El Príncipe Cortado

Capitulo 49: Arrepentimiento

Fue completamente doloroso.

Las heridas del pecho le pesaban, la del cuello le hizo ahogarse con su propia sangre y la de la cabeza... le dolía, terriblemente y aunque no quería nada más que abrazar su paz eterna en la muerte, estaba atrapado en el plano mortal por su imprudente decisión.

(¿Era realmente malo para él vivir más tiempo a cambio de otra vida, una que lo había torturado y humillado mucho en el pasado?)

Las agudas llamaradas de las heridas recorrían su cuerpo regularmente, como si le recordaran que sus Horrocruxes no eran más que un dolor eterno que se había inducido a sí mismo, pero eso lo hizo más decidido a vivir, sobrevivir y buscar venganza.

El espacio en blanco ahora era extraño para él, ya que la colorida entrada que una vez vio ya no estaba. El rojo; sin embargo, permaneció pero parecía como si hubiera sido demolido y reparado una y otra vez hasta que ya no pudo discernir cómo se veía en realidad. Solo había un pequeño agujero entre los escombros, y sabía que mientras el agujero siguiera allí, podría regresar al mundo de los mortales.

Había pensado en muchas cosas con respecto a su vida, y estaba enojado y afligido por el horrible trato de su padre hacia él y su madre. Si el hombre la había amado tanto, ¿por qué la golpeaba? ¿Por qué el hombre tuvo que mostrar su amor después de su muerte, y qué de él? ¿Era realmente el niño demonio que el hombre había dicho?

Mientras se acurrucaba contra sí mismo mientras esperaba en el espacio en blanco, Severus Prince se preguntó si realmente estaba maldito con la mala suerte o si el Destino estaba siendo cruel con él por violar las órdenes de la vida.

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Lucius Malfoy no pudo evitar sentirse preocupado.

El Señor Oscuro una vez más había tratado de organizar una fiesta entre sus Mortífagos y por las miradas que compartió con sus otros compañeros, sabía quién iba a ser celebrado.

Severus Snape.

Lucius no odiaba al joven; por el contrario, Snape había sido un activo excelente para su causa. Todavía estaba orgulloso de sí mismo al sugerir tener a Snape en las filas del Señor Oscuro. Pero un simple anuncio estaría bien, ¿por qué necesitarían un festín?

Aunque había reforzado el sistema de seguridad de su mansión, Lucius estaba ansioso, lo que notó rápidamente su esposa embarazada, Narcissa.

"No te estreses demasiado, querida", había dicho con dulzura, "¿de qué otra manera nuestro bebé va a tener un padre amoroso si tienes canas antes de los 40?".

Lucius había puesto los ojos en blanco ante eso, pero realmente no podía esperar a que su hijo apareciera.

Mientras supervisaba los preparativos con el Señor Oscuro y los Lestrange, se sobresaltaron por un crujido repentino y Lucius frunció el ceño al ver que un elfo doméstico desconocido se dirigía nerviosamente hacia el Señor Oscuro y sacudía su túnica.

Sus ojos se abrieron con la mayor incredulidad. ¡Un elfo doméstico había tocado la túnica del Señor Oscuro y aparentemente le estaba haciendo señas para que lo siguiera! ¡¿Quién pensó el elfo que era, para ordenar al mago más grande de la historia reciente?!

Pero para su sorpresa y la de todos los demás, Lord Voldemort palideció y se volvió hacia la pequeña multitud horrorizado: "Primero pongan esto en espera; Tengo algo importante que ver."

Cuando el Señor Oscuro se fue con el elfo doméstico, a Lucius apenas le importó la burla molesta de Bellatrix y se preguntó a quién pertenecía la criatura.