El Príncipe Cortado

Capitulo 52: Contemplación

Lord Voldemort tenía los dedos sobre el escritorio de la biblioteca de Malfoy Manor; sus ojos rojos estaban muy abiertos con el ceño fruncido mientras reproducía lo que Francesca Zabini le había dicho en ese momento.

Había una profecía. Una profecía que sonaba tan extravagante pero tan aterradora que el Señor Oscuro no pudo evitar estremecerse al saber que alguien pondría fin a su reinado por el que había trabajado duro. Y solo le quedaba alrededor de un mes para saber quién sería el niño.

Tendría que discutirlo a fondo con su heredero sobre qué hacer al respecto.

Un leve silbido de preocupación entró en sus oídos y se giró para ver a su serpiente marrón, Nagini se deslizaba lentamente hacia él. Había crecido significativamente desde que él, Severus Prince y Corvin Adrick la trajeron a casa desde Estados Unidos hace más de cuatro años y sonrió brevemente al ver los intrincados patrones en sus escamas.

"¿Vamos a ir a la casa de Severus?" ella preguntó.

"Todavía no ", respondió mientras le rascaba la cabeza ligeramente, "Bellatrix vendrá pronto". 

Unos minutos más tarde, las puertas de la biblioteca estaban abiertas y entró Bellatrix Black-Lestrange, que sostenía un pequeño paquete en la mano.

"Mi Señor", saludó dulcemente mientras se inclinaba y besaba el borde de su túnica negra.

"Levántate, Bellatrix. ¿Supongo que no había nada malo en Gringotts?"

La mujer resopló, "A los goblins no les importa mucho la gente; después de todo, atesoraron los tesoros de aquellos que ya no tenían herederos."

Lord Voldemort solo tarareaba. Cómo deseaba que sus ancestros Gaunt no hubieran derrochado la riqueza de Salazar Slytherin simplemente por su rara herencia de lengua pársel, pero ya había sucedido y todo lo que podía hacer ahora era atesorar los únicos elementos que había poseído (a la fuerza); el anillo que sostenía la Piedra de la Resurrección (que ahora era de su heredero) y el relicario de Slytherin alrededor de su cuello.

Cuando Bellatrix le tendió el paquete, se tomó un tiempo para desenvolverlo y sus ojos rojos brillaron con gran deleite al ver la copa dorada en su mano.

Su tiempo de trabajo en Borgin y Burke's fue ciertamente maravilloso, viendo que podía encontrar la taza de Helga Hufflepuff a través de él. El Señor Oscuro enfocó su aura mágica alrededor del objeto sagrado, y estaba muy complacido de saber que el premio escondido dentro todavía estaba intacto.

"Has hecho un trabajo maravilloso", comenzó y le dio a Bellatrix una sonrisa genuina. Los Black y los Malfoy eran de tal ayuda para sus Mortífagos que no podía soportar la idea de que lo traicionaran en el futuro. Después de despedir a la mujer, Lord Voldemort miró la taza con los ojos entrecerrados.

Tendría que esconder todos sus Horrocruxes, y aunque Bellatrix Lestrange había hecho su trabajo lo suficientemente bien, todavía estaba bastante paranoico de que pudiera extraviarlo. Después de todo, solo eran humanos.

Encogiendo a Nagini, el Señor Oscuro la envolvió alrededor de su brazo antes de invocar una pequeña bolsa y poner sus objetos preciados en ella antes de irse a Prince Manor con una presión del colgante Traslador de la familia.

************************************

En la cámara de piedra cercana a Prince Manor, el Rey de las Serpientes estaba pasando el mejor momento de su vida mientras nadaba a través de la enorme piscina.

Era casi el momento en que la gigantesca serpiente mudaría su piel, y estaba muy feliz de que ya no tuviera que raspar las viejas escamas de su cuerpo por el suelo áspero y frío. El agua tibia calmó todo su cuerpo y cuando atravesó la superficie acuosa, sacudió la cabeza levemente antes de volverse hacia su maravilloso maestro, Severus Prince.