para que no pudiera escapar usando su otro yo.

Cada vez que surgían sus aflicciones de hombre lobo, casi se alegraba de ello, ya que en realidad podría olvidar su miseria aunque solo fuera por una noche. Podría haber jurado que el Ministerio acordó colectivamente ponerlo en algún lugar donde todos los demás prisioneros y guardias pudieran ver que se burlaba de sí mismo mientras era una bestia sin sentido. Su atuendo de prisión casi siempre estaba hecho pedazos al día siguiente y la tercera vez que sucedió, nunca obtuvo reemplazos. En cambio, tuvo que recurrir a usar periódicos viejos como cojines y mantas dentro de su fría celda, acurrucándose muy cerca para conservar el calor corporal.

Después de casi siete años con algunas personas de su lado, Remus se encontró completamente vulnerable a las burlas y silbidos de otras personas sobre su desgracia mensual. Inicialmente tenía grandes esperanzas de que Albus Dumbledore intentara resolver el misterio del asesinato de Sirius Black y lo liberara, ya que el gran mago anciano lo había ayudado a obtener una educación adecuada en el pasado.

Pero durante el tiempo que permaneció en su celda de detención, nunca recibió visitas. Con el paso del tiempo, Remus ya no conocía la alegría. Si realmente había una bendición disfrazada, era que no necesitaba elegir un bando en la guerra. Todos los periódicos que leía hablaban de destrucción y caos, y notó sombríamente que al lado de la Luz no le iba bien en ese momento.

Por un breve momento, se preguntó si Albus Dumbledore realmente era el mago más fuerte del mundo.

Estaba a punto de dormirse por el día cuando escuchó una voz alegre que lo saludaba. Despertado sobresaltado, Remus miró fuera de su celda solo para ver a nadie.

"No tengas miedo," habló el fantasma como si tuviera una amplia sonrisa, "Puedo decir que eres un alma valiente, todavía aferrándose a la esperanza de que puedas salir de aquí algún día. Como aplauso a sus esfuerzos, espero que les gusten estos".

Justo ante sus ojos, Remus vio que comenzaban a aparecer elementos; ropa limpia, comida y bebida, incluso más periódicos. Sin embargo, todavía no vio a nadie, incluso cuando la persona pasó las cosas a través de uno de los espacios entre las barras.

Podría ser...?

"Espero que cuides bien esos atuendos; son realmente difíciles de conseguir y no estaré aquí siempre. Cheerio." Con un silbido, quienquiera que haya sido, se alejó. Remus tomó el periódico y palideció al leer la noticia de que los padres de James Potter fallecieron a causa de la viruela del dragón, junto con otras personas mayores.

Durante los siguientes días, el misterioso visitante pasó sin decir una palabra, simplemente le dio a Remus los artículos y se fue igual de rápido. Nunca escuchó a los otros prisioneros hablar con avidez ni tenía intenciones de compartir sus pertenencias recién descubiertas con otros. Después de todo, el mundo en Azkaban era despiadado.

Pasó casi una semana cuando el hombre desconocido le entregó el Diario El Profeta del día y dijo con deleite: "Creo que le gustará esta edición, Sr. Lupin".

Frunciendo el ceño, Remus agradeció con escepticismo y leyó el titular, que decía:

EL HEREDERO DE POTTER ANUNCIA MATRIMONIO EN OCTUBRE

Sus ojos se llenaron de lágrimas al ver a James, Lily Evans y Peter Pettigrew acurrucándose en la fotografía adjunta y cómo deseaba poder unirse a ellos también. Solo podía esperar que su misterioso visitante también fuera brillante y pudiera ayudarlo a encontrar una manera de salir de la prisión, a pesar de lo poco probable que fuera.